Continuamos poniendo la lupa sobre los proyectos del NBA Draft 2021 y en este caso hablaremos de uno de los jugadores internacionales más intrigantes de esta clase: el belga Vrenz Bleijenbergh, un 3-4 de 2,08 metros y 20 años de edad que despierta algunas comparaciones con un drafteado de 1° Ronda del año pasado: Aleksej Pokusevski. ¿En qué se parecen y en qué difieren ambos jugadores? Lo analizamos a continuación repasando el perfil de Bleijenbergh, quien viene de promediar 9,5 puntos, 4,8 rebotes y 3,5 asistencias en 41 partidos de la 2020-2021 con los Antwerp Giants (liga local y Eurocup).
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Las herramientas naturales y técnicas del belga son realmente soñadas, con gran altura para ese rol de 3-4, muy buena velocidad para su tamaño y sobre todo, muchísima habilidad para jugar con el balón. Uno de sus principales defectos en este momento es la clara falta de potencia física, pero su techo es realmente alto, sobre todo si eventualmente consigue fortalecer su cuerpo.
La naturalidad que Bleijenbergh presenta para jugar con la bola es muy poco común para un 2,08 de 20 años. Realmente tiene dotes de perimetral, siendo capaz de crear sus tiros, ya sea atacando a campo abierto desde el drible, operando desde el pick and roll o sencillamente superando a rivales más pesados en velocidad.
De todas maneras, probablemente su rasgo más interesante como generador de juego no pase por su capacidad anotadora, sino por su destacada visión y habilidad pasadora. Creativo con sus asistencias y con la ventaja de la estatura. Las casi 5 asistencias por 36 minutos que promedió en la 2020-2021 son una marca sensacional para un jugador que obviamente no juega de base. Como puede esperarse, también pierde bastantes balones y comete errores, pero su proyección como playmaker ilusiona.
El problema del belga en este momento es que depende demasiado de un tiro exterior muy irregular. Muestra esos flashes de poder crear su tiro y llegar hasta el aro, pero aún así casi un tercio de sus disparos en la 2020-2021 fueron triples y solo lanzó un 33% en esa área (32% en la campaña anterior). Hoy no es un tirador seguro y sus porcentajes desde la línea tampoco son los mejores: apenas supera el 65% y va muy poco allí, evidenciando falta de agresividad a la hora de buscar el choque físico. Sin juego de poste bajo.
Si va a continuar siendo un alero casi netamente perimetral, será clave que mejore sus porcentajes. Aunque en su favor, muestra muy buena versatilidad como tirador, no solo tomando tiros a pie firme, sino también en movimiento. El valor de un jugador alto capaz de lanzar en movimiento es muy superior al de uno que depende de recibir en una posición estacionada. Y Bleijenbergh es de los primeros.
Si no consigue mejorar sus porcentajes de tiro, deberá reconfigurar su selección de lanzamientos. Lanzó por debajo del 37% de campo en sus tres temporadas como profesional.
Defensivamente Bleijenbergh es bastante mejor de lo que uno podría esperar. Es cierto que pensando en una eventual transición NBA queda el interrogante de qué posición defenderá, al faltarle potencia para competir contra interiores fuertes, pero con los lógicos problemas que cualquier jugador de casi 2,10 metros va a tener frente a perimetrales rápidos. De todas maneras, como marcamos es un jugador veloz y ágil para su estatura, que además muestra buena energía en este costado.
Aprovecha su alcance para hacer jugadas sobre la bola (1,8 robos y 0,8 tapones por 36 minutos). Seguro en el rebote defensivo.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
