Llegar a ser un deportista profesional implica dedicación, esfuerzo, empeño, talento, suerte y muchos otros factores. Si todo esto es lo que se necesita para llegar a la elite en un deporte, ¿qué más se requiere para hacerlo en dos? La historia encuentra pocos casos de atletas que han sabido brillar en multideportes.
Con el disparador de Louis Rees-Zammit, quien tras haber destacado en el rugby galés ahora busca su lugar en la NFL tras haber llegado a un acuerdo con Kansas City Chiefs, The Sporting News presenta algunos de los casos más sobresalientes.
Spoiler: para no generar desilusión, en este listado no aparece Michael Jordan ni otros como Russell Wilson o Kyler Murray, ya que estos solamente fueron profesionales en un deporte. MJ apenas jugó para Birmingham Barons, equipo de las ligas menores y filial a los Chicago White Sox, en tanto que los quarterbacks no alcanzaron la MLB. Vale destacar el caso del QB de Arizona Cardinals: es el único en haber sido drafteado en la primera ronda en ambas ligas.
Lista de jugadores que fueron profesionales en más un deporte
Deion Sanders
El caso más emblemático de este listado sin dudas tiene como protagonista a Deion Sanders, quien jugó profesionalmente en la MLB y la NFL al mismo tiempo. Los calendarios del béisbol y el fútbol americano se superponen apenas unos meses (la MLB termina su postemporada en noviembre y la NFL inicia en septiembre), por lo que Sanders aprovechó esta ventaja para forjar una gran historia en ambos.
Su debut fue en los New York Yankees en 1989, donde estuvo dos campañas antes de pasar a Atlanta Braves (1991-1994). Luego jugó en Cincinnati Reds y San Francisco Giants. Su retiro del béisbol se dio en 2001, cuando Cincinnati decidió cortarlo. Su paso por las Grandes Ligas fue discreto, con un promedio de bateo de .263, 39 home runs, 168 carreras impulsadas y 186 bases robadas.
Su éxito en el fútbol americano fue infinitamente mayor: campeón de Super Bowl con San Francisco 49ers (1994) y Dallas Cowboys (1995), elegido Defensivo del Año en 1994 y seis veces seleccionado al primer equipo All-Pro (1992, 1993, 1994, 1996, 1997 y 1998). Representó, además de los ya mencionados, a Atlanta Falcons, Washington Redskins y Baltimore Ravens. Se retiró por primera vez en el 2000 y regresó en 2004 para finalmente despedirse al año siguiente.
Lo que sucedió el 11 de octubre de 1992 pinta de manera perfecta su experiencia en ambos deportes: Atlanta Falcons y Atlanta Braves jugaban ese domingo de visitante. Por la tarde se presentó con la derrota de los Falcons vs. Miami Dolphins y a la noche llegó al estadio de Pittsburgh Pirates solamente 16 minutos antes de que comience la acción. ¿Logró jugar ambos? No, no fue parte de la nómina. Los Braves también perdieron ese día pero más tarde llegarían a la Serie Mundial, donde caerían vs. Toronto Blue Jays. No hubo récord pero sí una increíble anécdota.
Bo Jackson
La benevolencia de los calendarios del béisbol y el fútbol americano le permitió también a Bo Jackson brillar en ambos a la vez. En el NFL Draft de 1986 fue seleccionado con el primer pick por Tampa Bay Buccaneers, pero se negó a jugar allí y firmó con los Kansas City Royals de la MLB, haciendo su debut en las Grandes Ligas ese mismo año. En 1989 vivió su gran temporada: fue MVP del All-Star Game, terminó con 32 home runs, 26 bases robadas y 105 carreras impulsadas. Se mantuvo en esta franquicia hasta 1990. Luego pasó por Chicago White Sox y California Angels hasta de retirarse en 1994.
Su experiencia por la NFL fue corta pero contundente: jugó cuatro años para Los Angeles Raiders, y fue la de 1989 también su mejor campaña. En 11 partidos corrió para 950 yardas y cuatro TD. Al año siguiente fue seleccionado al Pro Bowl. En el Monday Night Football del 30 de noviembre de 1987 marcó un récord que hoy se mantiene en los juegos de los lunes: 221 yardas por tierra. En 1991, una lesión en uno de sus talones lo obligó a retirarse.
Bob Hayes
Dallas Cowboys recuerda con mucha felicidad el paso de Bob Hayes por la franquicia: el receptor estuvo allí 10 temporadas antes de finalmente retirarse en San Francisco 49ers en 1975. Durante sus años en Texas, fue dos veces seleccionado All-Pro (1966 y 1968) y ganó el Super Bowl de 1971. Pero antes de todos estos logros, el velocista llevó a Estados Unidos a lo más alto.
En los Juegos Olímpicos Tokio 1964, Bob se llevó la medalla de oro en los 100 metros llanos con un tiempo de 10.06 segundos y también terminó primero en la posta 4x100. Es el único deportista en la historia en ser campeón olímpico y ser dueño de un anillo de Super Bowl.
Lev Yashin
Los libros de historia marcan a Lev Yashin como uno de los mejores porteros de todos los tiempos: fue elegido el 1 de Europa en ocho oportunidades y lideró los mejores años de la Unión Soviética. Fue campeón de la primera edición de la Eurocopa (1960) y cuatro años antes había conquistado el oro en los Juegos Olímpicos de Melbourne.
Pero sus éxitos no solamente se dieron sobre el verde césped, también destacó sobre el frío del hockey sobre hielo. La Araña Negra fue campeón de la Copa Soviética con Dynamo de Moscú en 1953, que levantó el trofeo por primera vez. Ante la imposibilidad de realizar ambas disciplinas a la vez, se decidió por el fútbol.
Nasser Al-Attiyah
Si bien hay pocas similitudes entre el béisbol-fútbol americano, atletismo-fútbol americano y fútbol-hockey sobre hielo, probablemente el caso de Nasser Al-Attiyah sea el más paradójico, ya que ha tenido una destacada carrera en tiro y automovilismo. El qatarí siempre fue un apasionado del deporte motor y en el Rally Dakar encontró sus máximas alegrías. Se quedó con el título en coches en cinco oportunidades (2011, 2015, 2019, 2022 y 2023).
Esto lo combinó con su puntería, compitiendo de manera consecutiva en los Juegos Olímpicos Atenas 2004, Beijing 2008 y Londres 2012. En Grecia terminó cuarto, en China fue 15° y en Inglaterra se subió al último lugar del podio tras ganarle el mano a mano al ruso Valeriy Shomin. Esa medalla de bronce es uno de los logros más importantes del deporte qatarí.