Pocos jugadores alcanzan a igualar la mística y el aura que desprendía Drazen Petrovic, una figura que, aún hoy, cautiva a quienes revisan sus partidos que se han convertido en auténticas piezas de museo. El legado del genio de Sibenik se extiende a lo largo del tiempo y sigue muy presente en la memoria de gran parte de los aficionados y aquellos que disfrutaron de su juego en vida.
El paso de Petrovic por la NBA, aunque fugaz, dejó una huella imborrable, especialmente en New Jersey Nets donde desde el comienzo se convertiría en una auténtica sensación por su carácter fogoso, la facilidad que mostraba para anotar y la efusividad con la que disputaba cada acción y cada posesión.
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Tras un infructuoso periplo en Portland Trail Blazers donde tan solo pudo pudo disputar una media de 11 minutos con 7 puntos de promedio, en enero de 1991 fue traspasado al otro lado del río Hudson en una operación a tres bandas que incluyó a Denver Nuggets a cambio de diferentes rondas de Draft y jugadores como Terry Mills y Walter Davis. En New Jersey el escolta demostraría que estaba más que preparado para tener un papel relevante en un equipo NBA y que su desbocada forma de jugar no era incompatible con un talento desmedido que fuese positivo para los Nets.
Una carretera de Alemania en el verano europeo de 1993 arrebataría al mundo del baloncesto a un jugador cuyo techo era todavía desconocido y que apenas estaba comenzando a descubrir lo que era estar al frente de una franquicia NBA. Meses antes Petrovic había alcanzado su mejor nivel entrando en el tercer mejor quinteto de la liga con sus mejores registros y consagrándose como uno de los llamados a ser All-Star en los años venideros. La increíble trayectoria en Europa que pronto dejaría claro que se le quedaba pequeña, una evolución constante y una personalidad contagiosa hacen de la pérdida del Mozart del baloncesto una de las más trágicas en la historia de este deporte.
Este vídeo te va a gustar. Petrovic, en los Nets.
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1 - Brillando contra Jordan
- Fecha: 17 de marzo de 1992
- Estadísticas: 26 puntos, 3 asistencias y 5 robos
Encarando la última parte de la temporada 1991-92, Petrovic estaba completamente asentado en la rotación de los Nets y desde el receso del All-Star los números del croata habían experimentado un incremento sustancial con 21 puntos de promedio y más del 50% de aciertos en tiros de campo y el 48% en triples. La visita de los Chicago Bulls campeones al Brendan Byrne Arena se presentaba como la oportunidad del escolta de Sibenik de exponerse ante la principal figura de la competición: Michael Jordan.
Aunque emparejado durante buena parte del duelo con John Paxson, la defensa presionante de los Nets dejaría varias acciones en las que Michael y Drazen se quedasen el uno contra el otro. El buen arranque de los locales favorecido por el acierto del croata que una vez tras otra saldría de los bloqueos con la esperanza de recibir y castigar en suspensión el aro de los Bulls. Un tapón de Su Majestad a Petrovic haría prender la llama entre ambos, iniciándose así un duelo al que el balcánico respondería con un triple que encendió a todo el estadio.
Una tras otra, los dos anotadores acumularían más de un tercio del uso ofensivo de sus respectivos equipos en donde Drazen una y otra vez evidenció su superioridad en el lanzamiento desde la larga distancia, asignatura pendiente de Jordan en ese momento, y que este contrarrestó con una exhibición al poste bajo y en aclarados. El duelo se decidiría en el último asalto donde los Bulls harían colapsar a los locales con su defensa en presión a todo campo para conseguir un parcial de 27 a 9 que les otorgó el triunfo por 90 a 79.
Jordan tuvo que sacar lo mejor de sí mismo con 40 puntos, 10 rebotes y 4 asistencias para doblegar a ese irreverente europeo que durante 36 minutos había osado cuestionar su estatus sobre la cancha y que acabaría con 26 tantos y un 3 de 7 en triples.
2 - Máximo de carrera
- Fecha: 24 de enero de 1993
- Estadísticas: 44 puntos en 14 de 20 tiros de 2 (70%) y 3 de 3 en triples (100%)
Llegado a enero de 1993, Petrovic se encontraba entre los 20 mejores anotadores exteriores de la competición, con 23 puntos de promedio y un 47% acierto antes del receso del All-Star. Su no incursión en el Partido de las Estrellas pese a ser el octavo más votado (151,239) en el Este podría considerarse una injusticia. De hecho, aquella temporada sería el undécimo máximo anotador de la NBA, el primero entre los que no fueron seleccionados.
Precisamente a comienzos de ese año el escolta croata completaría el mejor partido de su carrera profesional en la NBA, cuando le endosaría a los Houston Rockets la friolera de 44 puntos. Una exhibición con mayúsculas de juego sin balón para recibir y una declaración de intenciones por el cómo llegó a semejante cifra. La cosa comenzó como siempre, aprovechando que la defensa siempre la pasaba los bloqueos por detrás para cuadrarse y elevarse desde la línea de tres y la media distancia a placer.
La rapidez en sus movimientos con el balón le hacían un objetivo difícilmente alcanzable para Carl Herrera y Robert Horry, que tuvieron la difícil tarea de defenderlo en aquella velada. Una y otra vez Petrovic anotaba a placer: tras bloqueo, saliendo del rulo o simplemente en uno contra uno el croata evidenció su superioridad en la cancha.
Aquella noche el jugador de Sibenik anotaría el 84% de sus tiros en suspensión para firmar su máximo de carrera y conducir a los Nets a una victoria clave en las aspiraciones de Playoffs por 100 a 83. Un verdadero espectáculo.
3 - Declaración de intenciones
- Fecha: 26 de noviembre de 1991
- Estadísticas: 33 puntos (68% en TC y 50% en triples), 4 rebotes y 4 asistencias
Una vez más contra Houston Rockets (esta vez un tiempo antes) Petrovic firmó una de sus primeras grandes actuaciones con los New Jersey Nets firmando su máximo de anotación hasta ese momento con 33 puntos. En esta ocasión el de Sibenik actuó como lo único salvable de un equipo cuyo arranque (2-9) contrastaba con el magnífico rendimiento que noche tras noche había demostrado en el principio de la temporada.
En esta ocasión los texanos sí que evidenciaron su superioridad en la pista a pesar de la ausencia de Hakeem Olajuwon, en una velada donde Vernon Maxwell fue el más destacado.
Petrovic se aprovecharía en este encuentro del mejorable balance de los Rockets para empezar con buen pie el encuentro y castigarlos en contraataque, ya fuese para asistir a sus compañeros o para aumentar su casillero personal de puntos.
Si los anteriores partidos fueron una evidente demostración de su talento en el tiro en suspensión, en este encuentro contra Houston Petrovic destacó con un gran encuentro cerca del aro con bandejas imposibles y entradas forzadas que le llevaron a finalizar por encima de la treintena.
4 - Siempre clutch
- Fecha: 13 de marzo de 1992
- Estadísticas: 39 puntos (65% en TC y 100% en triples), 2 rebotes y 4 asistencias
La sangre fría con la que Petrovic afrontaba los momentos calientes se hizo notar en la visita de los Nets a Hartford (Connecticut) para enfrentarse a los Boston Celtics. En tan extraña ubicación el jugador croata lideró a los suyos hacia la victoria en un encuentro igualadísimo y donde le ganó la partida, además, a un Larry Bird que acabó aquel encuentro con 28 tantos.
El escolta supo gestionar a la perfección el peso ofensivo durante los últimos cinco minutos para conducir a los Nets al triunfo además de ser un verdadero quebradero de cabeza para Reggie Lewis, que fue el encargado de perseguirle durante la recta final del encuentro.
A falta de 40 segundos para el final un palmeo decisivo tras un lanzamiento de Boston inició un contraataque que certificó el triunfo de New Jersey con 39 puntos de Petrovic por 110 a 108.
5 - Explosión desde el triple
- Fecha: 4 de diciembre de 1992
- Estadísticas: 34 puntos (56% en TC y 71% en triples), 3 rebotes y 2 asistencias
El talento desde la línea de tres de Petrovic siempre estuvo ahí: como un adelantado a su tiempo Drazen lideró la anotación exterior de New Jersey Nets desde su llegada, siendo el principal responsable en ese sentido además de colocarse entre los más destacados en el general de la liga. En dos ocasiones el croata alcanzó la cifra de 5 triples anotados en un solo encuentro, la primera en noviembre de 1991 contra los Kings donde anotó 25 puntos y la segunda frente a los Spurs en diciembre de 1992 donde rozó la perfección.
Con su característico puño al aire cada vez que anotaba una canasta imposible Petrovic fue el protagonista principal de aquella velada en el Brendan Byrne Arena en donde los Nets lucharon contra viento y marea para doblegar a los de David Robinson, que comenzaron el encuentro de manera intratable.
El escolta castigaría en la segunda mitad a los Spurs desde la línea de tres con 3 conversiones desde el triple para acabar con una línea estadística a la altura de las grandes estrellas de la liga con 34 puntos y un 71% de acierto desde la larga distancia. Todo eso unido a la canasta de la victoria con un 2+1 a falta de un segundo para el final certificaron el triunfo para los locales por 108 a 103 con la posterior celebración con la grada.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
