Santi Aldama llegó a los Memphis Grizzlies en el Draft de 2021 como una promesa y una apuesta al mismo tiempo. El canario se había convertido en uno de los nombres más destacados de su pequeña conferencia en la NCAA, razón por la cual apenas llamó la atención lo hecho por él en Loyola. Si bien el español estaba lejos de poder aportar en una rotación NBA a tiempo completo desde su año rookie, el plan seguido por la franquicia con él terminó dando sus frutos. Esa constante progresión le ha llevado a afianzarse como una de las piezas clave de los Grizzlies en la actualidad, convirtiendo lo que antes eran carencias en fortalezas.
Si 2023 fue el año del tiro para Aldama, 2024 parece que la defensa será el aspecto destacado de su juego. El jugador de Las Palmas de Gran Canaria ha pasado de permitir un 48,2% de acierto a sus rivales a conceder únicamente el 41,7%.
Esa mejoría no solo refleja un cambio y una evolución, sino que le colocan como uno de los nombres más destacados en ese sentido en lo que va de temporada. Sin ir más lejos, a 17 de diciembre, Santi es el 7º jugador que más impacta en sus emparejamientos de toda la NBA.
Santi Aldama está dejando a sus rivales en un 41,7% en tiros de campo
— Sergio Rabinal (@S_Rabinal) December 17, 2023
Es el 7º mejor registro de toda la NBA entre aquellos con más de 10 tiros defendidos por encuentro
Su progresión este año en defensa es más que notable (48,2% en la 2022-23) pic.twitter.com/1Bn6WYp35l
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El jugador de 22 años está respondiendo de manera positiva en defensa en un momento de gran complejidad para la franquicia. La suspensión de Ja Morant ha tenido un efecto mayor del esperado, hundiendo a los Grizzlies en la clasificación con un balance de 6-18 y ocupando el 13er lugar. Por otro lado, Aldama está teniendo ciertos problemas para ser todo lo constante que le gustaría en ataque ante un mayor rol ofensivo. Así, el ala-pívot ha mejorado sus promedios con 12,3 puntos, pero a cambio ha bajado al 52,1% en tiros de dos y al 33% en triples.
Pese a esto, Aldama está compensando esos bajos porcentajes, fruto también de un ataque colectivo deficiente (106,5, 30º), con una defensa impecable.
El canario ha demostrado que su paso por la Selección española ha enriquecido sus lecturas, entendiendo mejor en qué momento y cómo intervenir ante un desajuste. Además, la evidente mejora física, tanto en agilidad como en peso, explican en gran medida cómo el ala-pívot está pudiendo impactar de este modo atrás.
En un contexto como el de los Grizzlies, con constantes bajas, cambios y ajustes, cuesta sacar conclusiones en clave colectiva, pero dos de las cinco mejores alineaciones defensivas de Memphis han tenido a Santi Aldama como integrante, aunque todas con una muestra todavía muy reducida.
Por otro lado, la necesidad está llevando a Taylor Jenkins a alinear al canario junto a Jaren Jackson Jr más de lo que había ocurrido hasta ahora. Si el pasado curso ambos compartieron cancha en 228 minutos, en este inicio de campaña ya suman 233. Y el balance no puede ser mejor, registrando la unión de Santi y JJJ el tercer mejor dato defensivo del equipo (107,6).
Ambos saben cómo complementarse y cubrirse las espaldas en defensa, pudiendo aplicar su gran altura para proteger el aro y llegar a condicionar los tiros en el perímetro. Un halo de luz en la complicada temporada de los Grizzlies.
El trabajo de Santi Aldama en defensa está superando las expectativas puestas en él al comienzo del curso. Es de esperar que Memphis tome decisiones complicadas próximamente a la vista de los resultados, pero hasta donde el canario puede controlar su trabajo está siendo impecable. Y nada se valora más en la NBA que un grande que sepa defender múltiples posiciones.
Con un año más de contrato por delante y la opción de firmar una extensión, como pronto, a partir del próximo verano, Aldama está yendo por la senda correcta para tener una larga carrera en la liga.
