Tres carreras, tres problemas. Ese podría ser el resumen de lo que ha sido hasta el momento la temporada de Fernando Alonso en este 2022. Si en Bahrein fue la falta de ritmo y en Arabia Saudita un fallo mecánico, en Australia ha sido una conjunción de esos dos problemas lo que han privado al español de conseguir el resultado que esperaba. La vuelta a Melbourne acabó peor de lo que empezó para el piloto de Alpine que demostró ser sumamente veloz en los entrenamientos libres y la clasificación. El conocido error hidráulico que le llevó al muro en la Q3 fue el inicio de una serie de catastróficas desdichas que acabó con las esperanzas de Alonso.
Con las muñecas magulladas y el objetivo de poner al Alpine A522 en la zona de puntos que en origen esperaba, el español realizó una salida correcta. Su ritmo con el duro fue sorprendente pues mientras Sainz, Albon y Magnussen tenían problemas para mantener la posición, el español siguió en puntos. Así, cuando los medios de sus rivales empezaron a fallar él logró avanzar y colocarse en la cuarta posición virtual.
A partir de ese momento todo comenzó a ir mal.
En la vuelta 24 de 58 Sebastian Vettel tuvo un accidente que obligó a sacar el coche de seguridad, un momento demasiado temprano como para entrar en boxes y montar el blando e imposible a la hora de ir a dos paradas. Todos sus rivales por detrás entraron a montar el duro y en la reanudación tardaron poco en superarle con gomas frescas. La esperanza de Alonso residía en que el Safety Car volviese a salir y le beneficiase de cara al final. Algo que eventualmente sucedió con el abandono de Verstappen. Los franceses tardaron poco en aprovechar el virtual para cambiar gomas y poner el medio hasta el final.
En ese momento dependía única y exclusivamente de Alonso el poder remontar. Con 18 vueltas para el final y ubicado en decimocuarta posición, el español tenía en su mano recuperar puestos. No obstante, pronto quedó claro que pese a los cambios en el circuito y en la normativa, Albert Park sigue siendo un trazado donde adelantar es tarea compleja, más cuando por delante estaba un Lance Stroll defendiéndose con uñas y dientes.
El hecho de mantenerse tanto tiempo en el pelotón con aire sucio y tener una configuración de baja carga hizo que sus neumáticos degradasen más rápido de lo esperado. Su ritmo decayó, sus rivales le adelantaron y tuvo que entrar una vez más a boxes, quedando así último entre quienes terminaron. De hecho, esta es la primera vez desde su temporada de debut en donde acaba en último lugar al cruzar la línea de meta (GP Italia 2001).
Así finalizó su segundo juego de medios:
Graining. Así estaba el neumático delantero izquierdo de Alonso (compuesto medio). Ha tenido que hacer una segunda parada.
— Albert Fabrega (@AlbertFabrega) April 10, 2022
Graining. Alfonso's front left tyre (medium compound). He had to do a second stop#f1 #australianGP pic.twitter.com/gKIO7DNm9Y
Más | Sigue la Fórmula 1 en exclusiva en España a través de DAZN
De nuevo, Alonso ha sido incapaz de conseguir un resultado positivo justo cuando más opciones tenía de hacerlo. Ya sea por mala fortuna, degradación o pilotaje, el español no ha dado con la tecla para confirmar las altas expectativas que se tenían de él en este 2022.
"Sin palabras, para ser sincero", respondió Alonso en DAZN F1. "Es difícil de aceptar cómo está yendo todo en el camino incorrecto, aunque solo llevamos tres carreras y el campeonato es muy largo, por lo que espero que la suerte vuelva en unas citas. Creo que tendremos más suerte pronto, pero por el momento perdimos una sexta posición en Bahrein, otra sexta o séptima en Arabia Saudí. Sin el problema de ayer, el podio era muy fácil con Max [Verstappen] fuera".
El golpe sufrido en Australia es duro para el asturiano que ha visto cómo se le han escapado dos carreras seguidas en las que no solo habría batido a Esteban Ocon, sino que podría haberse colocado en una posición alta en el mundial.
"Creo que habríamos sido más rápidos que Mercedes, y George [Russell] está en el podio, así que perdimos una oportunidad", continuó. "El coche fue bien, empezamos con el duro, la estrategia contraria, así que nos costó un poco mantener la posición, y cuando el medio empezó a caer. Ahí empecé a pensar que la sexta o séptima plaza era posible, el ritmo estaba ahí".
Ahora el español deberá recuperarse rápido de cara a esta listo para un Gran Premio en Ímola donde Alpine podría traer novedades.
