Nadie descubrirá nada nuevo al decir que el talento de Evan Mobley luce como el de alguien especial. Sus cualidades y techo como jugador fueron ampliamente destacadas en la previa del Draft, y el hecho de haber sido elegido en el tercer lugar es un buen indicativo de lo que se espera de él. Pero una cosa es lo que se espera y otra cosa es verlo materializado en el campo. Y si bien aún falta para el inicio de la Fase Regular, lo que Cleveland Cavaliers está encontrando de su gran esperanza en esta Summer League de Las Vegas es ilusionante, porque el interior está empezando a mostrar destellos de ese unicornio que muchos ven en él.
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El concepto se hizo común en los últimos años. Un interior grande (2,13 metros) con la capacidad para salir del molde del pasado y exhibir una versatilidad digna de un perimetral. Mobley parece tener todo lo que ese cartel demanda. O mejor dicho, puede llegar a tenerlo. Porque es cierto que hay mucho margen para mejorar (al cabo hablamos de alguien de apenas 20 años), desde lo técnico (sobre todo con el tiro exterior) y lo físico, pero los recursos están allí y deslumbran, porque no es común ver a un jugador tan grande moviéndose con esa habilidad con el balón y haciendo las cosas que hace.
La victoria del miércoles de Cleveland Cavaliers ante Orlando Magic (94-89) dejó algunos detalles destacables del ex USC, quien sumó 14 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias y un tapón en 31 minutos. Sí, aún con una mejorable eficacia (5-15 campo, 1-3 triples). Pero de nuevo. En los detalles está la magia...
"Es extremadamente talentoso y bueno con el balón, en cualquier situación que sea", señaló con precisión JJ Outlaw, su coach en esta Summer League. Lo que Mobley puede hacer con el balón es uno de sus fuertes, en cualquier tipo de contexto. Su juego de pies, recursos técnicos, habilidad, creatividad y drible salen a la luz en un abrir y cerrar de ojos cuando está en cancha.
Empezamos con una acción simple y bonita con la que inició el partido: posteo, media vuelta y lanzamiento por encima de la marca. Elegante y letal.
Sigamos con un punto en común que iremos viendo: Mobley recibiendo en el codo. En este caso, usa su drible para perfilarse y sacar el lanzamiento desde la línea de libre, suave y perfecto como cualquier tirador...
Si nos vamos alejando del aro, que llegue el triple. De nuevo, debe mejorarlo (o estabilizarlo), pero la amenaza está.
Pero claro, no sólo puede salir y tirar cuando recibe en el perímetro. En este caso, con paciencia, usa el drible y penetra con velocidad y facilidad. La acción termina en salto entre dos cuando llega la ayuda, pero qué fácil se muestra su movimiento.
Ya vimos su ductilidad para alejarse del aro. Pero claro, también puede resolver como un interior fuerte jugando en situaciones de pick and roll.
Pero más allá de la anotación, un unicornio tiene que ser en los papeles un jugador multidensional, y la capacidad para encontrar a sus compañeros debe estar. La lectura y creación de Mobley son puntos destacados. Sus 6 asistencias ante Orlando son un buen ejemplo de lo que puede hacer, y el punto de inicio generalmente fue el codo, exhibiendo buen timing más allá de algunas pérdidas y gran visión.
Aquí encuentra a Lamar Stevens para el alley-oop.
Más tarde, a Okoro luego de un corte para luego enterrarla con potencia.
Otro corte, otro buen pase para una opción abajo del aro...
Y una última con enorme paciencia, sin desesperarse tras levantar el drible y esperando un gran corte del compañero. "Puede ver el campo de gran manera, entiende los conceptos, así que cuando sus compañeros se mueven o cortan puede encontrarlos en lugares donde puedan hacer algo positivo con el balón", elogió su coach.
"Fue apenas el segundo partido y tengo que seguir construyendo sobre eso. Hoy me sentí más cómodo, con más energía, siento que iré mejorando partido a partido. Trato de mantenerme en el momento, sin pensar en la presión o en lo que vendrá. Tengo que seguir mejorando en diferentes aspectos de mi juego para llegar listo al comienzo de la temporada", señaló Mobley después del encuentro, mostrando su optimismo por su tarea pero dejando en claro que es apenas uno de sus pasos iniciales. Lo que está claro es que esos pasos iniciales ilusionan a los Cavs.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
