Con sus 2,26 metros, Tacko Fall se convirtió una sensación entre el público de la NBA desde su aparición jugando para Boston Celtics en la última NBA Summer League.
El pivote senegalés pasó esa prueba inicial y la pretemporada, donde causó una "revolución" en el TD Garden de Massachussets cada vez que ingresaba a jugar, y se ganó un contrato con el equipo dirigido por Brad Stevens. Su prototipo físico ilusiona a los verdes de cara a poder desarrollar a un pivote que sea una verdadera complicación en el juego interior para los rivales, a pesar de que la NBA cada vez aleje su juego más fuera de la pintura.
Con un contrato dual que le permitiría estar unos 45 días junto al equipo de la NBA, el africano ya se pudo dar el gusto de debutar oficialmente en la mejor liga del mundo: disputó seis partidos, habiendo hecho su estreno el 26 de octubre de 2019 ante New York Knicks.
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Fall promedia 3,2 puntos y 1,8 rebotes en los 24 minutos que jugó en total, casi todos de los denominados "basura" por estar el partido definido excepto por el juego contra San Antonio Spurs realizado a principios de enero, en el que ingresó durante el segundo cuarto. Ese fue el partido en el que Fall más piso el parquet, con una planilla de cuatro puntos y tres rebotes en 10 minutos.
Pero más allá de lo trivial de su paso con el primer equipo, el verdadero desarrollo de Fall está ocurriendo junto a los Maine Red Claws, la franquicia de G-League afiliada a Boston Celtics. Ahí Tacko se está afirmando como uno de los mejores internos de la G-League, lo que es demostrado por unos números espectaculares de producción.
Fall le aporta un promedio de 12,9 puntos, 11,1 rebotes y 2,9 tapones por partido a uno de los mejores equipos de la Conferencia Este: Maine se ubica tercero con un récord de 28-14, a apenas un triunfo de conseguir la clasificación a Playoffs. Y el impacto del de Senegal en el balance de victorias y derrotas del equipo es muy notorio: los Red Claws ganaron 21 partidos y perdieron ocho con Fall mientras que sin él presentan un récord de 7-6.
Al principio del año Tacko sufrió en varios partidos de problemas de faltas, pero en sus últimos 10 partidos promedio apenas 2,1 infracciones por juego y logró empezar a afianzarse como una opción de ataque importante de Maine, de forma directa o castigando tras rebotes ofensivos: en siete de esos juegos realizó al menos ocho disparos al aro. Sus estadísticas elevadas por 36 minutos son tremendas: 19,9 puntos, 17,1 rebotes y 4,5 tapones por partido.
Fall es top ten de la liga en tapones por partido, rebotes por partido, efectividad en tiros de dos puntos, porcentaje de rebotes en ataque y defensa y rating defensivo (con 97 es el segundo mejor de su equipo, por detrás de Romeo Langford).
Todavía le falta mucho camino por recorrer para lograr empezar a ganarse un espacio en la NBA (por ejemplo mejorando en la línea de tiros libres, donde convirtió sólo 28 de 73 intentos), pero el potencial de Tacko está ahí. "Mejoró tanto como todos los demás", afirmó el entrenador Stevens hace unos días.
El mejor partido de Tacko en la G-League: al borde del triple-doble
El 8 de marzo Tacko tuvo la oportunidad de demostrar todo su dominio en la G-League. Maine, a pesar de la presencia de varios jugadores de Boston Celtics como Carsen Edwards y Vincent Poirier, perdió por 120-112 ante Windy City Bulls, pero el africano estuvo a nada de conseguir su primer triple-doble en el básquetbol profesional.
Fall firmó una planilla de 16 puntos, 14 rebotes (cuatro en ataque), nueve tapones y una asistencia en sólo 25 minutos. Además estuvo perfecto de cara al aro: metió los siete lanzamientos que intentó, todas definiciones cercanas al aro.
Tacko Fall nearly put up a triple-double with blocks 🌮
— SportsCenter (@SportsCenter) March 9, 2020
16 Pts
14 Reb
9 Blk pic.twitter.com/xC7KP4ttGI
Fall fue imparable en la pintura, tomando rebotes a dos manos con una facilidad pasmosa, anotando tras postearse y dejando en un acierto menor al 50% (21/44) al conjunto rival en los intentos desde la zona pintada a menos de tres metros del aro.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
