Por más que la sensación es diferente, Chris Paul no quiere dejar pasar el momento. Muchos imaginan que su llegada a Oklahoma City Thunder después de la salida de Houston Rockets es una cuestión pasajera, pero él no quiere perder el tiempo y abraza la situación con la responsabilidad y el compromiso que corresponde.
Más | Guía de la NBA 2019-2020: todas las plantillas, fichajes, figuras, calendario y más
El Media Day de OKC mostró a un CP3 feliz y con una mirada positiva de cara al 15° curso de su carrera. "Mucha gente trata de contar tu historia, tu verdad y lo que se supone que quieres. Pero la realidad es que mi objetivo siempre es jugar al baloncesto. Estoy entusiasmado por esta oportunidad, por nuestro equipo y por construir", remarcó el base.
Claro, muchos piensan que a los 34 años y después de varias campañas peleando en los primero planos (sobre todo en Houston), llegar a una organización que encara una reconstrucción va contra el ideal de sus metas. Sin embargo, el ex de Clippers se metió de lleno en el desafío (al menos por ahora) que lo tiene de regreso a la ciudad donde comenzó todo. En 2005, sus primeras dos campañas con los Hornets fueron en Oklahoma City (New Orleans se mudó temporalmente). "Es una bendición poder regresar. Ha sido muy bonito ver caras conocidas", resaltó.
⚡️THUNDER UP⚡️ pic.twitter.com/tw8pJiZRWn
— OKC THUNDER (@okcthunder) October 1, 2019
Más allá de la decisión de la franquicia de traspasarlo para hacerle lugar a Russell Westbrook, Paul no guarda rencor tras su paso por Houston. "Es duro, pero realmente disfruté mis dos años allí. Pasamos momentos increíbles e hicimos grandes relaciones. Esto es un negocio y estas cosas pasan. Les deseo lo mejor", señaló.
Más | Paul George: "Con Kawhi Leonard somos el mejor dúo de la NBA"
En los Thunder su experiencia será clave para empezar a pulir a Shai Gilgeous-Alexander, la joya que llegó en el traspaso que envió a Paul George a los Clippers. "Shai puede jugar. Fui un fan de él cuando estuvo en Los Angeles. Tengo amigos en la organización todavía y hablamos de lo bueno que era. Es curioso porque lo vi en la Summer League después de que fuera traspasado y hablamos de su juego y demás, sin saber que íbamos a ser compañeros. Estoy entusiasmado por verlo y por jugar con él", destacó alguien que sigue con ganas. ¿Por qué?
"La competencia es lo que me alimenta, como también lo hace el hecho de siempre tratar de mejorar, de prestar atención en lo que puedo evolucionar", puntualizó. El tiempo dirá si uno de los mejores bases de la última década sigue en los Thunder al final de la 2019-2020. En el comienzo, su compromiso es total.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.