Si había alguna duda, si había algo que les había faltado a Los Angeles Lakers desde el final del periodo de traspasos eso era LeBron James. El máximo anotador de la historia de la NBA reapareció tras perderse los tres últimos partidos con el equipo californiano y lo hizo a lo grande. La estrella fue el eje vertebrador de la victoria de los suyos sobre New Orleans Pelicans, a quienes ganaron por 120 a 102 sin mayores complicaciones.
LeBron devolvió las esperanzas a los californianos, confirmando que los fichajes realizados recientemente tienen todo el sentido del mundo solo si él está presente. Casi como si se tratase de un catalizador, la presencia de la estrella permitió a figuras como Jarred Vanderbilt o D'Angelo Russell encontrar su hueco en el equipo. Aunque el más beneficiado de su vuelta a las canchas fue Anthony Davis. El interior venía arrastrando un bajísimo nivel de juego, con un lenguaje corporal preocupante y una falta de intensidad llamativa. Actitudes que quedaron en el olvido en una de las victorias más sólidas y contundentes de la temporada para los Lakers.
La sola presencia de James fue suficiente para instaurar el orden en la franquicia californiana. En el encuentro que menos minutos ha jugado de todo el curso (29), LeBron lideró con 21 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias y una serie de 7 de 14 en tiros de campo. ¿Su única pega? El 0 de 5 al triple con el que se fue. Más allá de eso, la estrella fue un parche en todas aquellas deficiencias que arrastraba el equipo: dirección, control, paciencia y equilibrio ofensivo.
LeBron 🤝 DLo pic.twitter.com/Yj2f6dCwqi
— Spectrum SportsNet (@SpectrumSN) February 16, 2023
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Sí, AD fue el máximo anotador con 28 puntos y un 76,5% de acierto, pero en gran parte fue consecuencia de volver a compartir cancha con LeBron. De igual modo que D'Angelo Russell, que con 21 tantos y 7 asistencias constató su motivación para relanzar su carrera en su segunda experiencia en los Lakers.
Con el All-Star a la vista, esta no es una victoria más para los angelinos. Tras caer en 4 de sus últimos 5 encuentros los de Darvin Ham se van a la pausa con un triunfo que reafirma el compromiso y potencial del grupo. Por delante 22 duelos que serán 22 finales y uno de los calendarios más asequibles de toda la Conferencia Oeste (5º mejor), pero con la seguridad de que con James a este nivel todo es posible.
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