Bruce Arians anunció el lunes que Antonio Brown "ya no era un Buc" a raíz de su arrebato durante el partido de la Semana 17 del equipo contra los Jets. Sin embargo, el martes por la mañana Brown todavía estaba técnicamente en la lista de 53 jugadores de la plantilla.
El proceso de eliminar a Brown de la ecuación es una formalidad. Arians no le dará otra oportunidad después de la suspensión de tres partidos por tergiversar sobre su estado de vacunación y su actuación del pasado domingo en el campo. Y Brown ni siquiera viajó a casa con el equipo. No dejó Nueva York y fue visto en el partido de los Nets del lunes por la noche.
Antonio Brown did not leave New York it seems. He's at Barclays Center for #Nets-Grizzlies pic.twitter.com/06iTY3xFwF
— Christian Arnold (@C_Arnold01) January 4, 2022
Dicho esto, ¿por qué los Bucs esperan para separarse de Brown? Todo es puro procedimiento. Mark Maske, de The Washington Post, informa que el equipo está discutiendo con la NFL sobre la manera en la que deben liberar a Brown.
Es casi seguro que los Buccaneers liberarán al receptor en los próximos días, pero es posible que hayan querido saber su estado en la liga antes de hacerlo. La NFL no está planeando ninguna "disciplina impuesta contra Brown", por lo que pronto veremos si eso afecta los planes de Tampa Bay con el jugador.
De cualquier manera, parece que los Bucs se están tomando el tiempo necesario para asegurarse de manejar la liberación de Brown de la mejor manera. Y parece que su consulta es un esfuerzo de grupo, ya que la Asociación de Jugadores de la NFL también está "involucrada en las deliberaciones sobre el estatus de Brown", según Maske.
Entonces, a pesar de que Brown todavía estaba en la plantilla de Tampa Bay durante el martes, esto no debería durar mucho. Puede que permanezca en el roster por uno o dos días más de lo esperado, pero es casi seguro que no jugará otro "down" para los Bucs ni para ningún otro equipo de la NFL.