"Que el árbol no tape el bosque" es una frase hecha y que bien puede ser un lema de los equipos con aspiraciones en la NBA. Ese grupo de conjuntos sabe que hay cuestiones que son temporales que no le pueden ganar a la visión a más largo plazo. En sus casos, en lo que se refiere a los Playoffs y su potencial lucha allí. Y si Denver Nuggets quiere estar en ese grupo, algo -más allá de las bajas en jugadores clave-lógico por su pasado y por tener al MVP reinante, necesita empezar a cambiar una dinámica negativa en un aspecto esencial: su rendimiento en los tramos finales de partidos. Más precisamente, en el último cuarto, donde bien se podría decir que los de Colorado son uno de los peores equipos (o el peor) de toda la temporada.
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En este caso, que la victoria del martes ante Golden State Warriors, el mismo rival de este jueves por la noche, no tape esa fuerte carencia a la hora de cerrar un encuentro que están teniendo los de Michael Malone. Sí, el entrenador tiene razón en haberse "sentido orgulloso" por el esfuerzo de su plantel, ganando en la casa del mejor récord de la liga, dejándolo en apenas 86 puntos y conteniendo de cierta manera a Stephen Curry, todo ello entendiendo el contexto de ausencias de los Nuggets, como enumeró luego del encuentro. Pero, de nuevo, que el árbol no tape el bosque. Primero, porque Golden State también tenía sus bajas (Jordan Poole -titular-, Damion Lee y, sobre todo, Draymond Green, el motor de la estructura). Segundo, porque los Nuggets estuvieron a nada de perderlo...
Pero bueno, a enfocarse en Denver en este caso, que pareció hacer mucho para entregar el encuentro ante los Warriors después de disfrutar de una máxima de 24 puntos. Miremos un par de datos de algunos de sus últimos partidos...
- Vs. Warriors (28/12): máxima de 24, victoria por 3 tras perder 25-15 el último cuarto
- Vs. Hornets (23/12): máxima de 19, derrota por 8 tras perder 38-13 el último cuarto
- Vs. Orlando (1/12): máxima de 16, derrota por 5 tras perder 29-20 el último cuarto
No son ejemplos aislados, sino una tendencia: la producción de Denver se cae por completo en los parciales finales. ¿Cuán mala es? Los Nuggets registran, en la temporada...
- El peor rating neto en los últimos cuartos: -13,2 (el siguiente en la lista, Boston, tiene -8,9)
- El peor rating ofensivo en los últimos cuartos: 99,7 (único en la liga que no supera los 100)
- El 7° peor rating defensivo en los últimos cuartos: 112,9
- El peor promedio de puntos anotados en los últimos cuartos: 23,2
Que los Nuggets, en los últimos cuartos, tengan el peor rating neto de toda la liga, 4 puntos por cada 100 posesiones peor que el siguiente en la lista, habiéndose jugado cerca de la mitad de la temporada, no es algo temporal, sino que la muestra es bastante significativa. Es decir, en el balance de esos últimos cuartos es superado por sus rivales por más de 13 puntos cada 100 posesiones. Es muchísimo. Y un detalle que preocupa aún más: la formación más usada en los últimos cuartos es su actual quinteto titular (sin contar a Porter Jr.), Morris, Barton, Gordon, Jeff Green y Jokic, y la misma produce un rating neto de -6,3 (en 34 minutos totales). Ni los iniciales ofrecen seguridad en estos pasajes de los encuentros.
Pero lo más importante va números al margen. Va en lo visual, en las sensaciones que se desprenden de las producciones de los Nuggets. Y la realidad es que ahí vemos, sobre todo en las últimas semanas, a un equipo que entra a un partido en una suerte de caída libre en cuanto a cómo su juego pasa de lo bueno, expresado en un equipo que mueve el balón, se mueve y busca siempre un pase más para encontrar buenos lanzamientos; a lo malo, que sería su versión anárquica, egoísta, poco inteligente y Jokic-dependiente al extremo. Sí, el MVP ha sido la solución varias veces. Pero él también entra en esa dinámica que lo mueve de su eje habitual de excelencia.
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No hace falta ir al encuentro ante los Hornets de hace una semana (probablemente el principal ejemplo de todos) para graficar los problemas. Es más, podemos tomar el del martes ante los Warriors. Porque, de nuevo, el árbol no debe tapar el bosque. Hay dos acciones concretas que nacieron de muy mala manera pero fueron corregidas con lo justo para evitar el colapso.
¿La primera? Con el partido igualado en el minuto final, Barton retiene el balón de más, se encierra por línea de fondo y, pese a tener dos defensores (buenos) encima, decide intentar 'pasarlos por arriba'. En la teoría, un tiro pésimo. También en la práctica, porque lejos estuvo de ser efectivo, sobre todo pensando que en cuanto llegó a la línea de fondo podría haber sacado hacia el perímetro con Jokic, quien hubiera tenido tiempo para buscar una mejor opción. En defensa de Will está su doble esfuerzo para buscar el rebote ofensivo y terminar punteando para anotar casi de milagro entre varias manos.
¿La otra? Jokic termina leyenda mal una acción en pareja con Barton que suele ser habitual, pero que termina en pérdida impulsando la corrida de los Warriors de la mano de Steph (recibe rápido de Porter Jr). Los Nuggets estaban dos arriba, pero muy fácilmente pusieron el balón en las manos del mejor tirador de la historia con 10 segundos por jugar. Claro que Jokic lo compensó con un buen balance defensivo que terminó con ese tapón salvador ante el intento de Kuminga.
En ese cuarto final ante los Warriors, Denver tiró un pobre 23,8% de campo (5-21), con 0-9 en triples y hasta fallando libres (5-8), además de dar apenas una asistencia y acumular cuatro pérdidas (tres de ellas de Jokic). Aquí aparece el primero de los "problemas": el serbio es el centro de todo para los Nuggets, y las ausencias de Jamal Murray y Michael Porter Jr., las otras estrellas y las principales amenazas creadoras o ejecutoras de lanzamientos, no hacen más que potenciar la necesidad de que sea el pivote quien resuelva. Con un detalle no menor: las defensas sobrecargarán de atención a su figura, una decisión totalmente lógica pensando que, a su alrededor, no hay amenazas consistentes. Y en el peor de los casos, es elegir el mejor de los males: que te gane otro que no sea Jokic.
En ese último cuarto, Jokic sólo pudo anotar tras tomar rebotes ofensivos y corregir. Al margen de eso, siempre fue incomodado. Vaya un ejemplo clarísimo... Comienza uno contra uno de espaldas, pero en cuanto empieza a picar y machacar, termina intentando una plegaria custodiado por tres Warriors.
¿Otro problema? Denver mueve muchísimo menos el balón en los tramos finales, y la consecuencia es que su selección de tiros y toma de decisiones es, cuanto menos, cuestionable. Y hasta Jokic no queda afuera de esto a veces. Sí, es cierto que probablemente no se le puede cuestionar nada dada la carga que tiene que asumir. Pero va un ejemplo del colapso ante los Hornets: teniendo aún 20 segundos en la posesión, termina 'chocando' ante casi los cinco rivales de Charlotte. Hasta para él se antoja complicado anotar allí y por eso termina en pérdida. Pero para él, en la mayoría de los casos, sacar un pase a un compañero libre (en este caso Campazzo) hubiese sido muy sencillo y decantado en un mejor lanzamiento (independientemente del resultado final del mismo).
Es decir, el argentino estaba completamente solo.
Volviendo a la mala toma de decisiones y selección de tiro. Barton se fue 1-5 en el último cuarto ante los Warriors. Zafó con esa corrección un mal tiro previo. ¿Y antes? Otra penetración metiéndose "en la boca del lobo" para terminar siendo bloqueado. Es cierto que Barton es lo más parecido a alguien que pueda crear su lanzamiento en este contexto de los Nuggets (sin contar a Jokic). Pero entre esa capacidad y el caos por los aclarados hay una línea muy delgada. Generalmente, Will cruza más para éste otro lado.
Bones Hyland también podría verse como alguien resolutivo. Pero, de nuevo, el rookie es otro que cruza la línea hacia el lado del caos que lleva a malas decisiones. Ante los Warriors se fue con 3-11 de campo (0-2 en el 4C). ¿Aplica lo mismo para Austin Rivers? Quizás. En el último encuentro, 2-9 de campo y 0-3 en el 4C.
Y si a ese estancamiento ofensivo se le suma la pasividad defensiva, el combo es explosivo. ¿Se acuerdan del mal tiro de Jokic ante tres de los Warriors cerca del final? Al instante vino esta contra que termina en volcada de Payton II mientras Rivers trota en el balance defensivo. De nuevo: minuto final, partido casi igualado. Imperdonable la pasividad.
Algo similar pasó en el tercer cuarto con Rivers olvidándose de regresar con Payton II...
Está claro que Denver es uno de los equipos más irregulares de la temporada, capaz de lo mejor y lo peor en partes iguales. Entre esto último, su producción es los finales de partidos es realmente preocupante y debe empezar a cambiar cuanto antes para mejorar el rumbo de un curso completamente extraño.
Día, horario y cómo ver Denver Nuggets vs. Golden State Warriors
- Día y horario: jueves 30 de diciembre a las 20.30 de México, 23.30 de Argentina
- Streaming: NBA League Pass.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.