Este martes, Denver Nuggets recibe a Oklahoma City Thunder, con la chance de asegurarse la serie entre sí en su propia casa. En lo que será una batalla entre el segundo y tercero de la Conferencia Oeste, este partido tendrá más peso del que tiene otro común de la fase regular.
Como destacados están los especialistas del triple-doble, Russell Westbrook y Nikola Jokic. Dos jugadores que, en simultáneo, son polos opuestos pero sorprendentemente similares.
¿Cómo puede ser eso?
A Westbrook se lo puede describir como uno de los atletas mejores dotados físicamente del planeta. Usa sus 1,90 metros y 90 kilos para volar de un lado hacia el otro de la cancha a 100 millas por hora, castigando a los oponentes que no pueden igualar su intensidad.
Si tenemos que describir a Jokic, "uno de los atletas mejores dotados físicamente del planeta" no aplica en la cuestión.
El pivote de 2,13 metros y 113 kilos no es como Westbrook en estatura y estilo de juego. Hay una máxima en el juego de Jokic: nunca muy rápido y siempre bajo control, accionando a un ritmo que le permite osquestar todo a su inusual coeficiente intelectual para el básquet.
"The Brodie" es agresivo, enérgico y dinámico, uniendo de manera perfecta a su explosión con la cualidad como atleta único. "The Joker" es astuto, habilidoso y táctico, y al mismo tiempo lento y simple. Entonces, ¿cómo pueden trazarse similitudes entre ellos?
Westbrook es un jugador atípico, alejado del estereotipo tradicional de cómo debería jugar alguien en su posición. ¿Les suena familiar? Jokic es un pivote-base, y ya podría ser el mejor pivote pasador de la historia de la NBA a su corta edad de 24 años. Sus 7,7 asistencias de promedio en esta temporada lo ubican en el Top 5 de la NBA. Si termina en ese grupo, será el primer pivote en hacerlo desde Wilt Chamberlain, en 1968.
Es uno de los mejores pasadores de toda la liga, no sólo para su posición. ¿Eso también les suena familiar?
A lo largo de su temporada MVP en la 2016-2017, Westbrook terminó en el Top 10 de la liga en rebotes por partido, algo que no había conseguido ningún guardia desde que lo hiciera Oscar Robertson en 1962. Lo repitió durante la 2017-2018, y se ubica 11° en esta temporada, con 11,3 recobres por encuentro.
Está sumando argumentos como el mejor guardia reboteador de todos los tiempos.
Entonces, tenemos un pivote que puede pasar el balón mejor que la mayoría de los bases, y un base que puede rebotear mejor que la mayoría de los internos. No es de extrañar cómo ambos pueden caminar de manera tranquila y como si fuera una rutina para los triple-dobles mientras las estadísticas se ocupan por sí solas.
Westbrook ha sido un triple-doble ambulante desde que promedió uno durante toda la temporada 2016-2017, lo que le dio el premio al Jugador Más Valioso. Tiene 128 triple-dobles en su carrera, cifra que lo ubica en el tercer lugar de todos los tiempos, sólo detrás de Magic Johnson (138) y Oscar Robertson (201).
Después tenemos a Jokic, quien tiene 100 triple-dobles menos que Westbrook, pero jugando en una cantidad bastante menor de partidos. El de Denver acumula 285 presentaciones. A esa altura de la carrera de Westbrook, con la misma edad, sólamente tenía 5 triple-dobles.
Desde que Jokic completó su primero, promedia uno cada cerca de 6 partidos, casi la misma cantidad que Westbrook a lo largo de su carrera.
Y todos estos triple-dobles no son para nada. Marcan el ritmo de los dos equipos que, quizás, tienen la mejor chance de destronar a Golden State Warriors en el Oeste.
A lo largo de la carrera de Westbrook, el Thunder está 103-25 en partidos en donde completa un triple-doble. Lo que sería un fantástico 80,5% de triunfos. En un ejemplo mucho menor en cantidad, los Nuggets están 24-4 cuando Jokic termina en triple-doble. Es decir, un aún mejor 85,7% de victorias.
En esta temporada, son los líderes del rubro, con Westbrook en la cima con 24, y Jokic escoltándolo con 12. OKC está 17-7 cuando Westbrook logra un triple-doble en la 2018-2019 (70,8% de triunfos). Denver está 10-2 cuando lo hace Jokic (83,3%).
Entonces, los números indicarían que los triple-dobles de Jokic le dan a los Nuggets mayor valor que los de Westbrook para el Thunder.
La frecuencia en la que Westbrook acumula dos dígitos en tres categorías podría dañar este cálculo, pero sin importar cuáles son más valiosos, esos porcentajes de victorias son válidos para llevar a casa.
Los dos seguirán acumulando estadísticas noche tras noche, en un esfuerzo para poner a sus equipos en las Finales. Estarán usando estilos de juego completamente diferentes a la hora de llenar el boxscore, pero es imposible de negar que lo hacen de una manera similar y única para sus posiciones.
Por lo tanto, mientras son diferentes en cada uno de los aspectos de la superficie, cuando damos una mirada más profunda a sus poco comunes arsenales, esas diferencias se convierten en similitudes. Incluso podrían ser gemelos en esa instancia.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.