El partido amistoso en el que el Atlético de Madrid goleó por 4-0 al Numancia este miércoles quedará para la historia. No por su resultado o sus goles, que prontamente serán olvidados como sucede en casi cualquier encuentro de pretemporada, sino por el hecho anecdótico que sucedió alrededor de Antonio Gomis.
Gomis, español de 19 años y portero del Atlético de Madrid B, ingresó por primera vez en un partido del primer equipo pero no lo hizo para defender su propia meta, sino con el objetivo de marcar un gol en la portería rival, aunque el Atleti ya goleaba por 4-0 cuando él reemplazó a Mario Hermoso a los 76 minutos.
¿Por qué tuvo que ingresar Gomis? Se debió a que Hermoso se lesionó en el tobillo izquierdo y el entrenador Diego Pablo Simeone había realizado 11 modificaciones en el entretiempo del partido. Solo le quedaba un jugador disponible en el banquillo: se trataba de Gomis, el tercer portero de la plantilla. O ingresaba él o el Atleti se quedaba con 10 jugadores sobre el campo.
Acaba de entrar Antonio Gomis (portero del Atleti B) de jugador y con la camiseta de Felipe. Lo de este equipo es surrealista pic.twitter.com/kQPoI1o0iH
— 🅿 (@finallyxpablo) July 27, 2022
El joven oriundo de Elche, con experiencia en las canteras del Elche y el Real Madrid, saltó al campo sin los guantes y al lado del brasileño Matheus Cunha y no lo hizo mal, aunque probablemente nunca más durante toda su trayectoria como futbolista profesional vuelva a jugar en otra posición que no sea la de guardameta.
Casos similares al de Antonio Gomis: porteros jugadores de campo
En el fútbol hubo varios porteros goleadores, como José Luis Félix Chilavert o Rogério Ceni. De hecho en Argentina, en la última fecha de la Liga Profesional de Fútbol, Gaspar Servio marcó un doblete para Rosario Central con dos goles de penal.
Pero bien distinto es que un portero ocupe otro lugar en la cancha.
El mexicano Jorge Campos fue un maestro de ese doble rol, alternando sus actuaciones en la portería, que lo llevaron a ser mundialista en tres oportunidades, con incursiones especiales como delantero, más que nada al inicio de su carrera como profesional.
El chileno Víctor Loyola ingresó en un partido como delantero suplente y marcó un gol de cabeza para Santiago Morning en los cuartos de final de la liga local.
El Liverpool tuvo una experiencia calcada a la del Atlético de Madrid: Shamal George se estrenó con los de Jurgen Klopp en un amistoso en 2016 ocupando un lugar de futbolista de campo debido a que el equipo no tenía otros jugadores disponibles para ingresar.
El argentino Agustín Marchesín fue uno de los mejores porteros de la Liga MX en los últimos años y también tuvo unos minutos lejos del arco: en agosto de 2016 se lesionó un dedo de la mano derecha durante un partido entre Santos Laguna y Puebla y por eso pasó a ocupar un lugar como delantero mientras su compañero Kristian Álvarez se encargaba de defender la portería. Todo sea por no dejar a su equipo con un futbolista menos en el campo.
En mayo de 1996, el SC Friburgo perdía ante el Borussia Dortmund en la última jornada de la Bundesliga alemana y el entrenador Volker Finke experimentó con el portero titular, Jorg Schmadtke, como delantero: hizo ingresar al guardameta suplente por un defensor para que Schmadtke pueda aventurarse cerca del arco rival. Dio resultado, porque sirvió una asistencia para un gol en el minuto 87.
El fútbol español también fue escenario de otros dos casos: el más recordado es el debut de José Francisco Molina en la Selección, actuando como extremo izquierdo en un amistoso frente a Noruega. El entrenador Javier Clemente necesitaba reemplazar a Juanma López y no tenía otra opción disponible que la de Molina en el banquillo, por lo que este saltó al campo y casi marca un gol.
Miguel Ángel Moyá, otro ex portero del Atleti como Molina, también vivió la experiencia de ser futbolista de campo: su debut en el Valencia en 2009 fue como centrocampista en un amistoso ante el Manchester United en Old Trafford, debido a una lesión del brasileño Thiago Carleto.