¿Quién representa la mayor amenaza para Memphis Grizzlies en su lucha por los Playoffs en la Conferencia Oeste?

Este viernes, la NBA oficializó la reanudación de la temporada 2019-2020, con la ratificación del exhaustivo plan de retorno, con unos cambios en el formato que le suman dramatismo a una carrera por los Playoffs en el Oeste que parecía encaminada en favor de los Memphis Grizzlies. Con los siete primeros equipos de las posiciones ya con boleto comprado para la postemporada (Dallas aún no lo tiene, pero debería pasar una locura para que no tenga su lugar), el Oeste solo debe definir quién será su octavo pasajero, con seis franquicias que se disputarán ese honor en Orlando.

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Por supuesto que el principal favorito sigue siendo Memphis, que tiene dos opciones de clasificación a su disposición: la primera pasaría por sacarle más de cuatro partidos de ventaja al noveno y de esa manera, evitar un Play-In. Difícil, teniendo en cuenta que tiene cinco perseguidores cercanos, pero lejos de ser imposible. Arranca con una diferencia de +3,5 con respecto a Portland, New Orleans y Sacramento, de +4 con San Antonio y de +4,5 con Phoenix.

La otra ventaja que seguramente tendrá Memphis, siempre y cuando mantenga esa octava colocación, es la doble chance en un eventual Play-In: mientras que el noveno estará obligado a ganarle dos partidos consecutivos a los Grizzlies, a ellos les bastará con imponerse en solo uno para definir su ingreso a la 1° Ronda de los Playoffs.

Con todo eso en mente, nos preguntamos, ¿quién representa la amenaza más importante para las chances de Memphis? Veamos.

¿Cómo será el calendario de cada uno?

Una de las cuestiones más interesantes de esta carrera es que hay una gran cantidad de duelos entre los involucrados. De hecho, el primer partido de Memphis será nada más y nada menos que ante Portland, por lo que en el segundo día de acción en Orlando ya tendremos un enfrentamiento completamente clave. Y ojo que no se queda ahí para los Grizzlies. Tras enfrentar a los Blazers, dos días después comenzarán un back-to-back frente a San Antonio y New Orleans, dos nuevos perseguidores.

Los Pelicans de Zion, por ejemplo, disputarán la mitad de los partidos ante los equipos de esta pelea: tras un fuerte inicio contra candidatos como Utah y Clippers, deberá jugar contra Memphis y Sacramento, mientras que después de un choque contra Washington (¿el más débil en Disney?) tendrá duelos ante San Antonio y nuevamente los Kings. A simple vista y en base a los récords y planteles, New Orleans tiene el calendario más accesible de los involucrados, coincidiendo con el final que se le venía antes de la suspensión. El récord combinado de los rivales a enfrentar queda por debajo del 50% de triunfos, el único de los 6 en esta carrera con una situación así. Portland y Memphis, por ejemplo, están en 60%.

Tanto Sacramento como San Antonio tienen tres duelos ante los equipos de este lote (Spurs y dos veces Pelicans para los Kings; Kings, Memphis y Pelicans para los Spurs); Portland tiene sólo uno (el primero contra Memphis), mientras que Phoenix es el único que no deberá verse las caras contra sus rivales, una situación que de cierta manera juega en su contra teniendo en cuenta que debe descontar terreno respecto a ellos para aspirar a acercarse a la zona de Play-in. Además, tiene el tercer calendario más duro de los 6.

¿Cuál es la mayor amenaza?

La respuesta obvia parece ser Portland Trail Blazers, por cuatro motivos diferentes: es el que más cerca está (3,5 juegos), cuenta con uno de los jugadores más peligrosos de la liga como Damian Lillard, recupera a dos hombres fundamentales como Jusuf Nurkic y Zach Collins, y aún tiene que chocar con los Grizzlies en su calendario.

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Si Nurkic y Collins regresan en buena forma, los Blazers tienen todo como para no solo quedarse con la novena colocación, sino incluso traerle muchos problemas a Memphis en un cruce directo. ¿La contra? Tienen el calendario más duro de los seis equipos involucrados, con sus rivales acumulando un % de triunfos combinados del 60%. Si bien tienen un sólo duelo "directo" (el primero ante Memphis), después deben verse las caras contra candidatos como Boston, Houston, Denver y Clippers (más los peligrosos Mavs de Doncic).

La mayor parte del éxito ofensivo de los Grizzlies se basa en su dominio en la pintura, ya sea mediante las penetraciones de Ja Morant o el juego interior de su tridente de hombres grandes (Valanciunas, Clarke y Jackson). De hecho, son el segundo conjunto que más dobles anota por partido (31,8), en contraste con su ranking de 23° en triples (10,9). El problema para Memphis es que si hay algo que la defensa de Portland sabe hacer, es proteger la zona pintada: permiten el tercer porcentaje en dobles más bajo de la liga (50%) y aparecen segundos en cuanto a tapas por partido (6,2). Y todo eso sin Nurkic ni Collins, dos excelentes marcadores interiores.

En definitiva, la defensa de Portland parece diseñada para contrarrestar la principal virtud de estos sorpresivos Grizzlies, a lo que también hay que sumarle el factor experiencia: un núcleo con Lillard, McCollum, Carmelo y Whiteside a la cabeza, enfrentando a uno con Morant, Brooks, Anderson, Jackson y Valanciunas. La brecha entre los entrenadores es aún mayor en ese sentido, con Stotts frente al debutante Jenkins.

Si hay un equipo que Memphis no debe querer enfrentarse son los Blazers. Pero no es el único.

New Orleans Pelicans también representa una amenaza muy clara para los Grizzlies, en este caso, mayormente vinculada a los nombres propios de jugadores como Zion Williamson, Brandon Ingram, Jrue Holiday, JJ Redick y Lonzo Ball.

New Orleans tiene uno de los mejores quintetos iniciales de toda la competencia y si bien decae cada vez que ingresan sus suplentes, un panorama de partidos al estilo de Playoffs, en los que Gentry achique la rotación y use durante mayores minutos a sus iniciales, puede jugarle muy favor a los Pelicans.

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Eso sí, en términos de emparejamientos, New Orleans parece caerle mucho mejor a Memphis que Portland. Para empezar, los Pelicans tienen serios problemas para defender la pintura (25° en dobles permitidos), mientras que con una muralla como Valanciunas, acompañado de jugadores atléticos como Jackson y Clarke, los de Jenkins tienen el personal necesario como para frenar a Zion. Al menos en los papeles.

La pregunta, ¿cómo responderá Williamson ante los primeros partidos con verdadera presión de su carrera NBA?, ¿veremos todavía una mejor versión de la que ya ha mostrado en sus primeros meses? Pronto lo sabremos.

¿Qué nivel de amenaza representan los otros tres conjuntos? Sacramento Kings parece ser el gran olvidado en esta ecuación, pero tiene en su favor el hecho de que traía el mejor récord entre los seis equipos, en los 15 juegos previos a la suspensión: marca de 10-5, superando el 8-7 de los Pelicans y el 7-8 de Memphis. Está claro que no tienen el poder de estrellas de sus competidores, pero tampoco podemos descartarlos completamente.

En cuanto a San Antonio Spurs, es fácil anotarlo como una posible amenaza, por su racha de 22 clasificaciones consecutivas a Playoffs y por la presencia de una estrella como DeMar DeRozan. Sin embargo, nada de lo hecho por los Spurs en esta temporada indica que el equipo sea capaz de encontrar una regularidad que precisará para remontar terreno. Como si fuera poco, LaMarcus Aldridge será baja por lesión. ¿Nos probará Popovich que estamos equivocados, como tantas otras veces antes? Complicado.

Por último, Phoenix Suns parte con las menores chances de todos, tanto desde lo matemático como por el potencial de su plantel. Si logran tener un mejor récord que Blazers, Pelicans, Spurs y Kings en este cierre, sería una sorpresa realmente mayúscula.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.