Los Angeles Lakers quieren que el campeonato conseguido a principios de octubre sea el comienzo de algo mucho más grande y para ello han arrancado esta Agencia Libre realizando varios movimientos interesantes y de una entidad considerable, con los que deberían poner solución a algunos de los problemas que acompañaron al equipo de Frank Vogel a lo largo del curso pasado.
En el poco tiempo transcurrido desde que se abrió el mercado, tanto de traspasos como de fichajes, los de oro y púrpura se han mostrado sumamente activos y proclives a sacrificar piezas que han funcionado a la perfección en su esquema por otras con un talento superior pero cuyo encaje en la estructura es a día de hoy una incógnita.
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El principal movimiento vino de la mano de Montrezl Harrell, que tomó la determinación de cambiar de equipo pero no de ciudad, pasando de los Clippers a los Lakers ya que, según reportaron ESPN y The Athletic, el interno habría llegado a un acuerdo de dos temporadas siendo la última con una opción de jugador, a cambio de 19 millones de dólares en total.
Esta sorprendente noticia es un arma de doble filo porque su llegada golpea de lleno a los rivales más cercanos de los Lakers, sustrayéndole uno de los jugadores clave de su proyecto hasta el momento y que junto a Lou Williams había conformado una pareja sumamente eficaz en ataque. Además, viene a reforzar una de las facetas clave que hizo a los de oro y púrpura tan difíciles de batir como es el banco, ya que Harrell llega tras haber sido nombrado Mejor Sexto Hombre del año y con el cartel de jugador versátil bajo los aros.
En cierto modo, que los Lakers se coronaran como campeones fue más fruto de su adaptación a las circunstancias y del excelente nivel y solidez mostrado por todo el equipo que por la simple acumulación de talento. Esto, no obstante, no parece que pueda ser algo perdurable en el tiempo, más teniendo en cuenta la complicada temporada de 72 partidos que se avecina y los refuerzos de otros rivales de Conferencia. Es por ello que la gerencia dirigida por Rob Pelinka ha intensificado sus esfuerzos por añadir más activos al roster que puedan complementar a LeBron James y Anthony Davis.
Una de las claves de los californianos en su exitosa carrera en los Playoffs fue su vocación como equipo defensivo, siendo en este ámbito uno de los mejores permitiendo 108,7 puntos a sus rivales por 100 posesiones. Es por ello que la adición de Harrell debería añadir más efectivos a ese respecto, pues el ala pivote fue uno de los más destacados de Clippers el curso pasado (105,8 DefRt) y dejando a sus emparejamientos en una media de 42,6% en tiros de campo. Sin embargo, Harrell ha dado muestras de ser un jugador tendente a la irregularidad y a atravesar periodos de lagunas en ambos extremos del campo.
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Es un jugador intenso y activo en defensa pero despierta dudas a la hora de ejecutar planes de partido variables y en las marcas exteriores. Pese a todo, Harrell mejora considerablemente el recambio interior que hasta ahora tenían los Lakers con McGee y Howard.
Posición | ||
Base | Dennis Schroder | Alex Caruso |
Escolta | Wesley Matthews | Talen Horton-Tucker |
Alero | LeBron James | Kyle Kuzma |
Ala pivote | Anthony Davis | |
Pivote | JaVale MCGee | Montrezl Harrell |
Probablemente lo más destacable del encaje de Harrell en Lakers sea su aporte ofensivo, ya que teniendo en cuenta lo proclives que han sido a jugar en llegada y apostar por el bloqueo directo como eje de su juego, los angelinos podrían encontrar en el nativo de Lousville un perfecto ejecutor en las continuaciones y transiciones. De hecho, Davis y Harrell anotaron la misma media de puntos por partido (3,8) en el pick&roll, siendo el recién llegado ligeramente más eficiente con 1,31 tantos por posesión. Además, el interior permitirá a AD recuperar su condición de ala pivote y que Vogel pueda plantear formatos móviles en defensa que tiendan al cambio en lugar de opciones más conservadoras.
Pero los Lakers no se detuvieron en el acuerdo por Harrell, ya que ataron según diferentes fuentes a un veterano contrastado como Wesley Matthews, proveniente de Milwaukee Bucks, y que firmará por una temporada a cambio de 3,6 millones de dólares en su intento por ser partícipe de un equipo aspirante al anillo. Lo más relevante de la firma de este veterano de 34 años es su perfil como defensor perimetral, alguien que viene de ser una de las llaves defensivas del mejor equipo de la Fase Regular pasada, desempeñando una labor esencial en el marcaje de la estrella rival noche tras noche. Según Basketball Reference, el jugador formado en Marquette fue el sexto jugador más determinante de Milwaukee en el apartado defensivo, con 2,4 Defensive Win Shares, por delante de George Hill sin ir más lejos.
MÁS | Matthews refuerza a los Lakers
A esto cabe sumar lo más conocido de la figura de Matthews como es su tiro exterior, pues durante toda su carrera se ha conseguido ganar una reputación de especialista ofensivo en este aspecto, aportando tanto en situaciones a pie firme como en recepción tras mano a mano o entregas. Durante el último curso en los Bucks el escolta fue el segundo más prolífico en este sentido, solo superado por Khris Middleton, anotando un 36% de sus intentos y una media de 1,6 por partido.
Las inminentes incorporaciones de Matthews y Harrell se unirán a la de Dennis Schroder, que fue intercambiado por Danny Green y que debería ocupar el espacio que pueda dejar Rajon Rondo como base principal, siendo de este modo la tercera espada de un proyecto que en apenas tres movimientos ha conseguido dotarse de incluso más talento en ambos extremos del campo. Queda resolver las incógnita de Avery Bradley, el cual es agente libre tras rechazar su opción de jugador, y que ha recibido interés de diferentes equipos como Bucks y Warriors aunque podría renovar con los californianos por un contrato más lucrativo que el anterior; y también la de Kentavious Caldwell-Pope, que se ha revalorizado enormemente por su gran papel en el equipo.
De este modo el equipo de LeBron James estará en disposición de armar un roster con talento suficiente para ser considerados candidatos al anillo por pleno derecho, contando con jugadores contrastados y con la veteranía suficiente para aportar desde el primer minuto.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.