La NBA regresa en esta noche con unas Finales que parecen haber adquirido una dimensión completamente diferente a aquella con la que se entró en el Juego 3, pues tras la victoria de Miami Heat por 115-104 que puso el 2-1 en el global todo parece distinto. El conjunto de Florida echó el resto para conseguir un triunfo vital para sus aspiraciones, revitalizando al grupo e inyectándole un extra de motivación más que necesario para creer que la remontada es posible. Las pérdidas, la defensa sobre Anthony Davis y los 40 puntos de Jimmy Butler condenaron a Los Angeles Lakers, que asumieron como sencilla la victoria antes siquiera de saltar a la cancha y pagaron cara la osadía.
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De este modo llegamos a un punto clave en el transcurso de estas Finales de la NBA, pues un error de cualquiera de los dos contendientes puede cambiar el sino de la eliminatoria. En caso de vencer los de Erik Spoelstra no solo empatarían la serie sino que ganarían un valioso tiempo en su intento por recuperar a sus lesionados como son Goran Dragic (fascia plantar izquierda) y Bam Adebayo (cuello), teniendo por delante dos días de descanso para afrontar el Juego 5. Mientras, los Lakers podrían colocar el 3-1 arriba, algo que en la historia de las series por el anillo solo ha conseguido remontar LeBron James en 2016, una diferencia tradicionalmente insalvable que pondría tierra de por medio para acercar el objetivo del campeonato.
A partir de las 20 de México, 22 de Argentina, los dos únicos equipos todavía presentes en la burbuja se enfrentarán en el partido que está llamado a definir lo que resta de Finales, un duelo con muchas incógnitas y claves por resolver. Este Juego 4 lo podrás seguir en televisión a través de ESPN así como en NBA League Pass con comentarios en castellano e inglés.
¿Cómo responderá Anthony Davis?
De los 17 partidos que había disputado el jugador de los Lakers en Playoffs antes de entrar en el Juego 3, en 15 había superado los 25 puntos. De hecho, llevaba 7 partidos consecutivos alcanzando esa cifra, lo que suponía la 55ª marca más alta de la historia de la postemporada y la 15ª desde 2010, lo que sirve para poner en valor el fantástico nivel que el ex de Kentucky venía manteniendo en las últimas semanas.
Sin embargo, Miami Heat tenía una trampa preparada para Anthony Davis de cara al tercer encuentro después de que los sentenciase en los dos choques precedentes ante la ausencia de Bam Adebayo. De este modo, los de Florida plantearon una defensa centrada en quitar de las manos el balón al ala pivote a base de 2 contra 1 y colapsos de la pintura que, unido a sus problemas de faltas, lo dejaron en tan solo 15 tantos y 9 tiros de campo en todo el duelo.
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El poste bajo venía siendo una de sus zonas predilectas desde las cuales anotar, ya fuese desde ahí mismo o para generarse la ventaja suficiente para conseguir conversiones en la pintura, Miami lo alejó de ahí y le forzó a producir desde la larga distancia o tras bloqueo directo, cambiando considerablemente el plan de partido de Frank Vogel. Ahora, rumbo al Juego 4 Davis tiene la obligación de mostrar que es capaz de adaptarse a todo tipo de defensas y de zonas de acción si quiere ayudar a conducir a su equipo al anillo.
Las dos últimas ocasiones en las que se ha ido por debajo de los 20 puntos en un partido de Playoffs con los Lakers, al siguiente ha respondido con una exhibición ofensiva. Así, tras conseguir apenas 18 en el cuarto ante los Blazers salió al siguiente para anotar 43 tantos con 77% de acierto en tiros de campo. Misma historia la que sucedió tras el quinto y definitivo ante Rockets donde sumó 13 y en el arranque ante los Nuggets escaló hasta los 37 puntos, en un partido que resolvió desde el tiro libre.
Es de esperar que veamos una versión desatada en ataque de Anthony Davis pues así lo ha demostrado en lo que llevamos de temporada y Playoffs, pero será interesante ver cómo reacciona ante ello el Heat.
¿Quién será el factor X?
Quizás la gran cuestión que viene repitiéndose en los partidos de los dos contendientes a lo largo de todos estos Playoffs. Dos planteles muy marcados por sus principales estrellas como pueden ser LeBron James, Anthony Davis, Bam Adebayo o Jimmy Butler, pero que han demostrado encontrar recursos en su banco para resolver partidos o dar un paso al frente en caso de que la situación lo requiera.
En ese sentido, el Heat es quien más peligroso parece, más teniendo en cuenta la incógnita de sus lesionados que podrían ayudar a decantar la balanza o bien potenciar una versión diferente de lo que hemos visto hasta el momento de Miami. No obstante, tras tres encuentros en la eliminatoria los secundarios del equipo de Florida apenas han tenido impacto en el costado ofensivo y en especial Duncan Robinson, que se ha visto altamente penalizado por la defensa que le han planteado los Lakers, siempre perseguido por un rival y sin el espacio suficiente para anotar desde la larga distancia, como demuestra su 25% en triples.
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No obstante, los de Erik Spoelstra han sabido secundar bien al jugador formado en Michigan, pues han emergido tanto Kelly Olynyk como Kendrick Nunn como revulsivos desde el banco, promediando 15 y 11 puntos respectivamente hasta el momento y asumiendo un papel más que relevante en el desarrollo de los partidos.
Mientras, por el lado de los Lakers, la ausencia de una tercera estrella se ha convertido en una virtud más que en algo que los penalice a la larga. De este modo, no ha sido extraño ver noche tras noche cómo jugadores diferentes aparecían para ayudar a James y Davis a conseguir la victoria. Los mejores en ese sentido han sido Alex Caruso y Rajon Rondo, aportando mucho más allá de la simple anotación, incidiendo en defensa y haciendo mover al equipo en los momentos de caída y dotándoles de empaque. Por otro lado, se sigue esperando mucho más de figuras que han sido clave en todo el curso como Danny Green (5,3 puntos, 21% TC) y Kentavious Caldwell-Pope (9,7 puntos y 27% TC) y que no han disfrutado del acierto necesario.
Los pequeños detalles pueden definir un partido llegados a este punto, y todo lo que se salga de la norma puede romper un plan de partido. Veremos quién emerge y cómo impacta en el desarrollo del choque.
¿Qué planteará Miami en defensa?
El Heat es uno de los conjuntos más impredecibles entre partido y partido de toda la NBA. Erik Spoelstra se ha demostrado como uno de los más dados a cambiar su esquema de juego y realizar un plan de partido apenas conservador, sin miedo a los cambios y ser agresivo si la situación lo reclama.
Si en los dos primeros partidos la zona había sido la nota característica de la defensa del Heat, combinándola con una defensa individual de cambios, en el tercero modificó completamente la aproximación al juego para tratar de conseguir una reacción en los suyos y dejar sin alternativas a la principal figura de los Lakers como era Anthony Davis. Los californianos han basado buena parte de su juego en la producción ofensiva tras división y en el poste bajo en aclarado, de este modo, colapsar la pintura para evitar que haya penetraciones y pases cómodos así como un ecosistema que promueva que el posteador tenga espacio suficiente para anotar en los aledaños del aro puede poner en serios problemas a los Lakers, cuyo sistema es sencillo pero efectivo.
La composición de Miami ayuda a que puedan ser muy agresivos en sus planteamientos, ya que cuentan con jugadores pequeños y capaces de emparejarse con grandes así como interiores móviles. El plan de partido del Heat será sumamente diferente en caso de que puedan contar con Adebayo, un jugador que puede defender tanto exteriores como interiores y que al mismo tiempo puede marcar la diferencia en la zona.
Acción y reacción será la cuestión determinante en el Juego 4, es decir, ajustes de Miami y la respuesta de los Lakers a los mismos.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
