Golden State Warriors se convirtió en la gran marca del último lustro de la NBA. En la máxima expresión de la revolución del básquet moderno. Steve Kerr construyó un equipo que se ganó de gran forma su lugar en el Olimpo, algo que la dura derrota en las Finales 2019 ante Toronto Raptors (4-2) no podrá modificar. Porque los buenos equipos, esos que dejan una huella, van más allá de los números. Y este conjunto de Oakland fue y es un espejo a seguir. Fue el ejecutor de una de las mejores representaciones ofensivas que se haya visto en este juego, donde el descomunal talento individual rompió paradigmas para brillar de la mejor manera que se entiende en este deporte: la forma colectiva, la del todos para uno.
Cinco Finales consecutivas (algo que sólo había pasado con aquellos Boston Celtics de Bill Russell a fines de los '50 y principio de los '60), tres campeonatos, una catarata de récords y más, muchas cosas más, pondrán a Golden State con el cartel de una verdadera dinastía. Pero claro, todo tiene un final en la vida. Y la caída ante los canadienses supone el cierre de esta dinastía de los de la Bahía. O, al menos, invita a pensar que los cambios pueden ser profundos.
¿Qué se viene para los Warriors? A continuación, los detalles pero no sin antes dar un viaje previo hacia el éxito de estos 5 años.
Un equipo de época
19 de mayo de 2014. Los Warriors toman una decisión que cambiaría su historia por completo. Mark Jackson, el primero en empezar a darle forma a aquel talento llegado desde los Draft previos liderado por Stephen Curry y Klay Thompson, es reemplazado por Steve Kerr, quien se convertiría en el padre de una criatura fantástica.
Kerr, en su debut como entrenador, maldeó a su manera a un equipo único, al que transformó ofensivamente con conceptos revolucionarios para le época y llevó al siguiente nivel a los Splash Brothers. Además, hizo de Draymond Green al pilar y motor de la estructura -tomando el lugar en la alineación de un veterano probado como David Lee-, convenció y convirtió a Andre Iguodala en uno de los mejores Sexto Hombres que se recuerden, y potenció a cada pieza individual que, con precisión quirúrgica, iba llegando al plantel. Ahí también hay otro hombre clave: Bob Myers, el GM y constructor.
Los primeros dos años fueron casi de película. El equipo talentoso se transformó en un campeón espectacular que quebró marcas a voluntad...
- Récord de 67-15 en la 2014-2015, el mejor para un entrenador de primer año.
- Récord de 73-9 en la 2015-2016, el mejor registro de todos los tiempos (superando el 72-10 de los Bulls de Jordan de 1995-1996.
- Mayor cantidad de victorias como visitante en una temporada (34).
- Mayor cantidad de triunfos seguidos para comenzar una campaña (24)
- Más victorias seguidas como local (54).
El título del 2015 ante Cleveland (4-2) fue el despegue definitivo, pero la dura caída del 2016 ante los Cavaliers de LeBron, ese 3-1 a favor que se escapó de las manos, representó un golpe que tendría una cura perfecta.
Golden State rompió los moldes y convenció en la Agencia Libre a Kevin Durant. Sí, uno de los mejores de la NBA uniéndose al plantel que, para muchos, ya tenía a los mejores talentos de la liga. Un desafío muy grande para Kerr y para las estrellas, sobre todo para Curry, quien debía dar un paso al costado para recibir a alguien potencialmente mejor, justo en el año en donde ganó el segundo de sus MVP, el primero de forma unánime en la historia de la liga.
Los egos quedaron a un costado y Golden State desfiló rumbo a dos campeonatos fantásticos, perdiendo apenas 6 partidos en dos postemporadas con KD en su plantel, y demoliendo en las Finales a los Cavs (4-1 y 4-0) para tomarse la revancha del 2016. La redención completa que, luego, pedía algo pocas veces visto en la historia: un tricampeonato.
Todo iba sobre ruedas en esta 2018-2019. Pero la lesión de Durant en las Semifinales del Oeste ante Houston Rockets, la frustrada vuelta en el Juego 5 ante Toronto, y la posterior salida de Klay Thompson en el Juego 6, justo cuando venía siendo el mejor de los suyos, terminó siendo demasiado grande para compensar ante unos Raptors implacables, que merecen el campeonato más allá del factor lesiones.
En 5 años, Golden State estableció el mejor récord para ese tiempo en su historia (322 victorias y 88 derrotas en fase regular, un 78,5%), y estampó un 77-28 en Playoffs. Cinco carreras, cinco Finales, tres campeones. Miles de historias y momentos que llenaron la retina de los amantes del buen básquet y fueron envidia de rivales. Un equipo de novela que jamás será olvidado.
¿Y ahora qué para la 2019-2020?
8. Ese el número de jugadores del actual plantel de Golden State que serán agentes libres desde el 1 de julio. Ocho. Más de la mitad del equipo, con el agregado que tres de ellos son parte del equipo titular que usó Kerr durante una buena parte de la temporada (salvo por lesiones, claro). Así de importante serán las semanas que se le vendrán a los de Oakland. Antes de los detalles, vamos a lo básico...
Jugadores con contrato
- Stephen Curry (base, firmado hasta la 2021-2022)
- Draymond Green (ala pivote, firmado hasta la 2019-2020)
- Shaun Livingston (base, firmado hasta la 2019-2020, no garantizado)
- Andre Iguodala (alero, firmado hasta la 2019-2020)
- Alfonzo McKinnie (alero, firmado hasta la 2019-2020, no garantizado)
- Damian Jones (pivote, firmado hasta la 2019-2020)
- Jacob Evans (escolta, firmado hasta la 2019-2020, más dos años con opción de equipo)
Agentes libres
- Kevin Durant (alero, opción de jugador)
- Klay Thompson (escolta, sin restricciones)
- Quinn Cook (base, restringido)
- Kevon Looney (pivote, sin restricciones)
- Jonas Jerebko (ala pivote, sin restricciones)
- DeMarcus Cousins (pivote, sin restricciones)
- Jordan Bell (pivote, restringido)
- Andrew Bogut (pivote, sin restricciones)
¿Qué selecciones de Draft tiene?
Los Warriors tendrán dos picks en el Draft 2019: 28° (primera ronda) y 58° (segunda ronda).
¿Cuáles fueron sus últimas selecciones?
- Jacob Evans (28° en 2018)
- Damian Jones (30° en 2016)
- Kevon Looney (30° en 2015)
- Harrison Barnes (7° en 2012)
- Festus Ezeli (30° en 2012)
- Draymond Green (35° en 2012)
- Ognjen Kuzmic (52° en 2012)
¿Qué hará Kevin Durant en la Agencia Libre?
Esa pregunta es una cuestión que Golden State tuvo que afrontar en cada verano desde la llegada de KD en 2016. La estructura de sus contratos siempre fueron de "1+1" (es decir, con el segundo año como opción de jugador). Hasta acá, el alero se ha salido de su opción en cada Agencia Libre para renegociar un nuevo vínculo con los Warriors. Pero claro, la rotura del tendón de Aquiles derecho en las Finales ante Toronto podría modificar los planes.
Como nunca antes, el futuro de Durant es una incógnita, y va mucho más allá de esas dudas que había sobre su continuidad en Oakland. Durante toda la temporada hubo rumores de que podría ser su último curso en la franquicia, y se lo ha conectado a varios equipos (Knicks, Nets y la lista sigue).
Más: Finales NBA 2019: ¿Cómo impacta la lesión de Kevin Durant en su futuro y rumbo a la Agencia Libre?
¿Arriesgarán por KD, sabiendo que es casi un hecho que no jugará en la 2019-2020? ¿Y que su regreso será a los 32 años?
En principio, los rumores apuntan a que tanto New York como Brooklyn estarían interesados en ofrecerle un vínculo al alero, incluso pese a la lesión. Aunque claro, tomar su opción de contrato (31,5 millones de dólares) para la 2019-2020 podría ser otro camino. Así, haría su recuperación con los Warriors y, lógicamente, podría darles una mayor chance de renovación a futuro.
¿Y qué hará Klay Thompson tras la lesión?
Durant no es el único nombre fuerte del núcleo de estrellas que tendrá un verano movido. Thompson también será Agente Libre (sin restricciones), y si bien la situación parecía diferente a la de KD (en algún punto la mayoría cree que continuar al lado de Stephen Curry es una garantía), después del Juego 6 de las Finales se volvió a emparentar, tras confirmarse que se rompió los ligamentos de su rodilla izquierda.
Quizás como nunca antes hubo rumores sobre Klay considerando otras opciones por fuera de los Warriors. Es lógico pensando que hablamos de uno de los mejores escoltas de toda la NBA, afirmación que incluye ser (quizás) el segundo mejor tirador de la liga y uno de los defensores top en su posición.
En la mentalidad de Klay, probablemente, estaba el hecho de merecer un contrato máximo. Pero su lesión le pone un manto de dudas a la situación, ya que podría dejarlo afuera hasta la parte final de la próxima fase regular, lo que podría complicar las chances incluso de clasificación a Playoffs para la franquicia.
El resto, pendiente de sus estrellas
El futuro de Golden State, más allá de tener a varios libres, se modificó al 100% por lo de Durant y Thompson, incluso más allá de unas negociaciones que, hasta que no lleguen a su final, harán que la franquicai no pueda moverse en relación al resto de las piezas. Y eso que hay algunas importantes, como DeMarcus Cousins o Kevon Looney (Kerr lo definió como una pieza fundacional).
Para los Warriors ya es pensar más allá de asegurar la continuidad de KD y Klay, porque por más que sellen nuevos vínculos, es probable que no los tengan en toda la 2019-2020. Por lo tanto, sus nuevos contratos tienen tanto valor como garantizar una mayor profundidad en el banco, algo que durante las Finales quedó expuesto como una gran carencia. Y esas charlas de renovaciones, quizás, no pueden demorarse mucho. De ser así y no llegar a bueno puerto, ¿qué quedaría en el mercado como reemplazo?
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.