Trae Young está teniendo una 2019-2020 para el recuerdo y lo de este martes probablemente haya sido el pico más alto de ese gran presente. El base de los Hawks impuso su show en Denver, terminando con 42 puntos, 11 asistencias, 4 rebotes y un excelente 13-21 de cancha (8-13 en triples), para impulsar la victoria de Atlanta ante los Nuggets por 125-121.
Lo cierto es que los últimos tres juegos de Young han sido para encuadrar. Repasemos:
- vs Denver: 42 puntos, 11 asistencias, 8 triples convertidos.
- vs Portland: 35 puntos, 10 asistencias, 3 triples convertidos.
- vs Sacramento: 30 puntos, 12 asistencias, 3 triples convertidos.
En la historia de la liga, hubo apenas un jugador que consiguió al menos 30 puntos, 10 asistencias y 3 triples en tres partidos consecutivos. Fue James Harden, en tres oportunidades diferentes (todas ellas durante la campaña 2016-2017), incluyendo dos rachas de cuatro juegos con esos números. Young ya está adentro de ese exclusivo club.
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El plus es que se trató de la mejor victoria de Atlanta en la campaña, cortándole una seguidilla de cuatro festejos al hilo a los Nuggets.
El quiebre del partido se dio en el segundo período, ganado por los Hawks por 38-20. Denver llegó a empatar el trámite en 101 a falta de 8 minutos, pero sufrió una ráfaga mortal de Young, quien sumó 15 puntos en los 12 minutos finales. El base no sólo acabó con números excepcionales: los consiguió cuando más importaba.
Además de Trae, en los Hawks hubo 20 puntos y 9 rebotes de un Jabari Parker que sigue aprovechando muy bien la baja de John Collins, además de 17 unidades de Alex Len. Por Denver no fueron suficientes los 21 tantos de Will Barton ni los 20 de Nikola Jokic.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
