En horas especiales en las que está a punto de lograr uno de los hitos estadísticos más importantes de su carrera, intentamos cumplir con la difícil tarea de poner en palabras las sensaciones que despierta la experiencia Steph Curry. Los encargados para ello son dos de los miembros del staff de NBA.com en español, Agustín Aboy y Juan Estévez, quienes analizan estos 12 años de carrera del base en la NBA y buscan las definiciones, momentos y legados que más asociamos con el nacido en Akron.
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Juan Estévez: Estamos a solo días de que Steph Curry cumpla con algo que a esta altura es poco más que una formalidad: superar a Ray Allen y transformarse oficialmente en el mayor triplista de todos los tiempos en la NBA. Y digo formalidad no porque el hito no sea de inmenso valor, sino porque la realidad es que la mayoría de nosotros pensamos en Steph como el mejor tirador de todos los tiempos, tenga ese récord o no. Pero lo que sí nos ofrece esta oficialización de su liderazgo en esa área es la oportunidad perfecta para mirar atrás y hacernos una pregunta: ¿En qué pensamos cuando pensamos en Steph Curry?
Material para elegir hay muchísimo, pero Agus, cuando pensás en la carrera del base, ¿qué es lo primero que se te viene a la mente como lo más relevante?
Agustín Aboy: Bueno, Steph ha conseguido de todo. Muchos logros individuales como este gran récord que conseguirá, varios títulos, ser parte clave de uno de los mejores equipos de la historia. Pero algo que será recordado más allá de ver su palmarés y que habrá que explicar al hablar de él dentro de un par de décadas es todo el espectáculo que Curry genera. Steph es un grandísimo deportista y también entretenimiento puro. Y nadie más en la historia de la NBA ha generado tanto show desde el tiro de tres puntos.
Han habido jugadores impresionantes por su altura, por su plasticidad, por sus volcadas. Y han habido grandes tiradores antes de Curry, mencionaste a Ray Allen pero también tenemos a Reggie Miller por ejemplo. Sin embargo nadie hizo de su tiro un arte semejante. Nadie hizo que los aficionados se preocupen por ocupar sus asientos en el estadio una hora antes del partido para verlo practicar sus tiros o para verlo realizar cosas cuasi circenses, lanzando desde la tribuna.
Curry pegó al televisor los ojos de muchos fans casuales que ven en un jugador de un físico relativamente pequeño para ser una súperestrella de la NBA a alguien capaz de hacer que sea imperdible hasta el primer cuarto de un partido, porque nunca se sabe cuando puede encestar tres o cuatro triples consecutivos como si fueran tiros libres. Y eso ocurre bastante seguido.
Steph Curry's 3 contested threes in a row late in the game to cut the deficit to 1
— Antonin (@antonin_org) December 10, 2020
how many players have ever done this in a close playoff game? probably not that much pic.twitter.com/EANGrxSjXF
Juan Estévez: Bueno creo que lo que mencionas de los entrenamientos previos y los tiros circenses es un buen ejemplo de todo lo que despierta en el público, ya no solo desde el juego en sí mismo, sino desde el show. Ver a Curry en vivo debe estar a la altura de pagar una entrada por el Cirque du Soleil o ver el mejor show de magia del mundo.
Es un espectáculo en sí mismo.
As we await the start of @OKCThunder/@Warriors (9pm/et @ESPNNBA), take an inside look into Steph's pregame routine!https://t.co/x75LrqBiPV
— NBA (@NBA) February 7, 2016
Si lo pensamos, creo que en las décadas post-MJ nunca hemos visto un caso así. En cuanto a ese show, quizá lo más parecido haya sido Kobe en sus años más anotadores, pero por diferentes motivos no era una figura con tanta aceptación general del público como es Steph, incluso para gente que no sigue tanto la NBA.
Mejores jugadores hemos tenido en estos años... LeBron, Shaq, Duncan, quizá los mismos Bryant o Durant. Pero ninguno tan asociado al espectáculo y al entretenimiento más puro como el base de los Warriors.
Agustín Aboy: Steph se transformó en ese show puramente por lo que hace dentro de la cancha, sin polémicas fuera, sin hechos extradeportivos que extrapolen su figura a otros ámbitos. Y como mencionas esos jugadores pueden haber sido más dominantes que él en el básquet, pero no parecen haber generado ese nivel de atención y diversión de un espectador neutral. Y aunque en la NBA siempre hay muchísimo talento, será complicado que se repita.
Juan Estévez: ¿Hubo algún momento en particular que sientas que lo terminó de catapultar a ese lugar? Creo que a todos nos quedó grabado ese triple ganador ante OKC...
The Steph dagger in OKC turns four years old today. @SLAMRewind pic.twitter.com/zefZh9dL9b
— SLAM (@SLAMonline) February 27, 2020
... lo cual es raro, porque hablamos de un partido de Fase Regular. Pero por algún motivo, me acuerdo de estar viéndolo y pensar: nunca vi un jugador en el nivel en el que está hoy Steph.
Agustín Aboy: Se me mezclan un poco los tiempos ya con más de una década de Steph en la NBA, todavía tengo presente su debut en Playoffs allá por 2013 cuando conocimos a los Splash Brothers por primera vez. Pero creo que coincido en aquel partido en Oklahoma, casi una coronación de lo que fue la temporada en la que de golpe Curry parecía imposible de frenar. Para entonces ya era campeón, ya había hecho cosas increíbles en las Finales. Pero aquel tiro fue como un "ok, esto que parece poder hacer de forma natural nadie lo hacía antes".
Juan Estévez: Es que me parece que ahí está la clave y lo que nos pegó a todos: ver a alguien dominar el juego de una manera que nunca antes lo habíamos visto. Steph es un pionero absoluto y de hecho, volviendo a la pregunta original, cuando pienso en él, me quedó con eso. Uno puede literalmente ver un antes y un después en la forma de jugar en la NBA (y poco a poco en el baloncesto general) desde la explosión en escena de Curry.
Obviamente volvemos a lo de que hubo jugadores mejores. Pero no sé si un Jordan o un LeBron tuvieron el impacto de Steph en ese sentido. En cuanto a cambiar la manera en la que se juega a este deporte, no solo en Estados Unidos sino en todo el mundo.
Porque si bien Curry hay uno solo, es innegable que la explosión del triple como arma protagónica está MUY relacionada al éxito de Steph y de sus Warriors.
Agustín Aboy: Totalmente. Una revolución que incluso no se quedó solo en la NBA. Por caso a LaMelo Ball, una nueva figura de la liga, lo empezamos a conocer en las redes sociales hace 3-4 años realizando a nivel escolar esas mismas jugadas de Steph. Su influencia sobre todas las generaciones venideras ha sido notable.
Juan Estévez: Revolución y espectáculo, me parece que encontramos dos palabras que sintetizan bastante bien la experiencia Steph Curry que venimos viviendo desde hace casi una década.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
