LeBron James vuelve a ver un anillo de campeón de la NBA de cerca. Tras su primera ausencia en Playoffs en 14 años, el jugador de Los Angeles Lakers regresó con todo junto a su equipo este año. Una vez más quedó en las puertas de un triple-doble y fue el líder en puntos, rebotes y asistencias de los Lakers en el triunfo por 102-96 ante Miami Heat para dejar las Finales de la NBA con un resultado de 3-1 que pone a los angelinos a apenas una victoria de lograr la corona, victoria que puede llegar como muy temprano el próximo viernes 9 de octubre en el quinto partido de la serie (20 horas de CDMX, 22 horas de Argentina).
Sin la necesidad de dejar la sensación de un dominio completo en esta definición, bien respaldado por sus compañeros en los momentos importantes llámense Anthony Davis (de forma mayoritaria), Rajon Rondo, Alex Caruso o Kentavious Caldwell-Pope, a los 35 años James está por conseguir su cuarto título en la liga en su décima aparición en las Finales. Pero todavía no se entusiasma del todo y lo deja claro, Miami mostró que es un equipo que da pelea ("son ásperos, muy bien entrenados") y no puede ser subestimado: "El trabajo aún no está hecho", declaró LeBron apenas terminado el partido y luego contó más sobre lo que estaba en juego: "Este fue uno de los partidos más importantes de mi carrera", manifestó.
Eso mismo le había dejado en claro a sus compañeros horas antes del encuentro, bajando un mensaje de líder: ganar hoy es obligatorio, les escribió por la tarde. Tras la derrota en el tercer partido, Los Angeles no podía permitir que Miami empate la serie y que se quede con toda la confianza de su lado, por los resultados y con la posibilidad de ir recuperando a jugadores claves como Bam Adebayo (regresó en este cuarto partido) y Goran Dragic (parece complicado que vaya a jugar en lo que queda).
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LeBron, que terminó con 28 puntos, 12 rebotes, 8 asistencias, 6 pérdidas y 8-16 en tiros de campo en sus 39 minutos en cancha, también reconoció la labor de sus compañeros. Esta noche el héroe entre los "secundarios" fue Kentavious Caldwell-Pope, autor de 15 puntos y de un triple y una bandeja claves en el final del partido, asistidas por LeBron James, que eligió pasarle el balón para que defina en vez de buscar la acción individual. "Al final del día, si estas en la cancha en el momento clave voy a confiar en vos. Creo que cualquiera que está en la cancha conmigo puede hacer jugadas y hoy fue el caso de KCP. Él se mantiene listo, hace su trabajo", afirmó James.
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James también regó de elogios a Anthony Davis, que brilló en este cuarto partido por su tarea defensiva, frenando bastante a Jimmy Butler: "Es el mejor defensor del año. Lo dijimos durante toda la temporada. Su habilidad para defender a jugadores de cualquier posición, tomar los desafíos, no solamente en el perímetro sino protegiendo la pintura. Los guardias lo atacan, pero es difícil anotarle. ¿Vieron lo alto que tuvo que tirar el balón (Tyler) Herro? Entró, pero tuvo que tirarla casi hasta el techo. El muchacho (AD) puede hacer todo en defensa. Defender al balón, el poste, mover los pies junto a los guardias, desafiar tiros, poner el cuerpo contra los grandes, ¿necesito decir más?"
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Los Lakers llevan una íncreible racha de 56-0 en la temporada 2019-2020 a la hora de contar partidos en los que empezaron el último cuarto ganando, algo que se repitió en este encuentro, en el que vencían por 75-70 al haber estirado la ventaja en los segundos finales del tercer período. "Pienso que el último cuarto es obviamente el momento de ganar los partidos. Tenés 12 minutos para ajustarte en defensa llevando la ventaja, tratando de mantenerla, y tenés que tratar de ejecutar en ataque. Esa es la mentalidad. Tenemos 12 minutos. Si llevamos la ventaja, nuesto trabajo es sumar más que el oponente o igualar su cantidad de puntos, porque si ganamos el último cuarto, ganamos el partido", expresó LeBron sobre eso.
Además, el tres veces MVP de las Finales (2012, 2013 y 2016) expresó que no le modifica demasiado el hecho de que por primera vez en estas Finales haya un día extra de descanso entre partido y partido, con el quinto encuentro llegando el día viernes: "Para mí no importa. Podría jugar cada día si ese fuera el caso. Pero voy a tomar ventaja completa sobre esto. Me da una oportunidad de continuar poniendo bien mi cuerpo, mi mente, todo. Tomaré toda la ventaja, pero no significa nada más para mi que tener un pequeño día extra".
Sobre el tema del cansancio, que empieza a ser un factor en algunos jugadores a esta altura de los Playoffs, continuó expresándose LBJ: "A este punto de la temporada ya no me preocupo sobre el descanso. No me preocupo sobre dormir. No me preocupo sobre descansar durante el partido. Obviamente que puedo salir, el entrenador tiene un ritmo y una rotación que seguimos. Pero no me importa descansar porque podré hacerlo en una semana como máximo, si llega a ir hasta allí. Podré descansar un mes entero, que es algo que no haré por como soy, ya lo saben"
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