Apenas 14 partidos son suficientes para sostener que Evan Mobley es lo mejor que le ha pasado a los Cleveland Cavaliers desde que LeBron James decidió salir del equipo por segunda vez y llevar su talento a Los Angeles. El número tres del pasado Draft está teniendo un arranque de carrera impresionante, siendo uno de los motivos principales por los cuales su equipo se encuentra con un sorprendente récord de nueve victorias y cinco derrotas, ubicados en el Top 4 del Este.
Mobley es el jugador con más minutos en este equipo de Cleveland (34,1), algo realmente inusual para un rookie en un equipo competitivo. Claro que motivos no le faltan a Bickerstaff, si tenemos en cuenta lo que el ex USC produce en el campo: promedia 15,6 puntos, 7,9 rebotes, 2,3 asistencias, 1,5 tapones, 1,1 robos, solo 1,7 pérdidas, un 53% de campo y un 78% en tiros libres. Espectacular.
Las estadísticas ya son de por si excelentes para un joven de 20 años dando sus primeros pasos en la liga, pero crecen aún más si nos enfocamos en los últimos cinco compromisos: allí Mobley sube sus guarismos a 19,6 puntos, 7,4 rebotes, 2,2 asistencias, 1,8 tapones, un 58% de campo, un 42,9% en triples y un 82% en tiros libres. Y como si eso fuera poco, un +/- sensacional de +10,6 por partido, con marca de 4-1 para los Cavs en ese tramo.
Tan inusual es este comienzo de carrera de Mobley que cuesta encontrar antecedentes históricos en su posición. ¿Cuántos pivotes promediaron al menos un 15-7-2 con 1,5 tapones y un 50% de campo en sus primeros 14 juegos NBA? Apenas dos. Y ambos están hoy en el Salón de la Fama: Bill Walton promedió 15,8 puntos, 15,6 rebotes, 3,9 asistencias, 3,2 tapones y un 51% de campo en sus primeros 14 partidos con los Blazers en 1974, mientras que Ralph Sampson se fue hasta los 21,8 puntos, 12,3 rebotes, 2,1 asistencias, 2,3 tapones y 54% de campo con los Rockets en 1983.
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Por supuesto que esto no significa que Mobley vaya a terminar siendo un jugador de ese calibre legendario... aunque las señales y sensaciones no podrían ser más positivas. De hecho, estadísticamente lo del pivote no solo lidera entre los rookies, sino que si nos guiamos por algunas métricas, ya debería estar en consideración para el All-Star Game (si mantuviera esta producción, claro): aparece 9° en win shares defensivas y 18° en win shares totales. Además, los 100,1 puntos por 100 posesiones que permite Cleveland con él en cancha lo ubican en la 19° mejor posición alrededor de la liga, entre los 165 jugadores que promedian al menos 25 minutos.
Y es que lo de Mobley es un espectáculo en ambos costados de la cancha. Defensivamente, hablamos de un jugador con una combinación soñada para la NBA actual: destaca tanto en la protección del aro como en su capacidad para mantenerse con jugadores más bajos en el perímetro.
En términos de protección interior, no solo vemos esos 1,5 tapones, sino que además permite el 11° porcentaje de campo más bajo en tiros cercanos al aro (8° mejor entre pivotes): los rivales apenas convierten el 50,4% de sus disparos de definición ante Mobley.
Claro que pivotes capaces de hacer pesar sus centímetros cerca el aro hay muchos. Lo que realmente diferencia a Mobley en este costado del campo es su habilidad para marcar a perimetrales en los switches. El pivote de los Cavaliers está permitendo apenas un 28,6% en acciones de aclarados... ¡la mejor marca de toda la NBA en su puesto! (segunda mejor si consideramos a Jaren Jackson Jr. como cinco).
El aporte defensivo de Mobley es absoluto y esa versatilidad también sobresale en ataque. Hablamos de un jugador que ya empieza a ser referencia ofensiva en el poste bajo, incluso siendo buscado para su 1 vs 1 en situaciones clutch. Allí también lo vemos mezclado entre los mejores de toda la competencia: el 64,3% de acierto que registra posteado es la cuarta mejor cifra alrededor de la liga, entre jugadores con su mínimo de posesiones. Además, el 75,7% de campo que presenta dentro del área restringida es la sexta mejor cifra de la competencia.
Evan Mobley playing bully ball with Tatum 💪 pic.twitter.com/9QRuWhNlSP
— NBA on ESPN (@ESPNNBA) November 14, 2021
El tiro exterior todavía está en proceso de desarrollo, tal como lo refleja su 33% en triples. Pero no solo es capaz de encestar ese lanzamiento (lleva 8 conversiones), sino que además empieza a dominar el lanzamiento de media distancia: anota un sólido 38,5% de sus casi 2 intentos de dobles largos por juego. Un número mejorable pero para nada despreciable, sobre todo al tener en cuenta que hasta puede sacar ese disparo en movimiento.
Y todo esto sin olvidarnos de su gran visión pasadora, que por ejemplo ya lo ha llevado a tener dos partidos de más de 5 asistencias, aún cuando comparte muchos minutos con otros bases como Rubio, Garland y Sexton.
Lo del nacido en San Diego es de una proyección a futuro totalmente alucinante. Pero a no olvidar que incluso en lo inmediato, ya hablamos de uno de los pivotes de aporte más versátil de la competencia, con un mix de juego interior y perimetral en ambos costados de la cancha realmente llamativo. Veremos si el éxito individual y colectivo se mantiene durante toda la 2021-2022, pero al menos de momento, la tarea de Mobley y los Cavs supera las expectativas del más optimista. La NBA tiene un nuevo unicornio.
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