Ser debutante en la NBA nunca es algo fácil. Las historias que más llaman la atención temporada tras temporada son aquellas protagonizadas por los rookies que mejor y más rápido logran adaptarse a la competición. Todos los focos se centran en estas historias y no tanto en la otra cara de la moneda, aquellos que están obligados a ganarse su puesto en los mal llamados minutos de la basura, cuando el partido está ya roto y el marcador sentenciado. Estar inactivo durante prácticamente los primeros 40 minutos de encuentro, lo que equivale a más de una hora y media en tiempo real, y acto seguido saltar a cancha y rendir a un buen nivel no es en absoluto sencillo, pero es una de las partes que tiene ser jugador profesional, algo que está comprobando Santi Aldama en sus primeros compases en la mejor liga del mundo.
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El canario ha tenido la fortuna de recalar en una franquicia que se preocupa por el desarrollo de sus jugadores jóvenes y que prima su evolución, pero que, al mismo tiempo, se encuentra en una situación competitiva que les obliga a primar los resultados por encima de las oportunidades a estos proyectos. Por ello, la G-League ofreció a Aldama un escenario perfecto para mantenerse activo y crecer, así como otros momentos ya en temporada regular en la NBA en la que enfrentarse al "fuego real", por decirlo de algún modo.
Entre la liga de desarrollo y sus encuentros con los Grizzlies, el jugador español está promediando 4,9 puntos, 3,6 rebotes y 1,0 asistencias con un 38,1% en tiros de campo y 12,5% al triple en un total de 21 partidos disputados. Teniendo en cuenta que Aldama solo tiene 20 años y sale directamente del college tras pasar por una universidad fuera de la élite de la NCAA las sensaciones son positivas y lo visto hasta el momento invita a pensar que el ala-pívot irá contando con más opciones de saltar a pista y desarrollarse.
Un poco más de un mes después de su debut profesional ante Portland Trail Blazers echamos un vistazo a las claves más destacadas hasta el momento de Santi Aldama.
Producir en un contexto complicado
De nuevo, salir cuando el partido está prácticamente finiquitado y el tiempo en el banquillo desde el trabajo de calentamiento previo al duelo ha sido tan prolongado no es una tarea sencilla. No obstante, ese es el contexto en el que se encuentra Aldama, uno que no parece que vaya a cambiar en un futuro próximo salvo que se produzcan una serie de bajas notorias o bien el canario comience a producir a un alto nivel, de tal modo que Taylor Jenkins le de entrada en la rotación de manera habitual.
Dentro de esta compleja tesitura, el ex de Loyola está sabiendo aprovechar sus oportunidades para mostrarse tal y como es al mismo tiempo que ejecuta el plan de partido marcado por el cuerpo técnico. Sin ir más lejos, en su estreno como profesional exprimió al máximo los 5:34 minutos que estuvo sobre el parqué para sumar 7 puntos y 2 rebotes en un 3 de 6 en tiros de campo.
Ante la falta de minutos la franquicia decidió asignarle a los Memphis Hustle de la G League durante su pretemporada regresando a tiempo para unirse a los Grizzlies en su partido de la jornada. Esto le abrió las puertas a Aldama a recuperar sensaciones y entonarse. En esos dos duelos produjo una media de 12,5 puntos, 9 rebotes, 2 asistencias, 1,5 robos y 2,5 tapones con una efectividad del 47,6%, dejando acciones como estas:
A más minutos, mejores sensaciones
Su buen hacer durante el breve paso por la G League y su evolución durante los entrenamientos le abrió la puerta a contar con más minutos con los Grizzlies. Desde el 26 de noviembre el ala-pívot no se ha perdido un solo partido, disputando en todos ellos siempre más de 10 minutos y alternando partidos excelentes con otros no tan brillantes, algo lógico y esperable en un debutante. En esos 7 encuentros en los que ha saltado a pista Aldama ha logrado promediar 4,9 puntos y 3,9 rebotes con un 35% de acierto de cara al aro en 14,0 minutos. Un incremento notable en sus números que tiene una razón muy sencilla y es el partidazo que tuvo ante Oklahoma City Thunder el pasado 2 de diciembre.
Una noche en la que la actuación colectiva de los Grizzlies les permitió disfrutar del mayor márgen de victoria de la historia de la NBA y catapultó a Aldama al tercer mejor +/- de todos los tiempos con un +52. Aquella velada supuso el bautismo del canario en la NBA, sumando 18 tantos, 10 rechaces y un magnífico 8 de 16 en tiros de campo.
Debido a este impulso estadístico, el jugador de Loyola posee el honor de ser el jugador con mejor net rating de los Grizzlies con un +13,4 gracias a un 107,8 de ratio ofensivo y 94,3 de defensivo. Una anécdota más que un dato firme que tener en cuenta.
De continuar en esta línea ascendente y manteniendo una rotación de 10-14 minutos, Aldama irá ganando una experiencia vital en su desarrollo y proceso adaptativo en la NBA.
Konchar, su gran aliado
En todo este proceso ya mencionado, en el que el español ha acostumbrado a saltar a pista en los instantes finales de los partidos, cabe destacar un aliado que ha acompañado a Aldama en la mayor parte de las ocasiones. De los 136 minutos que ha disputado hasta el momento, 96 han sido junto a John Konchar, con quien parece haberse entendido a las mil maravillas.
De todas las parejas con las que Santi ha pasado más de 60 minutos, la formada junto a su compañero de 3 años de experiencia es la segunda mejor, solo por detrás de su unión con Jarrett Culver, fruto del partido ante OKC. En el tiempo mencionado, Aldama y Konchar han producido un net rating de +8,6, la 11ª mejor de todo el equipo aunque con un volumen de tiempo todavía muy pequeño.
La conjunción de ambos parece estar dando sus frutos, combinándose para acciones como esta:
O esta:
La zona, el espacio desde el que crecer
En una liga como la NBA donde rige la lógica del acierto y el fallo, tener unos porcentajes negativos desde la larga distancia pueden acabar lastrando el desarrollo de un jugador, llevándole a limitar sus intentos en favor de la eficiencia del equipo al largo plazo.
Aldama llegó a la NBA como un perfil de cuatro abierto que con el trabajo adecuado podía terminar sumando en situaciones de ejecución al triple. Una faceta que hasta el momento no está logrando trasladar al mundo profesional. El canario promedia ahora mismo un 13% de acierto en situaciones de triple en catch&shoot además de una distribución de sus lanzamientos muy negativa con 2 de 7 desde las esquinas y 1 de 19 desde la parte superior.
Pese a esto, hay un espacio en el que sí está siendo diferencial y marcando las diferencias: la zona restringida. Aprovechando su altura (2,11) está superando con facilidad a sus rivales, habiendo logrado 15 de sus 20 intentos ahí, un 75% de efectividad, lo que deja claro que como ejecutor en los aledaños del aro puede ser muy productivo para Memphis.
Entre aquellos que han intentado más de 15 pero menos de 30 lanzamientos ahí, Aldama es el 7º que mejor porcentaje de acierto tiene. Un detalle positivo a destacar, sin duda.
La defensa, un punto a mejorar
Como todo debutante, Aldama necesita un periodo de adaptación, no solo al ritmo y al acierto que se maneja en la liga, además de todos los condicionantes antes expuestos, sino también al baremo físico que se da noche tras noche en defensa. Este, sin duda, podría ser uno de los puntos más a tener en cuenta en los próximos meses pues teniendo en cuenta su potencial físico, el canario podría ir creciendo considerablemente desde atrás. Aunque ha dejado buenas sensaciones en momentos concretos como los 2 tapones que puso ante los Kings, la realidad es que atrás está todavía aclimatándose.
A lo largo de todo el tiempo que ha disputado, el canario ha concedido el 51,4% de acierto a sus emparejamientos defensivos, un dato que le coloca por debajo de lo que se considera eficiente en la defensa individual. Algo que está sucediendo por la complejidad añadida de tener que medirse a ala-pívots y aleros móviles así como interiores de gran tamaño en algunas ocasiones. Sin ir más lejos, este está permitiendo 1,35 puntos por posesión en recepción y división del rival, 1,5 en catch&shoot y 1,8 en aclarados, números altos que reflejan la tendencia.
Por otro lado, también hay puntos positivos de su defensa y que reflejan su potencial ya que en el bloqueo directo, tanto sobre el manejador (0,88) como sobre el continuador (0,67) está siendo de lo más eficiente. Algo que ha trasladado también a la defensa al poste, concediendo 0,86 puntos por posesión.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.
