Ben Simmons ha sido uno de los principales protagonistas de la offseason en la NBA. Desde el momento en el que sorprendentemente los Atlanta Hawks eliminaron a los Philadelphia 76ers en el séptimo partido de las semifinales de Conferencia el australiano ha ocupado buena parte de los titulares por su deseo de abandonar la franquicia.
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Con el paso de las semanas y las diferentes negociaciones el base no ha acabado viendo cumplida su petición, razón por la que este tomó la decisión de no presentarse en el inicio de los entrenamientos de pretemporada. Por ello, la franquicia comenzó a aplicarle multas y retener su salario siguiendo el procedimiento estipulado en el convenio colectivo.
Una situación que parecía no tener una solución sencilla y que, sin nadie esperarlo, Simmons se presentó el 12 de octubre en las instalaciones de los 76ers para pasar los controles sanitarios en su objetivo de reincorporarse a la organización. Un brusco cambio de los acontecimientos cuyo siguiente capítulo es todavía una incógnita. ¿Volverá el australiano a jugar con Philadelphia o bien se mantendrá apartado pero bajo las órdenes de la franquicia?
Sin haber completado un solo entrenamiento colectivo ni un partido de pretemporada, el estatus del jugador del 25 años para el próximo encuentro ante los Detroit Pistons (16 de octubre a la 1:00h, NBA League Pass) todavía está por conocer, pues no ha sido incluido todavía en el informe de lesionados. Todo apunta a que Simmons volverá a jugar con los Sixers en el corto plazo, algo que, sin embargo, Doc Rivers todavía no tiene claro.
"No lo sé. Ha expresado eso, pero veremos cómo funciona", comentó el técnico del equipo en la tarde del miércoles sobre la posibilidad de que juegue Simmons. "Asumo que va a jugar, pero ¿quién sabe? No puedo saber lo que pasa en cada cabeza".
"Ya sea que se decida que juegue o no, eso dependerá de lo que veamos esta semana. Viene de estar fuera, porque no ha estado en los entrenamientos, obviamente. Habiendo dicho eso, ¿lo apresuras y lo pones en cancha? Eso es otro tema. Lo que vemos esta semana es cómo determinamos todo en el futuro", añadió.
La situación con Simmons no ha sido la más positiva para los intereses de la franquicia que ha debido arrancar la pretemporada sin tener claro cómo resolverían la ecuación, no pudiendo contar con una de sus piezas clave del proyecto y ni siquiera mantener un canal de comunicación abierto con su entorno.
Pese a ello, al interno del vestuario los jugadores han reiterado su intención de acogerle nuevamente, entendiendo su posición y tratando de mejorar el ecosistema del grupo.
"Lo queremos de vuelta. Lo queremos con nosotros", comentó Danny Green. "Cuando esté en las instalaciones, lo aclimataremos apropiadamente. Solo queremos que todos vengan aquí, se presenten y hagan su parte del trabajo".
"No le estoy pidiendo que haga nada diferente de lo que hace normalmente, porque con eso somos efectivos. No le estamos pidiendo que lance tiros en suspensión. Solo estar, ser un profesional y hacer tu trabajo. Eso es lo que esperamos de él", continuó el veterano. "Si se disculpa, genial, pero vosotros trabajáis con gente todos los días. No esperas [una disculpa] de las personas que no se presentan porque hay problemas familiares o una enfermedad o lo que sea. Vienen y hacen su trabajo".
Es imposible predecir cómo se desarrollará la situación de Ben Simmons en Philadelphia 76ers. Si será traspasado de inmediato, si quedará apartado hasta entonces o bien las aguas volverán a su cauce y el australiano cumplirá las 4 temporadas que le restan de contrato.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
