Llegó el quinto mexicano a la NBA: Juan Toscano-Anderson, quien firmó por lo que resta de la temporada 2019-2020 con los Golden State Warriors. El de madre michoacana lo logró después de una pretemporada sólida en el poco tiempo que tuvo en cancha y de su segundo año en la G-League con los Santa Cruz Warriors.
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El equipo de la Bahía es el peor de la toda la liga con marca de 12 victorias por 40 derrotas. Después de llegar a cinco Finales consecutivas, Kevin Durant firmó con los Nets y sufrieron las perdidas de Klay Thompson y Stephen Curry por lesión en muy poco tiempo.
God is good & the work is real
— Juan Toscano (@juanonjuan10) February 7, 2020
Tras esas malas noticias, las cosas no fluyeron y han utilizado a jugadores jóvenes, complementados con algunos veteranos. En busca de fortalecer su roster para el siguiente año, fueron uno de los equipos más activos durante el cierre del mercado de traspasos.
Aquí analizamos lo que le espera a Toscano con Golden State.
Cumplió el sueño NBA
Oriundo de Oakland, California, Juan Toscano cumplió el sueño que tuvo desde niño. Vivió muy cerca de la Oracle Arena y siempre apoyó a los Warriors. Conforme fue creciendo, su carrera en el baloncesto profesional se fue por otro lado y jugó con Soles de Mexicali y Fuerza Regia de Monterrey. Sin embargo, el camino de Juan volvió al estado donde creció y tras una temporada y media en la G-League firmó con Golden State. Con esto se convirtió en el primer participante de un camp del equipo de la Bahía en jugar con ellos.
Huge congrats to @juanonjuan10, he is the first ever Warriors camper to play for the Golden State Warriors and the third camper to play in the NBA 👏👏 pic.twitter.com/krQiok0AFT
— Warriors Basketball Academy (@GSWA) February 7, 2020
Debido a la situación que viven y que tienen poco espacio salarial, realizaron dos movimientos durante el cierre de traspasos: Willie Cauley-Stein fue transferido a los Mavericks a cambio de una segunda ronda del 2020 y, también, en la operación más fuerte que se dio, mandaron a D’Angelo Russell, Jacob Evans y Omari Spellman a los Timberwolves a cambio de Andrew Wiggins y dos picks del 2021. Es decir, en su roster de 15 quedaron cuatro lugares disponibles.
Y por fin llegó la oportunidad de Juan.
Puede jugar hasta tres posiciones en cancha: alero, ala-pivote y pivote en situaciones small-ball, pero la principal es alero. Competirá con Marquese Chriss, Draymond Green, Eric Paschall y Wiggins.
La buena noticia para él es que ninguno de los que está o estaba en el roster promediaba menos de 10 minutos por partido y Steve Kerr ha echado mano de la rotación completa en varios juegos. Eso ayudará a mostrarse para que cuando llegue el verano del 2020 pueda conseguir un nuevo contrato para la temporada 2020-2021.
Trabajó durante el verano su tiro a media y larga distancia. Y en comparación de su primer año en la G-League al segundo, lanzó más triples aunque su porcentaje de acierto bajó del 34,1% al 27,7%. Sin embargo, su promedio de puntos aumentó de 7 a 12,5, al igual que el % de campo del 43,8% al 49,5%.
En la pretemporada se ganó un lugar para probarse con el equipo. Más allá de lo que hizo en cancha, el público lo empezó a querer como alguien de casa. Cuando llegaron los juegos hubo altas y bajas, sin embargo, participó en enfrentamientos contra los Lakers y dejó buen sabor de boca. Pero los escasos lugares en el roster le cerraron la posibilidad de lograr un contrato.
Para su segundo año con Santa Cruz tuvo más responsabilidades y ya no como un novato, sino como alguien querido por los seguidores y de experiencia. Arrancó en 12 duelos de los 31 que disputó y sus minutos subieron de 23,8 a 29. A la ofensiva tuvo más lanzamientos de campo al pasar de 6,3 a 10,2 y en triples de 1,0 a 3,0.
A Golden State le quedan 30 juegos, Juan ya tiene contrato y cuenta con la oportunidad que siempre quiso. Todavía le resta mucho por mejorar en su juego, pero dio un gran salto al convertirse en un jugador NBA.
Ya se incorporó al equipo y los Warriors dieron el anuncio oficial. El siguiente enfrentamiento es el sábado 8 de febrero contra los Lakers, en el Chase Center.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.