Mientras esperamos para ver cómo avanza la historia de la 2019-2020 NBA en tiempos del COVID-19, es momento de balances y repasos de lo sucedido hasta ahora. En este caso, nos vamos a centrar en la tarea de los cinco latinos de la competencia, pasando de súperestrellas como Karl-Anthony Towns, a novatos haciendo sus primeras armas como Juan Toscano. Empecemos.
Karl-Anthony Towns
Es difícil calificar la temporada de Towns, ya que habría que dividirla en dos. Por un lado, el plano del rendimiento individual y estadístico, donde claramente vive la mejor campaña de su carrera: alcanzó la máxima en puntos (26,5) y asistencias (4,4), además de bajar 10,8 rebotes por encuentro, y se transformó en uno de los tripleros más peligrosos de toda la competencia (3,3 aciertos por partido, 41% de eficacia).
En ese sentido, no hay prácticamente puntos negativos para marcarle al dominicano, quien se sigue consolidando como uno de los internos más completos y productivos de la competencia.
Pero claro, algunos otros factores contribuyen a darle un sabor amargo a su 2019-2020. Para empezar, se perdió casi la mitad de los partidos de su equipo (29 de 64) por diferentes lesiones. Una situación completamente nueva, para un jugador que apenas había faltado a cinco encuentros durante sus primeras cuatro campañas NBA (jugó los 82 en las tres iniciales).
Y después está el factor colectivo. Más allá de un buen inicio de Fase Regular, ganando cuatro de los primeros cinco encuentros, Minnesota volvió a penar rápidamente y a ubicarse en el fondo de la tabla, muy lejos de la zona de Playoffs.
Lo llamativo es que ese récord lejos está de ser responsabilidad de los partidos perdidos por Towns. A punto tal que tuvieron mejor marca sin él (9-20), que cuando el interno estuvo en cancha (10-25).
Esto no significa que los Wolves sean mejor equipo sin su máxima estrella. Lejos estamos de afirmar eso. Pero sí demuestra que los problemas de la franquicia van mucho más allá de la eventualidad de una lesión.
Al Horford
La llegada de Al Horford a los Sixers despertaba muchas preguntas, ligadas a cómo encajaría en el esquema de Brett Brown, jugando junto a Ben Simmons y Joel Embiid. Y lo cierto es que tanto el domincano como el propio Philadelphia, aún hoy siguen buscando respuestas para muchos de esos interrogantes.
La 2019-2020 de Horford no está siendo buena. Como tampoco lo está siendo la campaña de los 76ers, al menos en relación a lo esperado de ellos. El ex Celtics promedia 12 puntos, 6,9 rebotes y 4,1 asistencias, lanzando un 44% de campo, por lejos la peor cifra de su carrera (nunca había bajado del 47%).
The moment that @Al_Horford hit a three to shift the momentum to all Sixers.#PhilaUnite
— Philadelphia 76ers (@sixers) October 28, 2019
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Está más que claro que la compatibilidad de Horford y Embiid no es la mejor y que la función del dominicano no termina de caerle cómoda. Después de todo, se trata de un jugador ideal para desempeñarse como cinco en el básquet actual, brindando lectura y ayudando a abrir la cancha, pero que en Philadelphia se ve mayormente limitado aun rol de tirador, para el cual no está preparado (34% en triples).
Tener a Horford como un cuatro triplero tiene mucho sabor a desperdicio, pero por momentos eso es exactamente lo que han hecho los 76ers con su gran fichaje del pasado verano estadounidense. Y siendo realistas, mientras la mayoría de sus minutos sigan llegando con SImmons y Embiid a su lado, no parece haber demasiado lugar para que lo veamos sacar a relucir el resto de sus talentos.
JJ Barea
Con jugadores como Luka Doncic, Seth Curry, Delon Wright y Jalen Brunson en el plantel, Dallas no ha tenido demasiados minutos en esta temporada para JJ Barea. Sus participaciones han sido esporádicas, aunque cuando tuvo la confianza de Carlisle, ya sea por decisión o necesidad, el boricua respondió.
Barea participó de 26 partidos en la 2019-2020, con un promedio de 15 minutos por presentación, durante los cuales aportó 7,5 puntos y 3,8 asistencias, con un 38% en triples. Para nada mal, teniendo en cuenta su tiempo en el campo.
Sin el protagonismo de años anteriores, el puertorriqueño se sigue mostrando como un anotador eficaz cada vez que pisa la cancha y los Mavs se dan el lujo de tener a un hombre de su calidad en el fondo de la rotación.
What a pump-fake from J.J. Barea (10 PTS in 3Q)! #MFFL
— NBA (@NBA) November 27, 2019
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Juan Toscano
Tras destacarse en la franquicia afiliada en la G-League, las lesiones y la mala campaña de los Warriors le abrieron la puerta del primer equipo al mexicano, quien participó de 13 partidos, saliendo como titular en seis de ellos.
En 20,9 minutos por juego, Toscano promedió 5,3 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias, lanzando un 46% de campo y dando aportes intangibles interesantes.
Más | La Pizarra NBA: Juan Toscano y su valor en Golden State Warriors
El alero de 26 años está buscando un lugar en la liga y en sus primeros pasos en ella, dejó en claro que pertenece y que tiene virtudes para brindarle a cualquier equipo que apueste por él. Veremos cómo sigue su camino, una vez que se reanude la acción.
Pablo Prigioni
La 2019-2020 presentaba el gran desafío para Pablo Prigioni de ser el asistente principal de Ryan Saunders en Minnesota, luego de tener una función más limitada al desarrollo de jugadores en Brooklyn.
Como ya analizamos con Towns, la campaña de los Wolves no ha sido buena y aunque ilusionaron en las primeras semanas, todas las debilidades del equipo empezaron a saltar a la vista a partir de mediados de noviembre. El sueño de la postemporada quedó descartado mucho más rápido de lo deseado.
Una buena para el cordobés: el reencuentro con D'Angelo Russell, traspasado en febrero desde Golden State, y un jugador con el cual ya tuvo un excelente entendimiento durante su estadía en los Nets.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
