Red Bull terminó el domingo en Miami con una sonrisa con la victoria de Max Verstappen. Sin embargo, y más allá del cuarto lugar, Sergio Pérez se fue de la Florida con cara larga. El mexicano volvió a presentar problemas mecánicos en su monoplaza, lo que lo marginó de la pelea. Checo se tenía muchísima confianza, incluso consideró que podría haberse quedado con el Gran Premio.
Pérez largó cuarto y mantuvo dicha posición durante toda la carrera. Un problema de sensores en el motor lo hizo perder potencia y esto fue aprovechado por Carlos Sainz, que rápidamente tomó una distancia considerable. Con el cambio de neumático durante el coche de seguridad tuvo una nueva opción contra el español de Ferrari, pero el vehiculo no rindió.
"Estaba en un buen lugar. Desafortunadamente, incluso con el DRS, no pude acercarme a Carlos, el déficit en la recta era bastante alto. Estaba empujando muy fuerte para mantenerme cerca de él en las curvas. Mis neumáticos se estaban sobrecalentando. Así que en cuanto he tenido una pequeña oportunidad, he ido a por ella. Estaba muy sucio fuera de línea", resaltó Pérez.
🗣🇳🇱 'It was tough out there, so I'm very happy for the win.'
— Oracle Red Bull Racing (@redbullracing) May 9, 2022
🗣🇲🇽 'I think today, we could've done a 1-2. I did all I could to be on the podium.'
Max and Checo react to the #MiamiGP
Y agregó: "Con un motor normal, habría tenido una oportunidad. Tenemos que seguir trabajando duro porque cada vez encontramos diferentes problemas. Por suerte hemos conseguido terminar la carrera. Creo que en un momento dado estuve muy cerca de tener que abandonar".
Desde Red Bull confirmaron el problema del mexicano y el jefe del equipo, Christian Horner, entregó algunos detalles. La autoridad aseguró que el Checo tuvo "mucha mala suerte" y que esto le provocaba una pérdida de unos 30 caballos de potencia. Esto impactaba en tener hasta menos de 10 km/h en las rectas.
"Tenía una oportunidad cuando lo llamamos a boxes y le dimos la ventaja de los neumáticos", dijo Horner. "Sin ese problema, incluso podría haber terminado segundo", agregó.
La próxima prueba será en el GP de España, donde Red Bull tendrá que demostrar que puede entregar un monoplaza fiable. Por el momento eso no ha sucedido. El año pasado, en Montmeló, el mexicano llegó en el quinto lugar; el triunfo quedó para Lewis Hamilton.
