Cuando Boston Celtics perdió al alero estrella Gordon Hayward (se marchó a Charlotte Hornets) en la Agencia Libre el sábado por la tarde, los subcampeones de la Conferencia Este del 2020 estaban sufriendo una pérdida en cuanto a talento y profundidad en el plantel.
Los Celtics ya habían traspasado a Enes Kanter a Portland Trail Blazers, acortando su ya de por sí escasa rotación entre los interiores. La pérdida de Hayward tachó a otro jugador clave que ayudó a que las cosas encajaran cuando estaba sano.
Unas horas más adelante en ese sábado, Chris Haynes de Yahoo Sports apareció con una noticia que salvó la offseason de Boston, reportando que los Celtics habían fichado al canadiense Tristan Thompson con un contrato de 19 millones de dólares por dos años.
Podrás pensar que decir "salvó la offseason de Boston" es una exageración para la contratación del pivote de 29 años, pero no lo es. Incorporar a un jugador con la experiencia de Thompson es exactamente lo que los Celtics necesitaban para poder superar el escollo que terminó con su camino en tres de las últimas cuatro temporadas: las Finales de la Conferencia Este.
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El pick número 4 del Draft 2011 tiene 78 partidos de Playoffs de experiencia, jugó cuatro Finales de la NBA y es dueño de un anillo de campeón. Fue la presencia defensiva interior de esos equipos de Cleveland Cavaliers que en Boston conocen tanto: perdieron contra Thompson en dos de sus últimos cuatro arribos a las Finales del Este.
Con 2,06 metros, 115 kilos y una envergadura de 2,16 metros, Thompson le agrega un tamaño muy necesario a la pintura de los Celtics, que carecía de ello. Si bien el pivote titular de la temporada pasada Daniel Theis probó que es más que cumplidor en ese rol, excediendo todas las expectativas para ayudar a llevar a Boston tan lejos en la postemporada como llegaron, es claro que necesitaban ayuda. Sabiendo que probablemente tendrás que enfrentar, en algún orden, a Joel Embiid, Giannis Antetokounmpo o Bam Adebayo para ganar el Este, es claro porque el fichaje de Thompson es tan crucial.
Thompson acaba de tener una de las mejores temporadas de su carrera en Cleveland, promediando 12 puntos, 10,1 rebotes y 2,1 asistencias por partido. Mientras que la lucha por los rebotes no fue un gran problema para Boston la última temporada (fueron el octavo equipo que más rebotes tomó y undécimos en rebotes en ataque), haber perdido a uno de los mejores reboteros como Enes Kanter se olvida al añadir otro de elite como Thompson.
Thompson es una máquina de rebotes de primer nivel que podría permitirle a Boston tener que acostarse menos en el trabajo de equipo para rebotear y poder salir más en transición. Una opción que no tienen hace tiempo. De hecho, según ESPN Stats and info, los Celtics no tienen a un jugador que haya promediado doble dígito en rebotes desde Al Jefferson en la 2006-2007: ya van 13 temporadas. Mientras que la capacidad rebotera de Thompson, particularmente en ataque, seguro creará una buena cantidad de segundas oportunidades y de posesiones extra, defensivamente es donde Thompson ayuda más.
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Los números no cuentan toda la historia, porque Boston fue uno de los mejores equipos defensivos de la liga la temporada pasada. A pesar de no tener una presencia intimidante en la pintura, nuevamente sin faltarle el respeto a Theis que fue increíblemente sólido en su papel de protector del aro, los Celtics solamente permitieron 43,4 puntos en la pintura por juego, la tercera mejor marca de la liga.
Tristan no es un protector de aro de élite muy conocido (no ha promediado más de un tapón por partido desde la 2016-2017) pero es extremadamente físico, agregando de inmediato un grandote imponente como ancla en la defensa. Más importante aún, Boston obtiene ese tamaño y longitud sin sacrificar la capacidad atlética, ya que Thompson sigue siendo un defensor capaz en un sistema defensivo con mucho switch como el que opera el entrenador Brad Stevens.
Todavía falta saber quien será el pivote titular, pero una cosa clara es que la rotación de Thompson y Theis, con algunos ingresos del atlético y enérgico Robert Williams, le dará a los Celtics tres opciones viables para defender a los mejores interiores del Este con distintas características.
Mientras que Theis y Williams son grandes opciones si Boston quiere armar algo más pequeño y rápido, la presencia física de Thompson hará la vida más difícil para jugadores como Embiid o Adebayo.
Miren esta posesión de la última temporada en la que Thompson fue un muro para Adebayo, forzándolo a intentar un gancho bien defendido.
Adebayo es usualmente más rápido que el pivote rival, pero ahí se ve que él respeta la movilidad de Thompson porque no intenta inmediatamente pasarlo para llegar al aro. Thompson frenó el momentum de Bam, que buscaba postearse, utilizando su longitud para impedirle un tiro claro mientras que aguantó ante todos los amagues. Cuando Adebayo intentó atravesar a Thompson, este se plantó forzándolo a errar.
Con Adebayo tan cerca del aro con un defensor más pequeño como Theis, uno más lento como Kanter o uno sin experiencia como Williams, eso probablemente hubiese terminado en dos puntos para Miami. Ahí es donde Thompson ayuda a llenar uno de los huecos principales de los Celtics.
Lo ven aquí también contra el monstruoso Embiid.
Utilizando la rotación de pivotes del año pasado nuevamente: el empujón inicial probablemente dejaba a Embiid en el aro contra Theis o Williams. Kanter podría haber absorbido el contacto, pero es difícil creer que movería sus pies tan rápido como hizo Thompson para tener una buena defensa ante el tiro de Embiid en retirada. Si, Thompson tuvo ayuda de Jordan Clarkson, pero es Embiid, un poco de ayuda siempre será necesaria. Thompson defendió este intento de forma perfecta, forzando al camerunés a realizar un intento con marca y a cuatro metros y medio del aro, un tiro con el que la defensa puede vivir cada día de la semana.
La rotación de internos de Boston fue el mayor interrogante del equipo antes de la última temporada y aún así encontraron una forma de llegar a las Finales de la Conferencia Este. Agregando un jugador con ADN de campeón, muchísima experiencia de Playoffs y presencia física en la defensa y los tableros, los Celtics encontraron la pieza que les faltaba en un equipo con potencial de título.
Si Boston logra superar las Finales del Este y retorna a las Finales de la NBA, el fichaje de Thompson habrá tenido un rol vital.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.