"Números que hablan" es nuestra sección en la que combinamos una estadística destacada con la explicación de lo que realmente pasa en la cancha. ¿Nuestro objetivo? Responder preguntas claves, descubrir verdades ocultas y abrir el telón sobre por qué algunos números importan más que otros. En esta ocasión ponemos el foco en Nikola Jokic y en su excelente trabajo como anotador en la pintura.
15,2
Según NBA.com Stats esa es la media de puntos en la pintura que Nikola Jokic está logrando por encuentro, una cifra que lo coloca en la élite de la NBA dentro de esta estadística y únicamente superado por una supernova en estas latitudes como es Giannis Antetokounmpo (15,5). Sin embargo, lejos de buscar paralelismos entre los dos casos, el serbio está consiguiendo firmar estos números de un modo muy diferente al griego. Mientras este asume un alto volumen de balón, reteniéndolo hasta encontrar el modo más certero de cargar contra el aro de fuera adentro, el pivote trata de buscar su oportunidad dependiendo de quién tiene delante, sabiendo sus deficiencias y cómo aprovecharlas.
De este modo, Jokic combina a la perfección lo mejor de un interior clásico, al recibir de espaldas al aro e ir en busca de una acción al poste en la que lucirse con lo mejor de uno moderno, poniendo la pelota en el suelo y castigando el desplazamiento lateral del defensor tras un closeout.
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Lo que marca la diferencia entre el vigente MVP y los otros dos jugadores que ocupan el podio en puntos en la pintura como son el mencionado Giannis y Ja Morant (14,8) es que su pericia no solo se limita al espacio más cercano al aro, sino al resto de la pintura. Echemos un vistazo a los números:
Jugador | Puntos en la pintura | Zona restringida | En la pintura (sin incluir zona restringida) |
Giannis Antetokounmpo | 15,5 | 76,8% | 37,9% |
Ja Morant | 14,8 | 65,7% | 45,2% |
Nikola Jokic | 15,2 | 72,4% | 57,9% |
No solo es acierto ya que, tan solo el jugador de los Nuggets y Morant son los únicos en toda la NBA que están intentando más de 5 tiros en la pintura y en la zona restringida, aunque con unos resultados bastante diferentes como se puede apreciar.
Quienes pueden dar buena cuenta de lo que supone lidiar con un jugador como Nikola Jokic son Los Angeles Lakers, quienes recibieron una buena dosis del vigente MVP durante la pasada jornada, en la que, además de perder por 133 a 96, el serbio logró un imperial triple-doble de 17 puntos, 12 rebotes, 13 asistencias y un 58,7% de acierto en tiros de campo. El jugador de Denver estuvo imparable y supo castigar una y otra vez los diferentes emparejamientos que los angelinos le lanzaron durante todo el encuentro. De Dwight Howard a Trevor Ariza pasando por DeAndre Jordan, una y otra vez el pivote hizo lo que quiso hasta sumar 12 de sus tantos en la pintura con una serie de 6 de 9 intentos.
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Una de las cosas que hacen tan diferente a Jokic del resto de jugadores en toda la liga es la aparente sencillez con la que ejecuta cualquier tipo de acción de cara al aro. El serbio modula su cuerpo de un modo en el que lo único que importa es la proyección de su brazo y su puntería, y no tanto su fuerza física o salto vertical en comparación a otros que dominan los aledaños del aro. De ahí que para los equipos rivales resulte tan complejo detenerle, más cuando los Nuggets le hacen jugar sin balón.
Si ya resulta complicado estar atento a las fintas, gestos y trampas que pone Jokic a su defensor cuando tiene la bola, ¿cómo reaccionar a tiempo si la amenaza lo es también sin balón? Complicado, más para un interior tradicional.
Con Jokic habría incluso que crear una nueva métrica que midiese cuántos puntos es capaz de generar cada vez que ejerce como pasador cerca de la pintura. Lo más cercano a ello lo ofrece el tracking, que determina que en cada ocasión que el serbio llega a la pintura este anota 1,1 puntos, sin atender a lo que produce para el resto. De las 13 asistencias que sumó frente a los Lakers 4 de ellas entrarían dentro de lo que estamos hablando, produciendo acciones liberadas para sus compañeros que están siendo un auténtico balón de oxígeno para unos Nuggets muy limitados en cuanto a personal.
De los 25,3 puntos que Jokic está promediando en esta temporada 15,2 han venido desde la pintura, lo que significa el 60% respecto al total y un 71,3% solo contando las acciones de juego (sin tiros libres), una cifra altísima y que sirve para poner en contexto lo que el vigente MVP está realizando. El jugador de los Nuggets está llevando el control de los aledaños del aro a otro nivel, sin imponer una superioridad física del modo que otros sí están en disposición de hacer, pero maximizando sus recursos y sabiendo cómo hacer daño a la defensa de su oponente, normalmente más rápido pero menos hábil en el movimiento sin balón o lejos de la canasta.
15,2
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.