Arturas Karnisovas llegó a Chicago Bulls en abril de 2020 y no tardó mucho en dejar en claro que su ambición como cabeza de la toma de decisiones deportivas era total. En ese momento, una de las franquicias más icónicas de la liga se encaminaba a su cuarta temporada seguida afuera de los Playoffs, en una etapa marcada por un núcleo joven que nunca pudo explotar y un par de entrenadores que no logró funcionar (Hoiberg-Boylen). La llegada de Billy Donovan renovó un poco el aire, pero fue a partir del arribo del ex Denver Nuggets que las intenciones cambiaron por completo. De la espera por la juventud, al nuevo enfoque con experiencia y jerarquía probada buscando llevar al equipo nuevamente a la postemporada.
Pocas offseason más fuertes e impactantes, al menos desde los nombres y propuesta, que la que acaban de tener los de la Ciudad del Viento. Y es que al plantel se sumaron dos de los agentes libres más importantes de este año: DeMar DeRozan (vía sign and trade con los Spurs, 3 años y 85 millones) y Lonzo Ball (también sign and trade con los Pelicans, 4 años y 80 millones). Además, llegó un refuerzo para potenciar el banco como Alex Caruso (4 años y 37 millones), más Tony Bradley (2 años y 3,8 millones) y Marko Simonovic (pick de segunda ronda de 2020, acuerdo por 3 años) como relevos en la pintura. Y más tarde cayó Derrick Jones Jr, atado a una salida.
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¿Cuál? La de Lauri Markkanen, quien era agente libre restringido y terminó acordando con Cleveland en un sign and trade que le dejó a los Bulls dos picks de Draft junto al ahora ex alero de Portland). ¿Quiénes más salieron? Principalmente Thad Young, quien había tenido una 2020-2021 brillante como sexto hombre (rumbo a los Spurs junto a Al-Farouq Aminu en la operación por DeRozan). Además, Tomas Satoransky y Garrett Temple se fueron a los Pelicans en el acuerdo por Lonzo; y Daniel Theis salió en la Agencia Libre (Houston) junto a otros nombres menores para la rotación (Denzel Valentine, Ryan Arcidiacono y Cristiano Felicio). Luego completaron el plantel con Alize Johnson, Matt Thomas y Stanley Johnson.
| Guardias | Perimetrales | Interiores |
|---|---|---|
| Lonzo Ball | DeMar DeRozan | Nikola Vucevic |
| Zach LaVine | Patrick Williams | Tony Bradley |
| Alex Caruso | Derrick Jones Jr. | Marko Simonovic |
| Coby White | Troy Brown Jr. | Alize Johnson |
| Javonte Green | Stanley Johnson | |
| Ayo Dosunmu | ||
| Matt Thomas | ||
| Devon Dotson (TW) | ||
| Entrenador: Billy Donovan | ||
A día de hoy cuentan con 16 jugadores bajo contrato y un two-way, por lo que ya no tienen espacio para más que otro contrato dual. Los Bulls tienen parte de su estructura configurada, entre ellas el quinteto inicial. Lonzo Ball llega para ocupar el puesto de base tan necesitado en el equipo en los últimos años, Zach LaVine a su lado, DeRozan junto a ellos, Patrick Williams (de gran Summer League y el único joven que queda con un rol seguro y consistente) como pilar defensivo y Vucevic como faro interior. ¿La gran duda? Cómo encajarán tres jugadores que necesitan la bola para ser efectivos (Lonzo, LaVine y DeRozan) y cómo se complementarán entre sí. Es más, el montenegrino también necesitará sus toques para producir en ataque. Interesante ver cómo se da el reparto de lanzamientos y toques (se necesitarán sacrificios).
La segunda unidad hoy está incompleta. Caruso funcionaría como líder, valioso por su aporte ganador en ambos costados, Coby White (ahora lesionado) podría ser la cuota de puntos automáticos, Jones Jr. y Troy Brown en las alas para rotar, y Bradley, Alize Johnson y Simonovic le darán descanso a Vucevic.
En definitiva, los Bulls jugaron all-in para un objetivo claro: regresar a los Playoffs. Apuesta fuerte y que sin dudas llama la atención para ver cómo se desarrolla.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
