Los Golden State Warriors han empezado con todo la temporada NBA 2023-2024. Después de perder su primer estreno ante los Suns sin Draymond Green han ganado cuatro seguidos. Su diferencial de +9,8 puntos se traduce en un ritmo de 64 victorias, según Cleaning the Glass. Y son uno de los 10 mejores tanto en ataque como en defensa en ambos lados del campo, con la 10ª mejor ofensiva y la 4ª mejor defensa.
A la cabeza de toda esa mejora está, por supuesto, Stephen Curry, que vuelve a jugar a nivel de MVP. Pero el jugador con el mayor impacto en el equipo no es otro que su nuevo sexto hombre, Chris Paul.
Paul ha logrado muchas victorias a lo largo de su carrera. Y ahora lo está haciendo de nuevo en un rol de suplente y ni siquiera ha estado cerca de jugar lo mejor que podría esperarse. Su tiro ha caído a plomo: está acertando sólo el 38% de sus tiros de campo y acumula un 1 de 19 de lejos. Pero está haciendo todo lo demás tan bien que está convirtiendo a los Warriors en un legítimo contender al campeonato.
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Cómo convierte Chris Paul a los Warriors en candidatos
Durante el apogeo de los Warriors, Steve Kerr logró que su equipo adoptara el mantra de la fuerza mediante los números, en inglés el lema era "Strength in Numbers". Sí, Golden State tenía a Curry, una estrella generacional. Pero ganaban partidos gracias a la profundidad de su segunda unidad y a las contribuciones de todos.
Esa estrategia fracasó por completo el año pasado. Jordan Poole fue muy negativo según los datos de on/off, Jonathan Kuminga y Moses Moody no pudieron reemplazar el aporte de Otto Porter Jr. y Nemanja Bjelica, y Gary Payton II tuvo que lidiar con lesiones después de regresar al equipo.
La segunda unidad rendía incluso peor cuando Curry no estaba sobre el parqué. La temporada pasada, los Warriors fueron superados en esos minutos por 2,2 puntos por cada 100 posesiones en la Fase Regular y la friolera de 14,1 tantos por cada 100 acciones en los Playoffs, según Basketball-Reference.
Paul ha solucionado ese problema y ha convertido a la segunda unidad en una de las mayores fortalezas del equipo. Esos mismos datos sobre el on/off los sitúan a los californianos superando a los equipos por más de 26 puntos por 100 posesiones sin Curry jugando.
CP3 ha mejorado a todos los jugadores suplentes al darles el balón en sus lugares favoritos. El rendimiento de Payton en el aro aún no ha llegado a ese punto, pero cada día se parece más al jugador que fue en 2022. Dario Saric ha pasado de ser un jugador cuyo salario fue descartado para ahorrar dinero la temporada pasada a un interior abierto muy capaz de producir en ataque. Mientras, Moody y Kuminga están teniendo los mejores años de sus cortas carreras.
El veterano base fue fichado con el objetivo de limitar las pérdidas de balón de los Warriors, lo que ha sido una gran debilidad durante estos años. Y, para sorpresa de nadie, ha hecho precisamente eso, promediando 8,2 asistencias y sólo 1,2 pérdidas. En ese sentido, los californianos han pasado del último lugar en esta estadística el año pasado al 19º lugar, casi en la media de la liga.
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Chris Paul y Stephen Curry están funcionando juntos
La preocupación al añadir a Chris Paul a Golden State Warriors estaba relacionada con cómo un base tan veterano y dependiente del bloqueo directo iba a encajar en una ofensiva tan dinámica como este. CP3 insistió en que esas preocupaciones eran exageradas y, hasta ahora, parece cierto.
Puede que Paul y Curry no partan los dos de titulares, pero los han estado en las alineaciones de final de partido. Han sido efectivos, superando a sus oponentes por 13 puntos en sus 72 minutos compartidos, según PBP Stats. Y CP3 ha sido bueno encontrando a Steph para darle el pase decisivo en acciones como estas:
Paul también ha ayudado a mantener bajos los minutos de Curry. La estrella jugó sólo 32 minutos en una victoria sobre los Kings. Cuando se le preguntó cómo pudo hacer eso, Kerr dijo a 95.7 The Game que "es mucho más fácil cuando tienes a Chris Paul".
Chris Paul está haciendo todas las cosas pequeñas
Los Warriors van a tener problemas con los rebotes cuando Paul esté en cancha. Pero ha hecho su parte con sus 4,6 capturas por partido, su mejor dato desde 2020. Está encontrando la manera de conseguir esos rebotes ante rivales más grandes y armar rápido la ofensiva.
Esa habilidad se extiende a la defensa. No está cerca de ser el base defensivo que fue en su mejor momento, pero fue decisivo en la posesión al poste bajo en el cierre ante los Kings.
Chris Paul will NOT be moved in the post pic.twitter.com/0pRMd7olEU
— Joe Viray (@JoeVirayNBA) November 2, 2023
La química que ha aportado Paul también ha sido sobresaliente.
"El año pasado tuvimos un equipo terrible en lo que respecta a la química", le dijo Draymond Green a Kendra Andrews de ESPN. "Fue difícil venir a trabajar. No fue divertido. Así que este año se ve la alegría en las caras de la gente cuando vienen. Hay muchos que se quedan más de dos o tres horas simplemente hablando. Llegar dos o tres horas antes sólo para estar aquí. Empiezas a ver eso y piensas: 'Está bien, este es un grupo al que le gusta estar juntos'".
Este sigue siendo el equipo de Curry y queda mucha temporada por jugar. Pero Paul ha manejado su paso como suplente con buen nivel y ha sido brillante en ello. Lo que es aún más aterrador para los oponentes es que está haciendo todo esto sin anotar en suspensión.
