Minnesota Timberwolves tendrá el peor récord de la competición (12-36) y su temporada -hasta ahora- presentó más situaciones pálidas que positivas. Un cambio de entrenador, lesiones o problemas de salud en sus principales estrellas (Karl-Anthony Towns y D'Angelo Russell), un rendimiento colectivo por debajo de las expectativas... Es complicado encontrar puntos para destacar sobre el campo a lo largo del curso, pero la explosión de Anthony Edwards ha sido un baño de frescura dentro de la dinámica negativa, un punto para ilusionarse con su futuro dentro de la organización.
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El #1 del Draft 2020 ha dado un paso al frente en marzo, al punto de encontrarnos con un mes histórico en cuanto a su producción anotadora. Con los 24 puntos (9-16 campo, 2-7 triples, 4-5 libres) que anotó en la noche del jueves para la agónica victoria ante New York Knicks (102-101), el rookie completó un mes realmente espectacular en cuanto a lo ofensivo: 24,2 puntos, 42,3% campo, 5,5 rebotes, 2,5 asistencias y 1,6 robos en 35,1 minutos a lo largo de sus 13 partidos. ¿Lo más importante? Las cinco victorias de su equipo en este tramo, el más productivo en cuanto a triunfos en esta opaca campaña. Una de ellas fue con sus 42 puntos frente a Phoenix, noche en la que se convirtió en el segundo jugador más joven de la historia (19 años y 225 días) con esa cantidad de unidades (Kevin Durant convirtió 42 con 19 años y 200 días en 2008).
Today's entry in Ant's 2021 ROY campaign. pic.twitter.com/9aKnA1ldv3
— Minnesota Timberwolves (@Timberwolves) April 1, 2021
¿Por qué decimos que fue un mes histórico para Edwards? Es que su promedio de anotación es el tercero más alto de toda la historia para un jugador menor de 20 años (recién los cumplirá el 5 de agosto) a lo largo de un mes calendario, con un mínimo de 10 partidos. Por delante, sólo los registros de Carmelo Anthony y LeBron James, en febrero y noviembre de 2004, respectivamente, según aportó Justin Kubatko.
- Carmelo Anthony: 27,1 puntos en febrero de 2004
- LeBron James: 26,3 puntos en noviembre de 2004
- Anthony Edwards: 24,2 puntos en marzo de 2021
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Lo de Melo, también rookie, en aquel febrero fue de lujo: 49,2% de campo, 42,9% triples, 6,3 rebotes, 2,6 asistencias y 1,3 robos en 37,0 minutos (12 partidos), y al igual que Edwards ayudó a su equipo, los Nuggets, a conseguir cinco victorias. LeBron, por su parte, lo hizo al iniciar su segunda temporada en la liga, logrando un impacto general mayor: 51,5% campo, 7,8 recobres, 6,1 asistencias, 2,4 robos y 1,1 tapones en 40,9 minutos a lo largo de 14 partidos, con Cleveland ganando 9 de ellos.
Volviendo a Edwards, lo importante es que ha dado un paso adelante en un aspecto que aún debe mejorar como su selección de lanzamientos y eficacia. El ex de Georgia logra sacar ventajas con su explosión y capacidad atlética, pero la consistencia de su lanzamiento aún es una cuestión en progreso. Ha tenido su mes con mayor uso (31,2%) y respondió con un True Shooting de 51,9%, superior al 46,5% de febrero. ¿En el debe? Tomó más triples que nunca (8,7 por encuentro) y anotó apenas el 30,1% de ellos, una cifra muy baja para semejante volumen de intentos.
De todas maneras, sus principales lagunas no son nada que no se podría esperar para alguien aún muy joven y que no llegó a la liga como un producto completamente terminado y listo para marcar diferencias. Aún resta por ver cuál es su techo y, sobre todo, cómo encaja con los Wolves cuando todas las piezas principales estén sanas y en acción al mismo tiempo. Pero está claro que Minnesota puede empezar a sonreír con los destellos especiales que está teniendo su gran apuesta del último Draft, que se anota como candidato al Rookie del Año no sólo por la lesión de LaMelo Ball, sino por sus propios méritos.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
