El fondo y la forma que concluyó la pasada temporada de los LA Clippers supusieron una tremenda decepción respecto a sus expectativas. Lejos de luchar por el campeonato, privados de coronarse como el mejor equipo de la ciudad de Los Ángeles y con sus dos recién llegadas estrellas todavía adaptándose, la eliminación a manos de los Denver Nuggets tras remontar un 3-1 en contra fue demasiado para Doc Rivers. Su salida del banco abrió la puerta a su asistente principal, Tyronn Lue, quien había recalado en la franquicia en esa misma campaña tras concluir su etapa en los Cavaliers un año antes.
Las dudas con respecto al joven técnico no eran pocas, pero con el paso de los partidos los resultados han acabado por llegar y, a punto de concluir la actual Fase Regular, los californianos están en un estado de forma espléndido. Sin embargo, el hecho de que sean el tercer mejor balance del Oeste (38-18), a dos encuentros de distancia del segundo y por delante de los vigentes campeones, no está despertando la misma atención y repercusión que el pasado curso. Inlcuso, podría decirse que están rindiendo por debajo del radar en cierto sentido.
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La principal baza de los Clippers cuando se unieron Kawhi Leonard y Paul George al equipo parecía ser la defensa. El hecho de contar con dos de los mejores defensores perimetrales y una figura versátil como Patrick Beverley hacían de los angelinos un arma de doble filo y con potencial ganador. Pese a esto, Ty Lue le ha dado la vuelta al enfoque del equipo y está convirtiendo a los californianos en uno de los conjuntos más eficientes en el otro extremo, es decir, en ataque. Mientras se firman estas líneas los de Lue poseen la ofensiva más eficiente de toda la NBA con 117,6 puntos por 100 posesiones, un incremento considerable respecto a los 113,3 del pasado curso, que les valieron para ser segundos.
Los movimientos desde los despachos han tenido mucho que ver en el desarrollo de los Clippers, haciendo posible la llegada de figuras como Serge Ibaka, Luke Kennard, Nicolas Batum o más recientemente Rajon Rondo. Todos ellos han servido para poner las bases de una ofensiva eficiente y que funciona a base de triples, potenciando las principales virtudes de dos de sus estrellas sin necesidad de que haya que abusar de ellos en ataque para sumar victorias.
Lue ha conseguido despejar considerablemente el campo en ataque, puliendo mucho más las secuencias de bloqueo directo, algo donde ha tenido mucho que ver el aporte de Ibaka, más completo que Montrezl Harrell en ese sentido. Como consecuencia de esto, los Clippers han experimentado un salto cualitativo considerable en cuanto al aporte exterior como así reflejan los datos:
Temporada | Triples anotados | Triples intentados | %T3 | Ránking NBA |
2019-2020 | 12,4 | 33,5 | 37,1 | 6º |
2020-2021 | 14,5 | 34,4 | 42,1 | 1º |
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Esto tiene que ver principalmente con un cambio en la aproximación con respecto a la creación de juego. Si antes todo emanaba de un uso considerable del drible, derivando en acciones de aclarado o de bloqueo directo explícito, ahora la circulación de balón ha aumentado y la eficiencia ofensiva lo ha hecho en consecuencia. Según InStat, la principal fuente de puntos de los angelinos ha llegado desde situaciones de catch & shoot (recepción y tiro) con 25 tantos por noche y 1,32 puntos por posesión. Todo ello sin que la presencia del bloqueo directo se vea afectada, con 19,4 tantos por encuentro y 1,00 puntos por posesión, siendo esta la segunda fuente de anotación.
De este modo, Lue ha colocado a los Clippers a la cabeza del triple en general y más concretamente en el lanzamiento sin drible:
Temporada | Anotados | Intentos | Porcentaje | Ránking NBA |
2019-2020 | 9,1 | 23,7 | 38,4% | 7º |
2020-2021 | 10,9 | 25,2 | 43.3 | 1º |
De igual modo, el número de triples intentados tras drible (pull ups) se ha reducido considerablemente, algo lógico al desprenderse de Lou Williams y que este haya tenido un rol menor en este curso. Si en la pasada campaña destinaban 9,2 triples con un 33,5% de acierto, ahora son tan solo 8,4 y un porcentaje del 38,6%, un aumento sustancial. El acierto en los angelinos es algo generalizado. Los 9 jugadores que han intentado al menos 100 triples en este curso en los Clippers promedian más de un 35%, lo cual ya es más eficiente que centrar los esfuerzos en tirar desde la pintura.
Lue está sabiendo gestionar a la perfección a sus activos y colocarlos en posiciones adecuadas. Reflejo de ello es el rendimiento de Paul George, especialmente en las últimas semanas, a lo largo de las que ha promediado 30,6 puntos con un 58% de acierto en triples que los ha llevado a sumar un balance de 5-0 con él. Algo donde ha tenido mucho que ver el hecho de que Kawhi y este hayan visto incrementados sus minutos juntos, favoreciendo la mejora de su relación y coexistencia en cancha. Todo suma y en esta temporada los Clippers han encontrado el modo de combinar descanso con exigencia competitiva.
Si en la 2019-20 se perdieron 24 partidos PG y 15 Leonard, coincidiendo en 37 duelos, en esta solo han faltado en 11 y 14 respectivamente, estando juntos en 36, y todavía no ha concluído el curso, siendo la segunda pareja más usada por Lue. El rendimiento de ambos también es mejor, con un 15,8 de net rating, siendo la más eficiente de todo el equipo, mientras que el año pasado el número era 13,2 y eran la 9ª mejor dupla.
"Cuando tienes cuatro o cinco jugadores en rotación, será difícil anotar muchas veces, así que no estamos realmente preocupados por eso", dijo Lue al respecto del rendimiento del equipo en la parcela ofensiva recientemente. "Sabemos que hemos sido de las mejores ofensivas en la liga durante toda la temporada cuando estamos sanos. Entonces, lo más importante es entrar todas las noches, competir en el lado defensivo, y saber que el ataque se va a gestionar solo. Cuando faltan muchos jugadores clave, es difícil anotar cada noche, pero la actividad y el esfuerzo múltiple en el lado defensivo es lo que realmente estamos buscando en este momento".
“Lo más importante es continuar desarrollando los hábitos correctos: compartir la bola, moverla, tener una mentalidad defensiva y comprender nuestra base", siguió el técnico. "Eso es lo más importante para mí. Va a haber victorias y derrotas. Por lo tanto, continuar desarrollando buenos hábitos, sin importar quién esté en la cancha, simplemente juegue el juego de la manera correcta y como lo hemos estado enseñando todo el año. Me quito el sombrero ante estos chicos. Realmente están comenzando a aprender, realmente están comenzando a hacer las cosas que hemos estado tratando de incorporar durante los últimos cinco meses, y tenemos que seguir mejorando para este último mes de la temporada".
Los Clippers de Lue no son solo el mejor ataque de la NBA, sino el equipo que más partidos ha jugado en este curso, algo a tener en cuenta dada la situación actual y que puede jugar a su favor al final del curso.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.