El jugador que más polariza en la liga está alimentando ese fenómeno en este comienzo de la 2020-2021. El traspaso de Russell Westbrook hacia Washington Wizards fue uno de los movimientos más hablados de la offseason. Entre el ruido de su salida de Houston Rockets, las dudas sobre su encaje con Bradley Beal y la ilusión de llevar al conjunto de la capital de regreso a los Playoffs, esta operación no pasó desapercibida. Por supuesto que una buena parte de los ojos de este comienzo de temporada iban a estar en este contexto, y la realidad es que estamos viendo dos caras de la moneda en torno al base y su equipo.
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Westbrook está logrando eso que se transformó en un sello de su carrera: triple-dobles. Sí, múltiples. El tema es que ese logro estadístico queda vacío en este momento al ver que Washington es uno de los cuatro equipos que aún no ha podido ganar en esta 2020-2021. Cuatro partidos (tres con Russ, quien descansó en el cierre de un back-to-back), cuatro caídas para los de Scott Brooks, la última de ellas en la noche del martes frente a Chicago Bulls (115-107). Un inicio por demás doloroso para ese deseo de llegar a la postemporada.
Russ hizo su parte: 21 puntos (9-17 campo, 1-4 triples, 2-2 libres), 15 rebotes, 11 asistencias y un robo en 38 minutos (también 6 pérdidas). También hizo lo suyo Bradley Beal (29 tantos en 37 minutos). Sin embargo, hay poco más para rescatar de este inicio de los Wizards, quienes no encuentran consistencia colectiva. Quizás las buenas señales del rookie Deni Avdija representan lo más positivo, aunque también llevan a pensar en la necesidad de recibir más balones que con Russ y Beal no recibe.
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Pero volvamos a Westbrook y sus números por un rato. ¿Qué hizo en este inicio?
- 21 puntos (9-22 campo), 11 rebotes, 15 asistencias (6 pérdidas) vs. Philadelphia (107-113)
- 15 puntos (6-19 campo), 15 rebotes, 12 asistencias (5 pérdidas) vs. Orlando (120-130)
- 21 puntos (9-17 campo), 15 rebotes, 11 asistencias (6 pérdidas) vs. Chicago (107-115)
Sí, tres triple-dobles en sus tres primeros partidos de una temporada. Algo casi atípico: sólamente Oscar Robertson, en la 1961-1962, comenzó un curso con triple-decena en sus tres primeros partidos (de hecho fueron cuatro en total), según la base de datos de StatHead. Y ojo que también es atípico verlo perder cuando completa este tipo de producciones.
Russ es el segundo jugador con más triple-dobles en la historia de la NBA con 149, sólo por detrás de Robertson (181). Y de esos 149 partidos, sus equipos ganaron 115. Es decir que cuando Westbrook logró un triple-doble, su equipo ganó el 77,2% de los duelos, un registro espectacular y que debería tirar abajo una teoría de los no tan fan de Westbrook de que sus números son vacíos o no impactan en victorias. Es más, hasta este inicio en Washington, jamás había perdido tres partidos consecutivos en donde logró un triple-doble.
"Es un momento duro, pero tenemos que buscar una manera de resolverlo, sobre todo de mi parte. Realmente odio perder, pero como líder no podés liderar solamente cuando las cosas están yendo bien. Tenemos que mantenernos positivos, haciendo lo que sabemos y lo que creemos. Seguiré diciéndole a todos en el equipo que es una temporada larga", señaló Russ después de la caída contra los Bulls. "Tenemos que mantenernos unidos, luchar unidos y continuar juntos por este camino", agregó Brooks.
Washington volverá al ruedo en la noche del jueves, cerrando el 2020 frente a Chicago Bulls.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
