Dwight Howard es el hombre del momento en la NBA. Su reciente llegada a Los Angeles Lakers, cargada de condicionantes por un pasado cuestionable, impacta desde todo punto de vista. Pero claro, también permite crear a su alrededor una historia muy atractiva para la próxima temporada. Por tratarse de una de las franquicias más importantes y por la intriga que genera el propio jugador. ¿Por qué?
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Lo decíamos... Alrededor del hombre de 33 años hay un pasado muy cuestionable, una realidad que casi lo saca por completo de la NBA. Sí, de esa liga que lo tuvo como una estrella. Porque este Howard ya no es aquel Superman que Orlando Magic eligió como N°1 del Draft en 2004, y que lo disfrutó durante 8 temporadas (alcanzando una vez Las Finales). Ya no es el 8 veces All-Star, ni el 3 veces Mejor Jugador Defensivo de la liga. Sus problemas físicos y, sobre todo, su complicada personalidad, lo llevaron a un camino de piedras.
Desde aquella llegada a Los Angeles Lakers para la 2012-2013, entre bombos y platillos por tratarse de una estrella que venía para llevar a la franquicia a lo más alto, Howard fue pasando de un lado a otro sin un gran impacto y hasta siendo moneda de cambio. 6 equipos en 6 años. Una realidad que, cuando Superman era tal, parecía una verdadera locura.
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El tiempo dirá si este Howard actual que dice haber cambiado su personalidad, que asegura haber enterrado su ego, realmente es otro. De ser así, su arribo a los Lakers podría generar cuestiones positivas, algo que no se pudo ver en estas 6 temporadas pasando por 6 lugares diferentes. Los recordamos.
2013 a 2016: Houston Rockets
El proyecto Laker había fallado, pero Howard recibía otro voto de confianza. Daryl Morey lo veía como la pareja ideal para potenciar a James Harden y llevar bien lejos a los Rockets. Interesante en la teoría, porque se juntaba un jugador que se había convertido en estrella como La Barba y otro que dominaba la pintura como pocos.
Pero en la práctica, pocos resultados. Sólo el primer curso de DH en Texas fue bueno desde lo individual. En la 2013-2014, promedió 18,3 puntos, 12,2 rebotes y 1,8 tapones en 33,7 minutos. Desde allí, su producción empezó a caer, al igual que su físico. De hecho, en la 2014-2015 jugó apenas 41 partidos. En la campaña siguiente, bajó a 13,7 tantos y 11, 8 recobres en 32,1 minutos. Su impacto, de todas maneras, no era el esperado más allá de los números. Como si fuera poco, Clint Capela empezó a ganar terreno y consideración y su irrupción terminaría convenciendo a la organización.
183 partidos en tres temporadas, 16,0 unidades y 11,7 rebotes de media, dos eliminaciones en primera ronda de los Playoffs... El Howard que fue a buscar Houston era otro. Y su salida en la Agencia Libre fue un hecho.
2016-2017: Atlanta Hawks
En el verano de 2016, Atlanta confió en él con un gran contrato (70,5 millones de dólares por 3 años). Parecía una situación ideal, porque se trataba de un regreso a casa en Georgia. Superman llegaba a un conjunto con piezas de experiencia y material necesario como para ser competitivo en el Este.
Desde lo numérico, misma historia: Howard mostró consistencia y promedió 13,5 puntos, 12,7 rebotes y 1,2 tapones (29,7 minutos). Aunque su impacto fue bastante irregular, su mejora a la estructura colectiva no se notó y tras una rápida eliminación en Playoffs (apenas 8 tantos de promedio frente a Washington), la franquicia dijo basta y cambió de rumbo.
2017-2018: Charlotte Hornets
Los Hawks decidieron moverlo en el verano y lo traspasaron a Charlotte a cambio de Marco Belinelli y Miles Plumlee. Desde lo numérico, su producción subió y terminó como el segundo máximo anotador del equipo por detrás de Kemba Walker. Tuvo medias de 16,6 puntos, 12,5 rebotes y 1,6 tapones en 30,4 minutos y hasta soportó 81 partidos en la temporada.
Pero en lo colectivo, su impacto fue bajo. Al punto que aquel equipo, que también tenía a Nicolas Batum, Marvin Williams y Jeremy Lamb, entre otros, terminó sin clasificarse a los Playoffs. ¿Se venía la continuidad? Eh, no tan rápido...
2018: Brooklyn Nets
Antes del Draft, se conoce la noticia del traspaso a Brooklyn, en un movimiento 100% salarial y pasajero. El pívot que había dominado hacía algunos años era moneda de cambio absoluta. Charlotte recibió por él a Timofey Mozgov y dos picks de segunda ronda. Los Nets jamás lo tuvieron en sus planes y rescindieron su contrato de manera automática.
2018-2019: Washington Wizards
Howard regresó a la Agencia Libre y los de la capital le dieron una oportunidad, pese a que venía de años de frustraciones y, sobre todo, de acumular una mala reputación alrededor de su personalidad y cómo impactaba negativamente en los equipos. El vínculo fue por dos años y casi 11 millones de dólares.
Claro que su espalda fue un impedimento absoluto. Apenas 9 partidos jugados (12,8 tantos y 9,2 rebotes en 25,6 minutos de media), cirugía y adiós a prácticamente toda la temporada.
2019: Memphis Grizzlies
Los Wizards tampoco confiaron en él para encarar una reconstrucción y lo traspasan a Memphis a cambio de CJ Miles. Movimiento, de nuevo, sin una búsqueda deportiva. Howard jamás estuvo en la consideración de los Grizzlies, quienes están en pleno desarrollo de sus jóvenes para una nueva era.
2019-2020: Los Angeles Lakers
Lo reciente: tras convencer a los de California de un supuesto cambio total en su enfoque, Howard acordó la rescisión con los Grizzlies para firmar nuevamente con los Lakers. 6 temporadas y 6 equipos después de aquel matrimonio que fracasó por completo.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.