Menos de dos meses como retirado le sirvieron a Tom Brady para darse cuenta de que no le quiere poner punto final a su carrera. A los 44 años, el quarterback regresará a Tampa Bay Buccaneers para ir en busca de su octavo anillo en la NFL, segundo con la franquicia de Florida. Una vez más se pondrá bajo las órdenes de Bruce Arians.
En lo personal, la campaña pasada fue sensacional para el exPatriots: lideró a la liga en yardas completadas por aire (5,316) y touchdowns (43). Además, su rating de pasador fue el segundo mejor (68.1), detrás del de Aaron Rodgers de Green Bay Packers (69.1), quien fue elegido como el Jugador Más Valioso (MVP). En playoffs quedó eliminado a manos del campeón, Los Angeles Rams, que se impuso por 30-27 en el Juego de Campeonato de la Conferencia Nacional (NFC).
La revancha que buscará Brady ya la vivieron otros y The Sporting News hace un repaso de cómo les fue a esas figuras que dieron marcha atrás en su decisión de retirarse de la escena profesional. Hubo buenas y malas actuaciones. ¿Qué le deparará a Brady?
Más | ¿Qué significa el regreso de Tom Brady para su carrera, los Buccaneers y la NFL?
Michael Jordan
Después de tres títulos consecutivos con Chicago Bulls y motivado por la muerte de su padre, Michael Jordan le puso punto final a su experiencia en la NBA para probar suerte en el béisbol. Después de no cumplir con su sueño de jugar en la MLB y sabiendo que aún podía ganar con la naranja en sus manos, regresó a la franquicia que lo drafteó.
MJ se salteó la campaña 1993-94 y volvió sobre el final de la temporada regular 1994-95 con números más discretos. Aunque en playoffs mostró una versión superlativa: promedió 31,5 puntos por encuentro. En semifinales de la Conferencia Este, Orlando Magic le puso un freno por 4-2. Esa sería la última serie perdida en playoffs para la leyenda, ya que luego ganaría otros tres anillos con los Bulls.
Jordan tuvo un segundo retiro frustrado en 1998. En las campañas 2001-02 y 2002-03 jugó para Washington Wizards, aunque esta vez no hubo milagro. El equipo no se clasificó a la postemporada y en su última campaña registró una media de 20 tantos por juego, el más bajo de toda su carrera.
Niki Lauda
Niki Lauda decidió alejarse de los circuitos de automovilismo mundial en 1979, tres años después de sufrir el accidente en Alemania que casi le quita la vida y que le dejó marcas para siempre. Hasta ese momento, el piloto austríaco era una gloria: dos títulos y un subcampeonato con Ferrari.
En 1982, Lauda decidió retornar a la Formula 1 y corrió para McLaren, escudería británica en la que compitió por otros cuatro años. Después de que los dos primeros estuvieran lejos de los primeros planos (5º y 10º, respectivamente), volvió a besar la gloria en 1984. Se retiraría de forma definitiva en 1985 con un total de 171 GP y 25 victorias.
George Foreman
El caso de George Foreman es único y desafiante: en 1977, tras perder con Jimmy Young, el peso pesado se retiró de los rings a los 28 años. Su carrera había sido maravillosa, con oro olímpico en México 1968, títulos CMB y AMB más combates icónicos frente a Joe Frazier y Muhammad Ali.
Diez años más tarde volvió. Y lo hizo de nuevo: se consagró campeón en 1994 tras vencer a Michael Moorer por los cinturones FIB y AMB. Antes había probado en dos oportunidades sin éxito ante Evander Holyfield y Tommy Morrison. El estadounidense colgó los guantes en 1997 al perder con Shannon Briggs.
Pelé
Dueño de una enorme carrera, Pelé finalizó su vínculo con Santos en 1972 para darle lugar a la vida post fútbol. Sin embargo, ante la crisis que vivía el club, dos años después regresó para salvarlo del descenso. El brasileño vivió de todo en la institución de sus amores.
Esta vuelta no fue exclusiva en su país: en 1975 se mudó para Estados Unidos para representar a New York Cosmos, con el que salió campeón. En 1977 dijo adiós de manera definitiva en un partido justamente frente al Peixe.
Brett Favre
A los 37 años y después de haberle dado un anillo de Super Bowl a Green Bay Packers, Brett Favre comunicó su retiro de la NFL. Pero tal como le pasó a Brady, rápidamente se retractó y la franquicia de Wisconsin lo recibió con los brazos abiertos.
Sin embargo, más allá del 13-3 en fase regular y haber alcanzado la final de la NFC (perdió vs. New York Giants, a la postre el campeón), la experiencia duró apenas una temporada. Luego se iría a New York Jets y cerraría su carrera en Minnesota Vikings, justamente un rival divisional de Green Bay Packers. Sus últimas temporadas lo asentaron como uno de los mejores quarterbacks de la historia.
Michael Phelps
Michael Phelps es sinónimo de natación y Juegos Olímpicos: desde Atenas 2004 hasta Londres 2012 coleccionó 22 medallas, 18 de oro. Había dicho que su grandiosa colección no crecería, pero después se retractó y en 2014 comenzó a entrenarse para Río 2016.
El Tiburón de Baltimore no defraudó en Brasil y logró otros nuevos cinco oros más una medalla de plata. Sus galardones son los más importantes en toda la historia del olimpismo mundial y su marca hoy parece imposible de superar.
Michael Schumacher
El siete veces campeón de la Fórmula Michael Schumacher también tuvo su ida y vuelta en la Máxima. Tras ser la cara de Ferrari durante una década (ganó cinco títulos con la marca), el alemán anunció en 2006 que ya no seguiría corriendo para darle más lugar a la familia y disfrutar de lo consechado. Aunque... Regresó en 2010.
Schumi volvió en Mercedes, escudería que no era de punta entonces, y sus tres años fueron malos: apenas logró un podio. Si bien la última imagen en la F1 no fue la esperada, el Kaiser dejó una huella imborrable en el automovilismo.
Julio César Chávez
En 2001, con su victoria sobre Terry Thomas, sin título en juego (lo había perdido contra Kostya Tszyu), Julio César Chávez dejó el boxeo con el galardón de ser el mejor mexicano de la historia. Sin embargo, sus tiempos fuera de los gimnasios duraron poquito.
El Emperador volvió en 2003 con triunfo ante Willy Wise, pero tres combates más tarde cayó con Grover Wiley y se retiró definitivamente. Su récord como profesional fue 107 victorias, 6 caídas y 2 empates; dominó las categorías súper pluma, ligero y súper ligero.
Earvin Magic Johnson
Previo al comienzo de la temporada 1991-92, Earvin Magic Johnson le comunicó al mundo que era VIH positivo y que dejaba la actividad como profesional. Como hacía en la cancha, el base de Los Angeles Lakers se sobrepuso fuera de ella para ser parte del Dream Team que ganó la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.
A la NBA regresaría en la campaña 1995-96, en la que disputó 32 encuentros con la camiseta de Los Angeles Lakers. Finalmente esa temporada sí marcaría su última vez como jugador de básquet, deporte del que nunca se despegó y al que continúa ligado.