Seguimos conociendo a los mejores proyectos del NBA Draft 2021 y en este caso le llega el turno a otro de los candidatos firmes a ser elegido en la 1° Ronda: el francés Joel Ayayi, un guardia de 1,96 de estatura y 21 años, que viene de jugar tres temporadas NCAA con Gonzaga. Ayayi fue clave en los finalistas Bulldogs en la 2020-2021, promediando 12 puntos, 6,9 rebotes y 2,7 asistencias en 31,3 minutos por presentación, con porcentajes espectaculares: 58% de campo y 39% en triples.
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En términos de características, Ayayi es un guardia versátil que puede jugar como base o también sin la bola. De hecho, en la 2020-2021 lo hizo como alero, con otros dos manejadores a su lado como Suggs y Nembhard. Tiene buena altura para cualquiera de las dos posiciones, aunque no tiene los brazos más largos ni es un atleta particularmente explosivo.
La eficacia es la carta de presentación de Ayayi, tal como lo marca sus mencionados porcentajes de acierto. No es un especialista en ningún área pero aporta un poco de todo y en un buen nivel. Como tirador ha tenido un progreso notable: 27% en su primer año, 34% en el segundo y 39% en el reciente. No es un experto y su volumen de intentos es algo bajo (3,8 por 40 minutos), pero puede castigar desde el perímetro cuando tiene espacio. Nunca fue un gran tirador en movimiento y prácticamente no toma tiros a media distancia, pero el 43% que lanzó en triples desde el drible en la 2020-2021 es otra gran señal en su favor.
De todas maneras, la mayor parte de la ofensiva del francés llegó gracias a su superlativo movimiento sin balón. Su capacidad para cortar sin pelota sencillamente no tiene paralelo en este Draft: sumó 1,3 conversiones vía cortes por 40 minutos, más del doble que cualquier otro guardia que se proyecta para ser elegido (segundo quedó su compañero Suggs con 0,6).
A su vez, también fue sumamente peligroso saliendo en transición y atacando cualquier espacio que apareciera en esas situciones. Aún sin ser un atleta explosivo, brilló en ese aspecto: el 23,3% de sus posesiones vinieron en contragolpe.
Lo bueno de Ayayi es que una vez que llega hasta el aro, es extremadamente seguro como definidor. Lanzó un 70% dentro del área restringida en la 2020-2021, un número completamente inusual y extraordinario para un guardia. Ni siquiera los pivotes más explosivos registraron porcentajes de ese estilo. Aunque claro, vale decir que Gonzaga juega en una conferencia algo menor en términos atléticos y físicos como la WCC.
Más allá de todas sus virtudes sin el balón, Ayayi también fue de los jugadores más eficientes de la NCAA a la hora de operar desde el pick and roll. Tuvo excelentes porcentajes de tiro a la salida de esas cortinas y fue capaz de llegar hasta el aro y definir con cierta frecuencia. No es un anotador, va muy poco a la línea y no lo vamos a ver creando desde aclarados o jugadas de uno contra uno, pero supo destacarse como pocos en las áreas que sí domina.
Como pasador y producción se vio afectado por jugar con otros dos bases, pero aún así mostró destellos de calidad durante la 2020-2021. Y otro punto a favor de su eficiencia: sumó casi el doble de asistencias (87) que de pérdidas (46).
Defensivamente el francés es sólido y bastante confiable. No tiene potencial de estrella en este costado al faltarle mejor longitud y dotes atléticos, pero compite y es versátil. Su aporte en los tableros es espectacular: bajó 8,8 rebotes por 40 minutos en Gonzaga, una marca prácticamente digna de un interior. También tuvo una buena marca en robos y mostró la capacidad para defender múltiples posiciones. De nuevo, Ayayi no brilla y no va a ser la razón principal por la cual su equipo se imponga, pero a la vez, contribuye en todos los rubros y tiene un nivel de error realmente bajo (al menos en la NCAA).
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.