Una de las mayores expectativas a la hora de pensar en los Playoffs 2020 de la NBA pasa por lo que será el debut de Luka Doncic en esas instancias. El esloveno se ha consagrado en este torneo como una de las máximas estrellas de la competencia, en apenas su segundo año en Dallas Mavericks, anotándose incluso en la lucha por el MVP gracias a sus promedios de 28,7 puntos, 9,3 rebotes y 8,7 asistencias.
Ahora, Doncic tendrá la responsabilidad de sostener esas cifras en unos Playoffs que por el momento tienen a los Mavericks en la séptima posición del Oeste, chocando con los Clippers en la 1° Ronda (si bien aún la clasificación no es oficial, debería ocurrir una catástrofe deportiva para que los de Carlisle no estén en la postemporada). Claro que se trata de algo completamente dinámico: no solo los de Doc Rivers pueden variar su posición, sino también los texanos, quienes se encuentran a un juego y medio de Houston y OKC, y a dos y medio de Utah.
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¿Qué podemos esperar de Doncic en esos cruces decisivos?, ¿confiamos en que podrá mantener o incluso subir su nivel? Sabemos que no tenemos antecedentes en la liga de los cuales aferrarnos para buscar una respuesta, pero la historia es muy diferente en el básquet FIBA, donde el base ha participado de un gran número de partidos y etapas definitorias.
Veamos cómo le fue, centrándonos en los tres torneos principales que disputó: Liga ACB, Euroliga y Eurobasket.
Liga ACB
Doncic formó parte de cuatro Playoffs ACB y en tres de ellos, Real Madrid se levantó con el título. Mientras que en el restante (2017), perdieron una recordada final ante el Valencia. De todas maneras, hay que separar, teniendo en cuenta la poca participación del esloveno en los primeros dos campeonatos: en el 2015 jugó apenas dos partidos y 15 minutos totales de postemporada, mientras que al año siguiente participó de ocho encuentros, pero con una media de apenas 8 minutos.
Nos centraremos entonces en lo ocurrido en 2017 y 2018, donde Doncic ya era pieza fundamental del equipo de Pablo Laso. En el primero de los casos, la experiencia no fue la mejor, ni desde lo colectivo, por la mencionada caída por 3-1 ante el Valencia, ni tampoco desde lo individual. El actual jugador de Dallas promedió 6,5 puntos, 4,7 rebotes y 2,7 asistencias en 10 partidos y tuvo una caída especialmente notoria en las Finales: en tres de los cuatro juegos anotó entre 2 y 3 puntos, mientras que sumó 13 en el restante. Su primer paso importante fue claramente en falso.
La historia sería completamente diferente al año siguiente, en su despedida del club español. Para empezar, sus promedios subieron a una producción mucho más acorde a su media en Fase Regular de ese entonces: en nueve encuentros promedió 11,8 puntos, 5,7 rebotes y 4 asistencias. Y aún más importante: brilló en las Finales ante el Baskonia, llevando sus cifras a 12,8 puntos, 6,8 rebotes y 2,8 asistencias. Aunque Rudy Fernández se quedó con el MVP, Doncic no estuvo lejos de ese galardón.
Euroliga
La Euroliga trae recuerdos igual de positivos para Doncic, quien disputó tres de esos certámenes. De nuevo, los Playoffs 2016 los descartaremos por todavía llegar en una etapa de formación del esloveno, quien jugó solo 16 minutos totales en esa postemporada. Enfoquemos en lo sucedido en 2017 y 2018.
En el primer caso, el Madrid alcanzó el Final Four, venciendo en cuartos al Darussafaka turco por 3-1, en una serie en la que Doncic promedió 7 puntos, 5,5 rebotes y 4,5 asistencias. Sin embargo, el Final Four no sería nada benévolo con los españoles: derrota en semis ante el Fenerbahce y caída en el juego por el tercer puesto ante el CSKA. ¿Qué hizo el base en esos partidos? Realmente poco. Promedió 3 puntos y no anotó ni un solo gol de campo, ¡0 de 9! Tal como le sucedió en la ACB de ese año, su tarea no estuvo a la altura a la hora de la verdad.
Pero tal como demuestra la foto que acompaña esta sección del artículo, el 2018 llegaría con un giro de 180 grados. Para empezar, el Madrid se alzaría con el título más deseado de Europa y lo haría con un Doncic en un nivel superlativo. En cuartos fue clave para vencer al Panathinaikos, promediando 10,5 puntos, 5 rebotes y 4,5 asistencias, incluyendo un partidazo en el decisivo Juego 4: 17 puntos, 5 asistencias, 4 rebotes y 4-8 en triples para sellar el pase al Final Four. Y allí, siguió apareciendo el Doncic más dominante: 16 puntos y 7 rebotes en las semis ante el CSKA y 15 tantos y 4 asistencias en la final ante el Fenerbahce. ¡Campeón y MVP! Deuda más que saldada.
Eurobasket
Hasta ahora vemos una tendencia muy clara: un 2017 que lo vio fallar en las instancias finales, tanto en la ACB como en la Euroliga, y un 2018 extraordinario desde todo punto de vista. Sin embargo, hay un factor que se sale de esa norma y es lo que sucedió en el Eurobasket 2017 disputado entre Rumania, Finlandia, Israel y Turquía.
Decir que Doncic ganó solo ese Eurobasket sería totalmente injusto con aquel seleccionado de Eslovenia y especialmente con Goran Dragic, quien de hecho se terminó quedando con el MVP. Pero está más que claro que la diferencia entre actuaciones anteriores de ese mismo equipo y lo que ocurrió en esa ocasión tuvo al nacido en Liubliana en el centro de la escena.
Luego de promediar 13,8 puntos y 7,2 rebotes en los cinco compromisos de Fase de Grupos, Doncic abriría definitivamente el show una vez comenzados los cruces mano a mano. Los octavos de final ya lo vieron en un altísimo nivel, terminando con 14 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias en una cómoda victoria ante Ucrania por 24 de diferencia. Mientras que en cuartos llegaría uno de sus mejores partidos como profesional, previo al salto a la NBA: sumó 27 puntos y 9 rebotes ante la Letonia de su hoy compañero Kristaps Porzingis (34 puntos), impulsando a los suyos al triunfo por 103-97. De las 27 unidades de Doncic, 12 llegaron en los últimos seis minutos de ese choque.
Tras dejar en el camino a dos rivales de menor nivel, Eslovenia se enfrentó con las dos mayores potencias que ha tenido el básquet FIBA en estos años: España y Serbia. Y Doncic siguió estando a la altura. En las semis ante los de Scariolo, coqueteó con el triple-doble: 11 puntos, 12 rebotes y 8 asistencias, ayudando a dar un golpe contundente por 92-72. Y si bien bajó un poco sus números en la final ante los serbios (8 puntos y 7 rebotes), su equipo no lo extrañó: se impuso a los serbios por 93-85, con Luka jugando apenas 23 minutos.
De esta manera, Doncic promedió nada menos que 15 puntos y 9,3 rebotes en los Playoffs del Eurobasket, quedándose además con un título histórico y ganándose un lugar en el Quinteto Ideal de la competición. Nada mal para un chico que por entonces tenía apenas 18 años...
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.