Un motivo para crecer y otro para caer de la "clase media" de la Conferencia Este

Agustín Aboy

Un motivo para crecer y otro para caer de la "clase media" de la Conferencia Este image

Uno de los hechos "coloridos" de la reanudación de la NBA será la convivencia de los jugadores de distintos equipos en tres hoteles del complejo de Disney en Orlando, Florida. Para elegir a que hotel irá cada equipo se siguió el orden de la tabla de posiciones general de la fase regular y por eso los ocho mejores irán al "Gran Destino", los ocho del medio vivirán en el "Grand Floridian" y los seis que actualmente se encuentran fuera de puestos de Playoffs se mudarán temporalmente al "Yacht Club".

Podemos decir que de cierta forma ese orden establece una "clase media" dentro de la temporada 2019-2020 de la NBA: ocho equipos que están por encima del fondo, pero que todavía no pueden considerarse como claros aspirantes al título, algo reservado para los de élite. Más allá de que el orden pueda haberse roto un poco con la inclusión de Utah Jazz o Miami Heat en el primer lote, dos equipos que no tienen grandes diferencias con los presentes en el Grand Floridian, la división nos deja con cuatro conjuntos del Este y cuatro del Oeste que no alcanzaron a pasar la barrera de las 40 victorias.

MÁS | El repaso de la "clase media" del Oeste

¿Qué factor puede ayudar a los equipos de ese lote del medio a meterse entre los de arriba? ¿Cuál los puede bajar para que terminen siendo una decepción? Analizamos el caso de cada uno, comenzando en esta primera parte por la Conferencia Este: Indiana Pacers, Philadelphia 76ers, Brooklyn Nets y Orlando Magic.

Dinwiddie Embiid Sabonis

MÁS | Cuatro jugadores jóvenes de la Conferencia Este a seguir en la reanudación de la NBA

Indiana Pacers (39-26)

Indiana Pacers

Puede subir si... Victor Oladipo regresa a su nivel del 2018

La buena temporada 2019-2020 de Indiana es un poco una sorpresa teniendo en cuenta que los de Nate McMillan prácticamente no contaron con su jugador mejor pago y de mayor cartel: el escolta Victor Oladipo. El ex Oklahoma City Thunder regresó recién en el último partido del mes de enero y jugó apenas 13 partidos en la campaña actual (10 como titular), con minutos limitados, promediando 13,8 puntos y 3 asistencias por partido y con un 39% de campo, un aporte lejano al esperado de una figura pero razonable por tratarse de sus primeros partidos después de un año entero de inactividad.

Ahora Oladipo encendió alguna alarma al poner en duda su presencia en Orlando para la definición de la temporada (puede que sea descartado si no está al 100%, con la mira puesta en que no sufra algún problema físico mayor), pero las esperanzas de los Pacers de dar un salto se apoyan en un regreso de Oladipo al nivel que lo llevó a ser All-Star en 2018 y 2019. Su último partido fue una demostración de lo que puede hacer: convirtió 27 puntos en 29 minutos contra Boston Celtics.

MÁS | Victor Oladipo en duda para la reanudación de la NBA

Puede bajar si... No encuentra un líder de cara a los Playoffs

Sin una estrella demasiado marcada, más allá de la buena temporada de Malcolm Brogdon (16,3 puntos y 7,1 asistencias) y de la consagración de Domantas Sabonis (18,5 puntos, 12,4 rebotes y 5 asistencias) como All-Star, los Pacers pueden sufrir de la falta de un jugador en quién confiar para las situaciones de final de partido o de un último cuarto en Playoffs. Bojan Bogdanovic fue ese jugador en los últimos Playoffs, en los que no estuvo Oladipo. Ahora el croata no está presente y Dipo está en duda, mientras que hay que ver si en el caso de jugar va a ser capaz de llevar esa carga.

TJ Warren (18,7 puntos por partido) es el máximo anotador del equipo, pero ni el alero ni los otros titulares de los de McMillan son jugadores capaces de lograr un gran desequilibrio individual.

Philadelphia 76ers (39-26)

embiid-simmons-062020-ftr-getty.jpg

Puede subir si... Ben Simmons y Joel Embiid logran engranar al mismo tiempo

Los Sixers tienen tanto potencial hace un par de años y encuentran iguales o más maneras de echarlo a perder... Para la gran mayoría de los analistas eran uno de los candidatos a las Finales de la NBA al comenzar la temporada 2019-2020. La prometedora dupla de Ben Simmons y Joel Embiid, sumada a la experiencia de Al Horford y el fichaje del siempre cumplidor Josh Richardson, hacían pensar en que los de Brett Brown podrían finalmente encontrar un rumbo de élite. Pero quedaron atrás del pelotón de punta y nunca lograron meterse de lleno en la conversación. De hecho, hasta el momento están en el sexto puesto del Este, debajo de varios equipos con menos "poder de estrellas".

A su favor, nunca hay que descartar que ese potencial de golpe explote. El entrenador Brown confía en que en este tiempo sin acción pudo terminar de definir las modificaciones que necesita el equipo (¿pasar a Horford a la segunda unidad?) para que Simmons y Embiid, sus All-Stars, jueguen al máximo de su capacidad. Con ellos dos brillando los Sixers son capaces de ganarle a cualquier rival, como ya lo sufrió Milwaukee en la última Navidad.

Puede bajar si... Continúa en la marcha que tenía antes del parate

A Philadelphia la suspensión de la NBA le cayó de forma ideal. Los Sixers estaban en una caída lenta, pero caída al fin, y sin una reacción de recuperación que parezca inminente cuando quedaba un mes para los Playoffs. Habían perdido cinco de los diez partidos disputados post All-Star Weekend, incluyendo derrotas contra Cleveland Cavaliers y Golden State Warriors, dos de los tres peores equipos de la temporada. Su defensa fue despedazada por Lakers y Clippers. La ausencia de Simmons y Embiid en la gran mayoría de esos juegos puede servir como excusa, pero un contendiente al título no debería descender al nivel del peor equipo de la NBA si su mejor jugador no está en una noche.

Brooklyn Nets (30-34)

Dinwiddie LeVert

Puede subir si... Spencer Dinwiddie y Caris LeVert están al 110% de su nivel

Descartados Kyrie Irving y Kevin Durant para el reinicio de la competencia, lo de los Nets pasa a ser la búsqueda de un milagro. Sin las dos súperestrellas se comportaron todo el año como un equipo totalmente inconsistente, capaz de ganarle a Boston Celtics y a Los Angeles Lakers en un plazo de menos de 10 días como también de perder de forma consecutiva con Orlando Magic, Atlanta Hawks y Washington Wizards.

Para ver la buena cara de los Nets versión 2019-2020 depende de dos factores principales: Spencer Dinwiddie y Caris LeVert, los dos hombres que tienen que pueden marcar una diferencia pero que aún no han logrado terminar de ser del todo consistentes en la NBA, sino que más bien insinúan en explosiones de algunas semanas. Para Dinwiddie fue el inicio de la temporada, cuando apareció como candidato al All-Star tras promediar 27 puntos y 6,8 asistencias por partido en diciembre. Para LeVert se trató de su regreso a la titularidad en el mes de febrero, con un aporte de 24,1 puntos, 5,3 asistencias y 4,8 rebotes por encuentro cuando sale desde el inicio. Si Brooklyn quiere asustar a un rival del este, dependerá de ellos dos.

Puede bajar si... Se acentúa su baja eficiencia en ataque

Un problema constante para los Nets en esta campaña fue su ofensiva. De aquel juego tan bonito que mostraban en la 2018-2019 con D'Angelo Russell en la base y muchos jugadores jóvenes y atléticos a su alrededor, pasaron a ser uno que por momentos no es ni tan dinámico ni tan efectivo. El año pasado no eran una maravilla desde el perímetro, pero este año retrocedieron y se encuentran entre los 5 equipos menos efectivos de la NBA en el tiro de tres puntos.

Por caso Joe Harris, su arma más efectiva (41,2%), intenta menos lanzamientos que Taurean Prince, Spencer Dinwiddie o Garrett Temple, jugadores con una efectividad menor al 34% y subpar para la NBA de hoy en día. Jarrett Allen, tan efectivo en acciones de caída de pick and roll, pasó a tener una posesión de ese estilo menos por partido a pesar de convertir en un 70% de las ocasiones y jugar prácticamente los mismos minutos.

Atkinson se marchó y el nuevo entrenador es Jacque Vaughn, al mando como interino hasta el final de esta campaña. En apenas dos partidos poco pudimos ver de él, más allá de la decisión de poner a DeAndre Jordan como pivote titular y a Wilson Chandler iniciando sobre Taurean Prince. Sin un volantazo desde el banquillo, salvo que haya una racha milagrosa de Dinwiddie o LeVert, la verdad es que el panorama de los Nets es complicado para lograr más que una clara derrota en la primera ronda de los Playoffs.

Orlando Magic (30-34)

Vucevic Fournier

Puede subir si... Markelle Fultz y Aaron Gordon dan un salto de calidad

Así como la de los Nets, la de Orlando Magic es una situación con un panorama demasiado complicado como para pensarlos entre los mejores, aunque sea del Este: su récord de 30-34 pinta bien lo que fue su temporada 2019-2020, demasiado lejos del lote de élite como para que algo cambie realmente su realidad.

Se esperaba la posibilidad de que recuperen a Al-Farouq Aminu y Jonathan Isaac, dos baluartes defensivos que se lesionaron en el mes de enero, pero el nigeriano no estará en Disney e Isaac aún sigue en duda. Por lo tanto, el potencial que Steve Clifford puede exprimir para sacar un poco más de jugo es el de Markelle Fultz y Aaron Gordon, dos jóvenes mediáticos que son fija como titulares y parecen capaces de darle más al Magic.

Gordon sufrió una clara regresión en la 2019-2020: no llegó a la NBA como una amenaza con el tiro pero poco a poco fue progresando y alcanzó un interesante 35% en la 2018-2019, actuando bastante como alero. Sin embargo, en la campaña actual se derrumbó a un 31% en dicho rubro. No termina de ser muy convincente en ataque ni en defensa, pero de vez en cuando enseña que pareciera tener algo guardado: en el mes de febrero lo demostró un poco, amigándose de nuevo con el tiro y promediando 18,6 puntos, 8,9 rebotes y 5,7 asistencias.

En tanto con Fultz debemos hablar de progreso: el base ex Philadelphia 76ers finalmente demostró en esta campaña por que tiene un lugar en la NBA y, aunque esta lejos de lo esperado cuando fue elegido con el pick 1 del Draft, ha sabido mostrarse como un jugador sólido que tiene impacto en los ataques en transición y a la hora de defender. De pronto, en algún que otro partido se ha lucido, siendo la noche más recordada la del triple-doble de 21 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias para ganarle a los Lakers en el mes de enero. Un Fultz con confianza puede hacer al Magic algo más interesante en la burbuja y terminar de asegurar su lugar de Playoffs, para el que necesitan tres victorias más como máximo.

MÁS | Orlando Magic, ¿el lugar de redención de Markelle Fultz y Michael Carter-Williams?

Puede bajar si... No recupera su buena defensa

¿Lo más rescatable de Orlando en la 2019-2020? Como buen equipo de Steve Clifford, la defensa. Una vez más ese termina siendo el gran mérito por el que el Magic, un equipo que no va sobrado de talento ofensivo, estará en los Playoffs de la NBA. Si ese pilar se cae, todo se cae.

Desde mediados de enero hasta mediados de febrero, post lesiones de Aminu e Isaac, Orlando tuvo un segmento de 14 partidos en los que solamente consiguió cuatro victorias, dejando apenas tres veces a sus rivales abajo de los 105 puntos. Del 10 de febrero al 10 de marzo, en cambio, ganaron ocho encuentros y cayeron cuatro veces, pero para triunfar tuvieron que irse siempre por encima de los 115 tantos, algo que no será tan fácil con los rivales que tendrán en Disney (no lo lograron contra San Antonio, Dallas, Miami y Portland, las cuatro derrotas, todas con equipos que serán parte de la reanudación).

Debido a que, como comentamos, Aminu no regresará y lo de Isaac parece complicado, Orlando tendrá que hacer algún ajuste (¿más minutos de Mo Bamba?) para tratar de ser competitivo.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Agustín Aboy

Agustín Aboy Photo

Agustín es productor de contenidos para Sporting News. Comencé con los sitios globales de NBA.com en 2019. Enviado al NBA All-Star Game Chicago 2020. Frustración en la práctica de una gran cantidad de deportes, placer en contarlos desde afuera.