Este 2021 parecía el año de Utah Jazz. Un inicio sorprendente con un estilo de juego renovado y un Donovan Mitchell a un nivel escandaloso eran la mejor carta de presentación para los de Salt Lake City, que daban la sensación de no conocer rival que les hiciera frente. Como ya sucediera en 2020 ante Denver Nuggets, una remontada se cruzó en su camino, en esta ocasión protagonizada por LA Clippers, que logró darle la vuelta a un 2-0 en contra así como sumar otros dos triunfos para sellar el pase a Finales de Conferencia, estos sin la presencia de Kawhi Leonard.
MÁS | Historia para LA Clippers: remontada de 25 puntos ante Utah Jazz para llegar a sus primeras Finales de Conferencia
La temporada del Jazz termina de un modo abrupto para Utah, casi injusto por el modo y la celeridad con la que se ha producido el descalabro de un equipo que no dio síntomas de tener grietas en ningún aspecto del juego. Tras completar la mejor campaña de todos los tiempos en cuanto a triples anotados por noche (16,7) con un 38,9% de efectividad, los Playoffs los vieron mantener ese mismo ritmo desde la larga distancia, e incluso incrementarlo con 18 conversiones por partido.
Sin embargo, esa brillantez en el costado ofensivo no ha sido correspondida por la defensa, que en postemporada ha ido diluyéndose, volviendo a quedar expuesto su sistema.
¿Qué le espera a los de Quin Snyder y compañía de cara a la offseason? Lo repasamos con todos los detalles a continuación.
Un muro en 2ª Ronda
La continuidad del proyecto pese a la decepción sucedida en 2020 fue la clave del éxito de este equipo en el inicio de la campaña. Un proyecto que fue renovado en su concepción de juego, dando una importancia principal al triple para explotar al máximo las virtudes tanto de Gobert como de Mitchell, ambos de un talento enorme para el juego ofensivo, el cual va más allá de la anotación. Su inicio con un balance de 24-5 fue un síntoma del momento que atravesaba el conjunto y de que estaban llamados a llegar lejos. Algo que finalmente no sucedió.
La temporada del Jazz ha concluido un año más en Semifinales de Conferencia, una barrera que siguen sin ser capaces de derribar desde hace 14 años. Esto se ha vuelto más duro de asimilar en la era Quin Snyder, pues las expectativas han tendido a ser altas debido al buen hacer de sus equipos durante la Fase Regular, especialmente en los últimos tramos, llegando a un gran nivel a la Primera Ronda. Los triunfos en 2017 y 2018 ante Clippers y Thunder fueron vistos con éxitos irrepetibles dadas las circunstancias, pero con el paso del tiempo y la propia evolución del plantel actual, Utah parece haber chocado contra un muro de cristal muy difícil de romper.
A día de hoy el plantel está muy equilibrado, quizás el que más de toda la NBA, sin que haya una posición en concreto en la que puedan tener más carencias puesto que son capaces de suplirlo de un modo u otro. Esto dificulta considerablemente todo movimiento desde los despachos, pero como la historia ha demostrado los planteles ganadores no son siempre los más equilibrados.
Para explicar el derrumbe del Jazz hay que acudir a la situación con Mike Conley, quien ha arrastrado problemas musculares en los isquios de la pierna derecha desde el mes de febrero. El base de 33 años solo ha podido disputar el sexto partido de la eliminatoria ante los Clippers, en donde se le vio falto de ritmo, carente de la seguridad que siempre demuestra y sin un ritmo competitivo como evidenció su 1 de 8 de tiros de campo y 6 pérdidas. El resultado ante los angelinos podría haber sido muy diferente con el veterano base disponible y a pleno rendimiento.
Utah ha ido perdiendo fuerza conforme ha ido avanzando la serie, arrancando a un excelente nivel en todos los aspectos pero progresivamente viéndose superado por los Clippers. Ty Lue y su staff han leído a la perfección las tendencias de la eliminatoria y lo que precisaban para poder tratar de ganar, algo que lograron tras ponerse 2-0 abajo. De igual modo que sucedió en el pasado, los angelinos han conseguido castigar a Rudy Gobert en defensa, exponiéndolo en divisiones, forzándolo a cambios y sacándolo de la pintura
El rendimiento defensivo del Jazz en general ha sido deficiente ante los Clippers, pero el francés no ha sido el principal responsable de la debacle, basta con ver que, de entre los que más han jugado, ha producido el segundo mejor ratio defensivo en cancha (121,9) solo por detrás de Joe Ingles (119,8), mientras que cuando ha salido del campo el dato del equipo se ha disparado a 135,1. La serie de los de Salt Lake City en defensa ha sido deficiente, volviendo a tener errores del pasado y sin conseguir trasladar lo conseguido en Fase Regular a los Playoffs. Esta derrota puede marcar un antes y un después en la franquicia y en el proyecto.
Situación salarial y necesidades
- Con contrato: Rudy Gobert (35M), Donovan Mitchell (28,1M), Bojan Bogdanovic (18,7M), Jordan Clarkson (12,4M), Joe Ingles (14,0M), Derrick Favors (9,7M), Royce O'Neale (8,6M), Udoka Azubuike (2,0M), Miye Oni (1,7M), Matt Thomas (1,7M), Elijah Hughes (1,5M)
- Agentes libres: Mike Conley, Georges Niang, Ersan Ilyasova, Juwan Morgan
Utah va a tener que concretar no pocos movimientos si quiere de nuevo tratar de conseguir llegar a Finales de Conferencia. El hito conseguido en la 2020-2021 al finalizar como primeros del Oeste puede ser un caramelo envenenado ya que podría generar unas expectativas excesivamente altas en un curso sumamente atípico, en donde los candidatos tradicionales han tenido diversos problemas para ser regulares. Una apuesta arriesgada en la Agencia Libre o un movimiento demasiado optimista podría romper con la fantástica estructura reinante en Salt Lake City.
La primera decisión importante que Dennis Lindsey va a tener que realizar va a tener como protagonista a Mike Conley, quien concluye contrato y está llamado a ser uno de los principales nombres de la próxima Agencia Libre. Cerca de cumplir 34 años, el base de Arkansas ha renacido en esta campaña tras dejar atrás sus problemas físicos y de adaptación al medio, siendo el manejador de élite que el Jazz necesitaba para acompañar a Mitchell.
Esto hace que con los 134 millones garantizados que tienen como equipo para la 2021-2022 no tengan mucho margen de maniobra para actuar con Conley, cuya pérdida obligaría a realizar un movimiento complementario que le diese empaque al grupo. En caso de no querer renovar a la baja, el base podría optar a salir al mercado y firmar un último vínculo lucrativo en otro destino.
En segundo lugar está la cuestión de Georges Niang, un tipo que ha acabado labrándose una carrera en la NBA a base de defensa e intangibles y que a sus 28 años será Agente Libre. Aunque pueda parecer un jugador menor y sin apenas peso, el ala pivote ha logrado ser con el tiempo uno de los imprescindibles para Quin Snyder.
La principal baza del Jazz a la hora de negociar un posible traspaso va a ser que todos sus integrantes salen de una campaña muy positiva a nivel numérico y cuentan con salarios lo suficientemente atractivos como para recibir diferentes piezas complementarias que ayuden a crear un plantel profundo. Uno de esos podría ser Jordan Clarkson, quien ha alcanzado su pico de carrera, yéndose hasta los 18,4 puntos por noche, y al que le restan 3 temporadas de contrato, siendo la última opción de jugador. El valor de mercado del exterior no podría ser más alto y podría ser un movimiento interesante en caso de que Conley saliera.
Un movimiento más arriesgado podría involucrar a Rudy Gobert, recién nombrado Defensor del Año y que renovó por 205 millones el pasado mes de noviembre. Una operación a día de hoy un tanto compleja de considerar por la ascendencia que el francés tiene en el grupo pero que en Playoffs su aporte ha quedado más que entredicho.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
