El paso de Isaiah Thomas por los Boston Celtics puede que fuese efímero y corto comparado con otros jugadores de rigor en la franquicia, pero su impacto en el aficionado verde todavía puede sentirse. Tan solo fueron tres temporadas las que el base de Washington estuvo bajo las órdenes de Brad Stevens, pero el inesperado rendimiento de 2016 al alcanzar los Playoffs, y el éxito conseguido un año más tarde, llegando hasta finales de Conferencia, hacen de él un jugador de culto.
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Así, un 2 de mayo de 2017, la figura de Thomas pasaría a la historia por su actuación frente a Washington Wizards, a los que les anotaría un total de 53 puntos repartidos en 18-33 tiros de campo e incluyendo 5 de 12 desde la línea de tres puntos. Un trepidante encuentro que precisaría de una prórroga para resolverse por 129-119, que permitió a los verdes ponerse 2-0 en la eliminatoria.
Relevancia histórica
La importancia histórica de este hito en particular es doble. Por un lado, Isaiah Thomas consiguió junto al resto de sus compañeros de los Celtics remontar una desventaja de 12 puntos tras un pésimo primer cuarto, hasta conducir a los verdes a la victoria en la prórroga.
Por otro lado, esta demostración anotadora de Thomas, que se fue a los 53 puntos (18 de 33 tiros de campo, incluyendo un 5 de 12 en triples), supuso la mejor marca anotadora de su carrera, superando los 52 puntos que había conseguido ante Miami Heat en esa misma campaña.
The King in the Forth se puso el equipo a la espalda en el último periodo y en la prórroga, para anotar 29 puntos sobre un total de 45. Una demostración excepcional para un jugador de su tamaño, que permitió a Boston sumar el 2-0 en la eliminatoria de Semifinales. Una serie que terminaría yéndose a los siete partidos y con Thomas lesionado de la cadera.
El protagonista
Estos Playoffs fueron algo personal para Isaiah, quien perdió a su hermana en un accidente de tráfico el 15 de abril de 2017. Visiblemente emocionado y arrastrando un problema en la cadera, Thomas terminó promediando 23 puntos, 3 rebotes y 6 asistencias a lo largo de los 15 encuentros que los Celtics disputaron en aquella postemporada.
Unos meses más tarde, el base sería traspasado a Cleveland Cavaliers a cambio de Kyrie Irving, comenzando una nueva etapa en su carrera.
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