El estadio Mercedes-Benz de Atlanta, Georgia, es uno de los más imponentes de Estados Unidos. Por su capacidad, de 71 mil espectadores, y por todos los lujos de su modernidad: fue inaugurado recién a mediados de 2017.
Sin embargo, su debut como estadio de la Copa América no fue el mejor: las tribunas estuvieron colmadas de fanáticos y el escenario lució imponente, pero el campo de juego molestó a los futbolistas de Argentina más allá de su victoria ante Canadá por 2-0.
Es que el estadio, que habitualmente es utilizado por Atlanta United -equipo donde juega Thiago Almada- en la MLS, y también por los Atlanta Falcons del fútbol americano, tiene como césped el sintético FieldTurf que es habitual en la NFL, pero hay un problema para este torneo: Conmebol obliga a que el césped utilizado sea natural.
Por lo tanto, luego del 2-2 entre Atlanta United y Houston Dynamo por la MLS del 15 de junio se instalaron panes de césped natural para cumplir con el reglamento. Pero el estado en el que se presentó todo visiblemente no fue el mejor, y complicó a la precisión de los futbolistas.
Las quejas de los jugadores de Argentina por el pésimo estado del césped de Atlanta
"Lo hablamos después de la entrada en calor, no estaba en las mejores condiciones, no nos favorece para nuestro juego, pero sacamos adelante un gran partido", dijo Julián Álvarez, el autor del primer gol argentino.
"La cancha es un desastre. Pusieron pan de pasto encima de un sintético y parecía un trampolín cada vez que recibíamos la pelota", declaró el arquero Emiliano Dibu Martínez, mucho más terminante.
"Eso no nos ayuda a nuestro juego, pero ahí te das cuenta de que nos ponen cosas en el camino y nosotros somos un equipo que va y va", agregó el marplatense.
“Hace 7 meses sabemos que vamos a jugar acá y cambiaron el césped hace dos días. No jugamos en una cancha decente. Se pareció a Arabia pero con la diferencia que ahí jugamos en un campo apto. No se puede así”, sumó en sus declaraciones Lionel Scaloni, el DT argentino.
El estadio será utilizado solamente para un partido más de la Copa América: el encuentro entre Estados Unidos y Panamá del 27 de junio, por la fecha 2 de la fase de grupos.
¿Sucederá algo semejante con alguno de los demás escenarios de la Copa?
