Dentro de los numerosos condimentos que ofrecerá una jornada de sábado a todo ritmo en la NBA, en la que 28 de los 30 equipos tendrán acción para animar un menú de 14 partidos, hay uno que presentará una particularidad muy especial: en una misma cancha, tres hermanos se verán las caras. Hablamos de los Holiday, los curiosos protagonistas del New Orleans Pelicans vs. Indiana Pacers (a las 18 CDMX, 21 Argentina).
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De un lado, Jrue, el del medio y con mejores pergaminos de los tres. Fue All-Star en 2013, su último curso en Philadelphia 76ers (equipo que lo eligió 17° en el Draft 2019) antes de la llegada a New Orleans Pelicans, donde transita su séptima temporada dentro de un camino que lo convirtió en uno de los bases más sólidos y completos de la liga (probablemente infravalorado). A los 29 años, es uno de los mejores defensores en su posición, y está promediando 19,7 puntos, 5,1 rebotes, 6,5 asistencias y 1,8 robos en la 2019-2020, donde intenta cambiar el rumbo de un mal inicio de los Pelicans, quienes ganaron sus últimos dos encuentros (y tres de los últimos cuatro) para mejorar su récord a 9-23.
Del otro lado estarán Justin y Aaron, el mayor y el menor de los tres. El primero, de 30 años, no fue elegido en el Draft y llegó después de Jrue a la liga, donde pasó por varios lados: 76ers, Warriors, Hawks, Bulls, Knicks y Grizzlies antes de elegir en la última Agencia Libre a los Pacers, principalmente porque allí estaba Aaron, 23° del Draft 2018 que está empezando a demostrar condiciones para -con 23 años- convertirse en un valor importante de un equipo que es protagonista en el Este (6° con 21-11).
Lit it up 🔥
— #VotePacers (@Pacers) December 24, 2019
19 points & 10 assists from @The_4th_Holiday last night 🙌 pic.twitter.com/CS580pF3O9
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"Será enorme, obviamente. No hablamos tanto al respecto todavía, pero sé que estamos realmente entusiasmados", señaló Justin en un artículo de Scott Agness en The Athletic. El escolta, desde el banco, aporta 7,6 puntos, 3,7 rebotes y 1,5 asistencias (37,3% triples) en 25,1 minutos para el conjunto de Nate McMillan. "No veo la hora de jugar. Es algo por lo que soñamos durante mucho tiempo", describió Aaron, brillando como titular en los últimos partidos ante la ausencia de Malcolm Brogdon (14,5 tantos, 2,0 rebotes y 6,5 asistencias en las últimas 4 presentaciones), y ya consolidado como una pieza clave de la rotación en su segundo año en la liga (10,5 unidades, 2,5 recobres y 3,1 pases gol en 22,8 minutos).
"Es genial estar todos en el mismo partido. Quizás el próximo paso es que todos estemos en el mismo", completó Jrue, al 'anfritrión' de una noche especial para la familia Holiday.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
