La fecha límite para traspasos (25 de marzo pasado) no sólo dejó movimientos que estuvieron en boca de todos. No sólo se trató de Nikola Vucevic reforzando a Chicago Bulls, o Aaron Gordon encajando sin problemas y elevando el techo de Denver Nuggets (hasta la lesión de Jamal Murray, claro). Hubo operaciones, o partes de ellas, que muestran un lado B, que nos dejan a varios jugadores que han logrado destacarse y dar un salto después de un cambio de escenario. Es hora de ponerlos sobre la mesa.
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Vamos con cinco ejemplos de piezas bajo el radar que han cambiado de camiseta después del deadline y le han sacado un enorme provecho a su nueva realidad.
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Kelly Olynyk en Houston Rockets
- Pre-deadline: 10,0 puntos (43,1% campo, 31,7% triples), 6,1 rebotes y 2,1 asistencias en 26,9 minutos (Miami)
- Post-deadline: 17,9 puntos (59,5% campo, 40,9% triples), 7,9 rebotes y 2,6 asistencias en 30,9 minutos
Sí, es cierto que a nivel colectivo el cambio es rotundo y para nada positivo. Al cabo, Olynyk salió de un contexto donde estaba siendo titular en un equipo con aspiraciones como es Miami, y cayó literalmente en el peor conjunto de esta campaña, en absoluta reconstrucción como está Houston. Pero el canadiense ha aprovechado esa oportunidad para demostrar su valor, justo a tiempo antes de salir a la Agencia Libre. Es más, el regreso de Christian Wood tras unos partidos fuera no lo sacó de la alineación inicial, sino que ambos están conviviendo en el quinteto de Stephen Silas. ¿Pueden los texanos apostar a él en el futuro inmediato, como pieza de experiencia en su rearmado? Sin dudas.
Las cualidades ofensivas del interior siempre estuvieron sobre la mesa, pero quizás aquí es la primera vez que dispone de absoluta libertad para exponerlas. Ha mejorado su eficiencia anotadora (de 54,9% a 71,1% de True Shooting %), seis de sus 14 partidos con los Rockets lo vieron anotando por encima de los 20 puntos, y en ocho tuvo al menos dos triples, además de completar cuatro doble-dobles. Es el tercer máximo anotador del equipo desde el deadline, sólo superado por Wood (20,5) y John Wall (18,3). Y su equipo mejora más de 6 puntos cada 100 posesiones en su rating ofensivo cuando está en cancha frente a cuando descansa (112,0 vs. 105,9). Sí, también es cierto que se cae la defensa, un área donde nunca se destacó. Pero bueno, hay mayores preocupaciones en los Rockets...
Olynyk está haciendo su mejor muestra posible antes de salir a la Agencia Libre a los 30 años. Vale darle una mirada más detallada a su presente en este artículo (en inglés) de Carlan Gay en NBA Canadá.
Daniel Gafford en Washington Wizards
- Pre-deadline: 4,7 puntos (69% campo), 3,3 rebotes y 1,1 tapones en 12,4 minutos (Chicago)
- Post-deadline: 11,4 puntos (67,9% campo), 5,8 rebotes y 2,0 tapones en 17,1 minutos
Probablemente el mejor caso a la hora de combinar crecimiento individual e impacto colectivo. Y es que Gafford, uno de los descartes jóvenes del cambio de apuesta de los Bulls, ha caído como anillo al dedo en el presente de los Wizards, en clara mejoría y golpeando la puerta del Play-in pero sin una referencia clara en la pintura tras la lesión de Thomas Bryant a comienzos de temporada. Alex Len está siendo el titular y Robin Lopez sigue siendo alternativa desde el banco. Pero Gafford, con 22 años, está produciendo muchísimo más que ambos. De hecho, cuesta entender que apenas esté promediando 17,1 minutos por juego.
Gafford es un perfil que Washington no tenía, un interior completamente atlético, excelente para jugar el pick and roll con Westbrook por su capacidad como finalizador (hay una gran química entre ambos) y un muy buen protector de aro (en el triunfo ante los Pelicans, donde puso cuatro tapones, metió uno clave en el clutch ante Zion). Su producción por minuto en cancha es realmente descomunal y ya ha cerrado varios partidos con los titulares. De hecho, si proyectamos sus promedios cada 36 minutos, la cuenta daría 23,9 puntos, 12,1 rebotes y 4,2 tapones.
Elegido en el 38° lugar del Draft 2019, Gafford nunca tuvo en los Bulls el escenario que ha encontrado en el DC. Quería una oportunidad y la está aprovechando por completo. Y Washington ya lo necesita de manera clara: récord de 7-1 con él en cancha, que contrasta con un 2-4 durante una racha de seis partidos que se perdió por un esguince en un tobillo. A anotar el nombre de este pívot que puede llamar la atención más temprano que tarde.
Daniel Theis en Chicago Bulls
- Pre-deadline: 9,5 puntos (55,2% campo), 5,2 rebotes, 1,6 asistencias y 1,0 tapones en 24,5 minutos (Boston)
- Post-deadline: 9,3 puntos (51,7% campo), 4,8 rebotes, 2,1 asistencias y 0,6 tapones en 23,3 minutos
Desde lo numérico, la versión de Theis previa al traspaso desde Boston es similar a la que vemos en Chicago (incluso un poco mejor). Pero su importancia ha crecido en este nuevo contexto. De hecho, aún no se entiende la decisión de los Celtics de desprenderse de una pieza rendidora y necesaria en su camino a los Playoffs. Pero bueno, los Bulls lo recibieron con los brazos abiertos, y tanto ha gustado su trabajo que ya piensan en una continuidad más allá de este curso (será agente libre).
El alemán es una suerte de equilibrio en este contexto complicado de los Bulls, que aún no han encontrado una versión estable después de la fuerte apuesta sobre el deadline, dejando de lado la juventud para ir con la experiencia por la vuelta a los Playoffs. El ex Celtics ha sido el sexto jugador que más ha usado Donovan en promedio, he incluso ha saltado a la formación titular en los últimos tres encuentros. Lo suyo no se trata de números, sino de hacer las cosas correctas que necesita el equipo en ambos lados del campo para acercarse al éxito. Allí es donde ha mostrado su principal valor. Obrero necesario que todo equipo quisiera tener.
RJ Hampton en Orlando Magic
- Pre-deadline: 2,6 puntos (41,7% campo), 2,0 rebotes y 0,6 asistencias en 9,3 minutos (Denver)
- Post-deadline: 9,1 puntos (43,5% campo), 4,2 rebotes y 1,5 asistencias en 22,3 minutos
Al igual que el caso de Olynyk, el cambio colectivo de contexto no acompaña (de equipo candidato a otro en reconstrucción). Pero a diferencia de Olynyk, Hampton es un rookie que necesita minutos para mostrar su valía. Minutos que en Colorado no estaba teniendo. La llegada a Orlando ha sido clave para empezar a tener más rodaje, balón y oportunidades, y ha mostrado destellos de una pieza con potencial. Al menos, de una pieza sobre la cual el Magic puede construir en estos próximos años de rearmado.
El #24 del Draft 2020 ha tenido cinco partidos por encima de los 10 puntos en Florida, incluidas dos presentaciones de 16 tantos. Tiene mucho por mejorar, está claro. Pero Orlando le ofrecerá la plataforma que necesitaba para equivocarse sin problemas y empezar a desandar su camino en la liga en búsqueda de un papel estable y consistente en un equipo.
Isaiah Hartenstein en Cleveland Cavaliers
- Pre-deadline: 3,5 puntos (51,3% campo), 2,8 rebotes, 0,5 asistencias y 0,7 tapones en 9,1 minutos (Denver)
- Post-deadline: 8,9 puntos (60,3% campo), 7,3 rebotes, 2,7 asistencias y 1,5 tapones en 19,7 minutos
Otro caso de jugador que salió de los Nuggets, que lo firmaron en la Agencia Libre para tomar el lugar que dejaba Mason Plumlee como relevo principal de Nikola Jokic, pero que jamás pudo establecerse. Su llegada a Cleveland ha cambiado su situación individual de manera absolutamente positiva, y su joven perfil (22 años) encaja con la construcción actual del equipo. Lo que a comienzos de año era Andre Drummond y JaVale McGee como pívots pasó a ser Jarrett Allen y el alemán. Muchas más condiciones y futuro para un equipo en crecimiento.
Una ausencia prolongada de Allen (8 partidos) le permitió ganar mayor terreno en la consideración del entrenador y respondió de gran manera: 10,3 puntos, 8,9 rebotes, 3,4 asistencias y 1,6 tapones en 23,5 minutos en ese tramo. Hartenstein es un jugador correcto para jugar en parejas y un sólido protector de aro. Tiene cualidades de sobra para convertirse en un correcto pívot de relevo, y en Cleveland podría asegurarse ese rol de acá en adelante.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
