Detroit Pistons, en sus nuevas instalaciones de entrenamiento que costaron 90 millones de dólares, es por el momento el último equipo en sumarse a la nueva moda de la NBA, una liga que se caracteriza por ser pionera y estar buscando constantemente la innovación en todos los sectores. Se trata de agregar una línea de cuatro puntos a las canchas de entrenamiento, buscando así el desarrollo de una clara tendencia del último lustro de la liga: más lanzamientos externos y cada vez desde más lejos.
Las primeras franquicias en sumar esto fueron Brooklyn Nets y Philadelphia 76ers, durante la temporada 2016-2017. Bajo la insistencia del entrenador Brett Brown. los Sixers agregaron una línea perimetral gris ubicada un metro y medio detrás de la línea de tres puntos, que está a 7,25 metros del aro. Otros equipos lo copiaron: Chicago Bulls, Atlanta Hawks (con la llegada del entrenador Lloyd Pierce, asistente de Brown en Philly), Dallas Mavericks y ahora los Pistons. "Todos somos ladrones", declaró Brown el año pasado en una entrevista con ESPN, "es una liga de copias, en realidad hay que ver como un halago el hecho de que los demás lo valoren".
MÁS | El regreso de Kristaps Porzingis: ¿cómo volvieron otras estrellas lesionadas del ligamento cruzado anterior de la rodilla?
Otros equipos, como Detroit, eligieron una distancia más corta: su línea de 4 puntos fue ubicada a 7,85 metros del aro. Nos sirve para la defensa y el ataque, le explicó el director técnico Dwane Casey a The Athletic, "en defensa porque muchos rivales preparan su tiro desde ahí, y en ataque es útil para generar más espacios" manifestó el ex coach de Toronto Raptors. La gran mayoría de los equipos no le da un punto extra a los lanzamientos sino que le otorga esa utilidad, la de tomarla como referencia para abrir más la cancha.
Trae Young from 30 feet for the win? pic.twitter.com/Gi46xZQj8l
— FOX Sports: Hawks (@HawksOnFSSE) October 11, 2018
Por ahora, la NBA no dio ninguna señal oficial de querer implementar este cambio, más allá de utilizarlo como una idea divertida en los últimos dos partidos de celebridades del All-Star Weekend. Como viene sucediendo con todas los cambios reglamentarios, en caso de ocurrir seguramente primero sea probado en la G-League, la misma competencia en la que franquicias como Houston Rockets empezaron a experimentar con subir la cantidad de triples intentados por partido.
MÁS | Julius Randle quiere ser la estrella de los New York Knicks: apunta a jugar su primer All-Star Game y clasificar a Playoffs
Desde la temporada 2010-2011 que el promedio de triples intentados por partido de los equipos de la NBA se incrementa sin parar. De los 18 por equipo de la 2010-2011, en la 2015-2016 se llegó a 24,1 y desde ahí cada año crece en tres intentos más por equipo (32 en la 2018-2019), mientras que el porcentaje de aciertos se mantiene estable entre 35% y 36%. Esto va de la mano con un incremento en la velocidad del juego: en los últimos diez años la media de posesiones por partido creció de 92,1 a 100.
Cuando se agregó la línea de tres puntos en la temporada 1979-1980 llevó nueve años llegar al promedio de cinco lanzamientos de triple por partido y 16 años superar los 10 intentos. En la 2018-2019, James Harden y Stephen Curry tiraron más de 10 triples por partido ellos sólos (13,1 el de Houston y 11,6 el de Golden State) y fueron 64 los jugadores con un promedio mayor a cinco intentos. Los dos son las figuras de los equipos símbolo de la revolución del tiro externo: Houston por su decisión táctica de elegir a los triples como su principal arma ofensiva (45,1 intentos por partido) y Golden State por su efectividad, los títulos logrados y los récords de sus figuras en este rubro.
Los especialistas
El triple de 11 metros con el que Damian Lillard definió sobre la chicharra un triunfo de Portland Trail Blazers sobre Oklahoma City Thunder en los últimos Playoffs es la imagen que mejor grafica esto, pero él y Steph Curry no son los únicos especialistas.
Dame. Called. Game. 👋 pic.twitter.com/8Z0skeDbZE
— Portland Trail Blazers (@trailblazers) April 24, 2019
12 jugadores anotaron más de 10 triples desde más de nueve metros de distancia en las últimas tres temporadas, entre los que brilla Trae Young: el novato de los Hawks, uno de los equipos que innova con esto, anotó 24 lanzamientos desde esta larga distancia en apenas un año, siendo el líder de la 2018-2019. Lillard, Curry, LeBron James, Eric Gordon, Spencer Dinwiddie, Kyle Lowry, Kyle Korver, Harden, Lou Williams, Kyrie Irving, Jamal Crawford y Chris Paul son los otros miembros de la lista.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.