El Gran Premio de Mónaco tiene uno de los circuitos más complicados de la Fórmula 1. Con lluvia se vuelve aún mucho más difícil. Y Mick Schumacher lo sufrió: el hijo del siete veces campeón del mundo patinó en una de las partes mojadas de la pista y terminó contra el muro de contención.
El piloto de Haas, escudería que ya había sufrido el abandono de Kevin Magnussen, protagonizó un impactante accidente y su monoplaza se partió en dos. Este es el segundo abandono de la temporada para el alemán: en Arabia Saudita también había tenido un choque a altísima velocidad. De esta forma, Schumacher sigue sin sumar en la Máxima.
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A partir de lo sucedido, la carrera se detuvo por bandera roja a falta de 47 giros. Sergio Pérez (Red Bull), Carlos Sainz (Ferrari) y Max Verstappen (Red Bull) eran los tres primeros en el momento del golpazo.
