Los cambios realizados en el seno de los Boston Celtics durante la pasada offseason parecían ir encaminados a construir un equipo que pudiese acabar siendo una de las sorpresas de la temporada 2021-2022. Con dos figuras jóvenes y asentadas como Jaylen Brown y Jayson Tatum, un buen elenco de veteranos y complementos como Dennis Schroder, Al Horford o Josh Richardson, el presente de los verdes parecía prometedor. Sin embargo, los primeros pasos de Ime Udoka al frente del banquillo no están siendo los más sencillos.
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La derrota ante los Chicago Bulls por 128 a 114 ha sido un verdadero jarro de agua fría para los Celtics. Precisamente porque esta supone el tercer partido consecutivo en el que no consiguen ganar, un duelo que durante 40 minutos prácticamente tuvieron bajo control, pero que en un abrir y cerrar de ojos los de Udoka se vinieron abajo, recibiendo un 39-11 de parcial en el último cuarto.
La razón principal de la derrota (o de la victoria de Bulls, según se mire) fue el cambio en la estrategia defensiva de los visitantes, los cuales comenzaron a centrar todos sus esfuerzos en contener a Jayson Tatum, ya fuese con dobles marcas o simplemente centrando toda la defensa alrededor suyo:
Entre Lonzo Ball y Alex Caruso la victoria de los Bulls fue posible, anulando completamente a la estrella rival y, en consecuencia, al resto de los Celtics. Estos sumaron un 5 de 23 en tiros de campo, incluyendo 0 de 8 al triple, acudiendo una sola vez a la línea de tiros libres y perdiendo 3 balones. El limitado y pobre sistema ofensivo desplegado por los verdes durante el último asalto acabó afectando a la defensa, ya que los visitantes apenas erraron 3 lanzamientos (81,3%) para pasar de un 89 a 103 al 128 a 114 final.
De este modo, los de Ime Udoka se colocan con un balance de 2-5 en los primeros 7 partidos de temporada, lo que supone el peor inicio del equipo verde desde la temporada 2006-2007 con Doc Rivers al frente, es decir, hace 15 años y la tercera ocasión en los últimos 25 años en arrancar 2-5:
Peores inicios desde 1990 - Boston Celtics
| Temporada | Balance |
| 1992-1993 | 2-5 |
| 1996-1997 | 2-5 |
| 1997-1998 | 2-5 |
| 2006-2007 | 1-6 |
| 2021-2022 | 2-5 |
Un rendimiento en el cierre que despertó en Marcus Smart su versión más crítica, poniendo el foco en las deficiencias del sistema de ataque que hicieron posible la derrota. "Me gustaría jugar al baloncesto. Todo equipo sabe que vamos a tratar de jugar a través de Jayson y Jaylen y todos los equipos planifican y se organizan para frenarles", aseguró el base. "Creo que todos los informes de scouting rivales hablan de hacer que los dos traten de pasar el balón. Ellos no quieren pasarla y eso es algo que tienen que aprender. Están todavía aprendiendo, y estamos orgullosos del progreso que están haciendo, pero tienen que dar un paso más adelante y encontrar modos de no solo crear para ellos sino para el resto del equipo".
El ataque tiene que ver y mucho con cómo se defiende en este deporte, especialmente si las cosas no salen como deberían en la ofensiva, afectando al rendimiento, la fluidez y la intensidad para detener al rival. Por ello, es normal que un conjunto dependiente de dos figuras de 23 y 25 años cada uno tienda a ser irregular cuando todo el juego pasa a través de ellos, contagiando a la defensa.
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En los últimos años los Celtics han sido uno de los equipos más regulares en defensa, algo que tras el cambio de técnico no parece haberse mantenido pese a haber añadido a Josh Richardson, Al Horford o Juancho Hernangómez, el cual apenas ha jugado esta temporada. Ahora mismo los verdes con la cuarta peor defensa en términos de eficiencia, concediendo 110,3 puntos por 100 posesiones. Además, son el equipo que más lanzamientos concede al rival (93,9), el séptimo que mejor porcentaje al triple permite al oponente (37,1%) y el que más tiros libres recibe de su contrincante (26,1).
"No creo que haya sido una cuestión de esfuerzo", dijo Udoka después del partido. "Creo que fue una falta de instinto asesino, como que quitamos el pie del acelerador y pensamos que el partido había terminado. Fue una falta de concentración e instinto asesino en su mayor parte. Una lección aprendida que va a doler y debería doler, y deberíamos estar cabreados por eso".
“Algunas noches te mereces ganar”, continuó el técnico novato. “Y algunas noches mereces perder cuando no te tomas el partido en serio. Perdimos un poco la compostura cuando comenzaron a marcar doble a Jayson. Pero en general, creo que nos relajamos y nos volvimos perezosos".
Boston deberá encontrar pronto la regularidad y salir del paso para no verse inmerso en problemas demasiado pronto en la temporada. Con un técnico nuevo, jugadores en busca de relanzar su caché y dos estrellas jóvenes, los Celtics tienen por delante un calendario exigente, midiéndose próximamente a Orlando Magic, Miami Heat y Dallas Mavericks, todos ellos fuera de casa.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
