Seguimos conociendo a los mejores proyectos del NBA Draft 2021 y en este caso pondremos la atención en el reciente G League Elite Camp, donde varios de estos jugadores salieron a la cancha, no solo realizando diferentes pruebas y mediciones físico-atléticas, sino también disputando cada uno un par de partidos. En esta edición de nuestro scouting del evento, tendremos el foco en tres de los nombres que formaron parte del Equipo 1: Mac McClung, Dalano Banton y MJ Walker.
Más | La Guía del NBA Draft 2021
Mac McClung
Mac McClung es un base de 1,89 de estatura y 21 años, que jugó sus primeros dos años NCAA en Georgetown, mientras que pasó la 2020-2021 con Texas Tech, promediando 15,5 puntos, 2,7 rebotes, 2,1 asistencias y un 42% de campo en 30,2 minutos por presentación.
Lo que realmente destaca de McClung es su capacidad atlética. Hablamos de uno de los mejores atletas naturales de este Draft, tal cual demostro en el reciente G League Elite Camp. Allí lideró todas las mediciones en salto vertical, salto vertical con carrera y carrera en velocidad. Súper explosivo y veloz, aunque el resto de sus herramientas naturales no son buenas en términos NBA: es bajo, bastante liviano y con brazos cortos.
Más allá de esto y de haber sido un buen anotador NCAA, McClung aún debe redefinir su juego ofensivo. Hoy depende demasiado de un tiro externo que es muy inconsistente: solo lanzó un 34% en triples en la 2020-2021 (29% en las dos campañas anteriores), siendo especialmente ineficaz a la hora de levantarse desde el drible (28%). En su favor, fue mucho más efectivo en una media distancia desde donde prueba muy seguido (quizá demasiado) y estuvo alrededor del 80% en libres en sus tres temporadas. Aún así, debe mejorar sus porcentajes exteriores.
A pesar de su falta de físico, McClung es bastante más peligroso a la hora de atacar el aro, siendo capaz de crear en acciones de pick and roll, aclarados o volar en transición. Porcentajes apenas promedio como definidor: 52% en el área restringida. Buen uso de la flotadora. Su juego agresivo lo llevó a promediar más de 6 libres por cada 40 minutos en la NCAA.
El problema con el rol de McClung es que hoy ofrece muy poco como pasador u organizador de juego. Es un anotador en cuerpo de base, pero a la vez sin los mejores porcentajes con el tiro, como para ser efectivo sin la bola. Apenas promedió 2,8 asistencias por cada 40 minutos. Selección de tiro irregular.
Defensivamente no tiene las mejores herramientas, ya que su altura y falta de longitud lo limitan a defender bases. De todas maneras, hace un buen trabajo frente a los guardias, con buena energía, mucha agilidad lateral para mantenerse con su marca y aprovechando su salto para complicar lanzamientos. Promedio en robos y no es un gran rebotero. No se proyecta como un defensor de impacto en términos NBA (pesa solo 81 kilos), pero puede cumplir con un buen trabajo.
Dalano Banton
Dalano Banton es un guardia canadiense de 2,06 metros y 21 años, que tras arrancar su carrera NCAA en Western Kentucky, viene de jugar la 2020-2021 con Nebraska. Allí promedió 9,6 puntos, 5,9 rebotes y 3,9 asistencias, además de un robo y 0,9 tapones en 27,3 minutos por noche.
Banton es un proyecto por demás particular, que encuentra su proyección gracias a su combinación de altura y generación de juego con el balón. De hecho, viene de jugar como base en Nebraska y probablemente esa vaya a ser su posición en el profesionalismo. No se trata de un pasador de élite pero sí uno destacado (5,7 asistencias por 40 minutos) y cualquier jugador con su altura y manejo de la bola llama la atención. El mayor daño lo hace en situaciones de pick and roll, desde donde es capaz de distribuir la bola.
Su altura también le permite postearse frente a rivales más pequeños. No es demasiado bueno a la hora de atacar de espaldas, pero su visión le permite encontrar al compañero abierto.
Su combinación de altura y manejo le dan cierto potencial a la hora de crear su tiro y atacar la pintura.
Sin embargo, más allá de esos flashes, hoy hablamos de un jugador ciertamente limitado a la hora de anotar. Aún con esas virtudes mencionadas, no destaca en las penetraciones, con claras falencias en términos de potencia física y sin la mejor explosión atlética. Solo lanzó un 36% dentro del área restringida en acciones de creación propia (pick and roll, aclarados y poste bajo).
De todas maneras, su mayor limitante es el tiro. Tomó 4,4 triples por 40 minutos en la 2020-2021 y solo encestó el 25% de ellos (venía de un 21,6% como novato). Mala mecánica. Igual de ineficaz desde la línea (66%). Ni siquiera es efectivo a pie firme: 15-65 (23%) en triples en catch and shoot.
En defensa hablamos de un jugador de gran altura y movilidad, capaz de hacer jugadas sobre la bola: promedió 8,6 rebotes, 1,4 robos y 1,4 tapones por 40 minutos en la 2020-2021, todas cifras destacadas. Sin embargo, está lejos de ser un especialista, ya que se ve complicado por su falta de kilos y tampoco es un súper atleta en términos de explosión. Versátil pero sin una posición clara para marcar. En Nebraska sufrió cuando quedó emparejado con rivales más fuertes en los cambios defensivos.
MJ Walker
MJ Walker es un escolta fuerte de 1,96 de estatura y 23 años que pasó sus cuatro temporadas NCAA jugando para Florida State. Sus mejores números los tuvo en la 2020-2021, promediando 12,2 puntos, 2,5 rebotes y 2,5 asistencias en 29 minutos, con un destacado 42% en tiros de tres.
Lo mejor del juego de Walker pasa sin dudas por su tiro exterior. Tomó 6 triples por cada 40 minutos en la 2020-2021 y como marcamos, anotó el 42% de ellos (no había pasado del 36% en sus tres temporadas previas). Muy certero como tirador a pie firme: 44%. Sin embargo, pierde eficacia cuando lanza en movimiento, desde el drible: 36% de tres y solo un 30% en dobles largos. En su favor, lanzó bien la bola en el Elite Camp, incluso en movimiento.
De todas maneras, Walker no tenía un rol exclusivo de tirador en Florida State, sino que de hecho la mayor parte de sus posesiones llegaban desde el pick and roll. Sin embargo, es bastante limitado en esa función: el 36% que lanzó por esa vía es el cuarto porcentaje más bajo entre todos los guardias que se proyectan para el Draft. Y es que no solo no tiene el mejor tiro en movimiento, sino que además es un jugador sin una gran explosión atlética, lo cual lo limita como definidor.
Ofrece algo de generación complementaria (3,5 asistencias por 40 minutos) pero no se proyecta como un potencial base y pierde demasiados balones. Extremadamente limitado en situaciones de uno contra uno: solo lanzó un 3-16 en aclarados. Poco resolutivo con la bola en su poder.
Defensivamente Walker tiene muy buen físico, con altura, potencia y buen largo de brazos. Juega con buena energía y agresividad, aunque el no ser un atleta de élite baja su potencial. Mala producción rebotera y solo promedio en robos y tapas. En esta siguiente acción lo vemos con una buena recuperación productivo de su intensidad en la marca, pero luego careciendo de la explosión para definir en el otro aro. Proyección de 3&D pero siendo más sólido que especialista en ambos rubros.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
