Una bandeja es de los movimientos más simples que puede haber en el básquetbol: ir abajo del aro, apoyarse del cristal para que el balón entre y listo. Pero claro, estamos hablando de una situación hipotética en la que no hay ningún rival abajo de la canasta. ¿Qué pasa cuando hay algunos contrincantes que evitan que anotes?
MÁS | El ranking de todos los rivales de Michael Jordan en los Playoffs
En la historia de la NBA tenemos las respuestas. Pero en esta entrega, recapitularemos algunas de las más espectaculares que han habido: Michael Jordan, Julius Erving y más. Vayamos a ver…
Nick Young
Tremendo lo que hizo en el enfrentamiento entre Dallas Mavericks y Washington Wizards. Cubierto por Shawn Marion en la línea lateral, botó y giró 360 grados paralelo a la línea de base, se suspendió en el aire con Tyson Chandler y Marion marcándolo, pero volvió a girar, soltó la bola y después de haber pasado por abajo de la canasta terminó anotando.
J.R. Smith
En un duelo entre San Antonio Spurs y Denver Nuggets, el campeón con los Cavaliers regaló otra bandeja en la que se vio un giro de 360 grados. Atacó el aro y cuando voló, Tim Duncan se le plantó en la llave, pero se escabulló con un giro y aunque parecía que el tablero ya quedaba atrás, le dio tiempo de dejar la bola y apoyarse en el cristal para anotar.
Michael Jordan
Su Majestad no podía faltar en esta lista y será doble. En contra de los Nets, Jordan penetró, dos rivales salieron a intentar bloquearlo y entre ellos dos, saltó, se suspendió una milésima de segundo en el aire y cuando iba hacia abajo, ya del otro lado del aro, soltó la bola en un movimiento acrobático y, apoyándose con el cristal, encestó para encender a los asistentes.
Julius Erving
Uno de los movimientos más espectaculares que hemos visto en la historia del básquetbol. Fortaleza, atletiscismo, talento. Pasó por atrás de la canasta, sujetó el balón con una sola mano, se extendió y desde atrás, se estiró para anotar con apoyo del tablero. Espectacular y una obra de arte lo que hizo Erving.
Michael Jordan
Sí. Efectivamente es esa jugada. En contra de los Lakers, en las Finales de 1991, Su Majestad lo logró. Estuvo cerca de volcar la bola, pero a medio camino se dio cuenta que lo podían bloquear, así que cambió el balón a su mano izquierda y encestó en una de las canastas más espectaculares de toda la NBA.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.