"No pensé en el cansancio porque quería ganar el partido. He estado en esta situación en la que he anotado muchos puntos y hemos perdido, y no quería que eso sucediera". Así se expresaba Michael Jordan tras el extenuante sprint de 50 minutos al que se expuso para liderar a los Chicago Bulls a la victoria sobre Cleveland Cavaliers, un 28 de marzo de 1990. Una gesta más que sumar a una interminable lista que hace de él uno de los mitos más reconocibles de la historia del básquet y cuya importancia reside en el volumen de anotación que evidenció sobre el parqué del Coliseum de Richfield (Ohio), donde alcanzó la cifra de 69 puntos, su mejor marca personal.
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Se cumplen 30 años de aquel momento en el que el afán individualista de Jordan tocó techo para nunca más volver a repetir una actuación similar. En las siguientes nueve temporadas solo volvería a superar la barrera de los 60 puntos en una ocasión, contra las dos que precedieron a aquella noche de marzo. Sería en 1993 ante Orlando Magic donde el escolta llegó a los 64 en la derrota de los Bulls.
La versión más desatada de la leyenda encontró su sitio contra los Cavs, uno de sus rivales más feroces en la etapa previa al anillo de 1991 y que, por enésima vez, trataron de frenar a unos Bulls que seguían buscando la manera de coronarse. 69 tantos en 50 minutos repartidos en 23 de 37 tiros de campo con 2 de 6 en triples, y 21 de 23 en tiros libres para alcanzar el triunfo en la prórroga por 117-113. Ah, también bajó 18 rebotes, otro récord individual en aquella noche.
El cansancio no azotó a un Jordan que, ensimismado, no cesó en ningún momento en su empeño por tumbar a Cleveland. "Seguí presionándome, seguí hablando conmigo mismo, diciendo: 'No pares, no pares. Sigue adelante'. Te sientes mejor con el esfuerzo cuando ganas", reconocía.
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El conjunto entrenado por Phil Jackson se entregó en cuerpo y alma a la determinación del número 23, anotando el 58% de los puntos del equipo en un encuentro donde solamente Horace Grant alcanzaría las dobles figuras en anotación, con 16 tantos.
La gesta de 'His Airness' le convirtió en el quinto jugador en la historia en aquel momento en superar la barrera de los 65 puntos, uniéndose a Wilt Chamberlain, David Thompson, Elgin Baylor y Pete Maravich, siendo Jordan el primero en hacerlo desde la introducción del triple en la NBA. Tras él, otros como Kobe Bryant, David Robinson o Devin Booker han alcanzado semejantes cifras en un solo encuentro.
Otras cosas que sucedieron en este día
- 1982: Kareem Abdul-Jabbar se convirtió en el 15º jugador en la historia de la NBA en jugar 1.000 partidos de temporada regular en la victoria de Los Angeles Lakers ante Kansas City Kings (109-96) en 1982.
- 2018: LeBron James consiguió su partido número 866 con más de 10 puntos de manera consecutiva, empatando a Michael Jordan en la racha más larga en la historia de la NBA.
- 2018: Kemba Walker superó a Dell Curry como el máximo anotador de los Hornets. Walker superó a Curry con la bandeja para alcanzar los 9.841 puntos.
- 2018: Karl-Anthony Towns consiguió un récord de franquicia con 56 puntos en la victoria de Minnesota Timberwolves por 126-114 contra los Atlanta Hawks. Terminó con 19 de 32 en tiros de campo y 12 de 15 desde la línea de tiros libres.
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