Cuando muchos pequeños detalles marcan la diferencia es difícil apreciar esa singularidad y se tiende a apreciar todo como una masa uniforme. La remontada de los Boston Celtics, que han pasado de estar 0-3 a 3-3 en cuestión de una semana, ha alcanzado el calificativo de histórica. Y no es para menos. Solamente en tres ocasiones previas se había dado esta circunstancia en más de 70 años de existencia de la liga.
Resulta imposible encontrar una única razón por la cual los verdes le han dado la vuelta. El despertar de Jaylen Brown, las rotaciones de Joe Mazzulla, la aparición de Derrick White, la veteranía de Al Horford... Sin embargo, hoy es posible detenerse en un aspecto que, pese a no contar con el reconocimiento y brillo de otros de sus compañeros, explica en gran medida el despegue de los Celtics en estos tres últimos partidos: Robert Williams III.
Para ilustrar la importancia de Time Lord cabe destacar las palabras que Mazzulla le dedicó tanto a él como a Horford al término del sexto duelo:
"Esos dos tipos probablemente no obtengan suficiente crédito", reconoció. "Son elementos básicos para nosotros en ambos extremos de la cancha. Cuando juegan a alto un nivel de físico y con presencia somos un equipo diferente. Hay un montón de gente en nuestro equipo que tienen diferentes dones que aportan al grupo, y Al y Rob son dos que brindan una sensación de alegría y solo una sensación de estabilidad. Realmente confiamos en ellos para [la defensa]".
Pero, ¿cómo ha conseguido Robert Williams III ser un factor diferencial jugando apenas 19,7 minutos en toda la serie? Es momento de analizarlo en La Posesión.
Aquí comienza "La Posesión", una sección en la cual el Staff de The Sporting News NBA analiza una acción en particular de un determinado partido de los Playoffs, revelando detrás de ella un significado mucho más grande del que parece.
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La Posesión
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El impacto de Robert Williams en la remontada de Celtics
En esta acción concreta suceden muchas cosas. La primera -y que condiciona toda la posesión- es una jugada maestra de Joe Mazzulla. Al prepararse para recibir y atacar al poste bajo, Bam Adebayo ha quedado emparejado con Jaylen Brown en el balance defensivo. Esto, que podría ser una canasta sencilla para el interior, acabará por convertirse en un caramelo envenenado. ¿Por qué? Porque se trata de un señuelo. Los Celtics le lanzan el anzuelo a Adebayo y este cae por completo.
En el instante en el cual el jugador de Miami cree tener todo bajo control, con un desajuste claro ante un alero, los Celtics cambian su marcaje en cuestión de décimas de segundo para que salte Williams sobre Bam. Esta táctica se le conoce como "scram switch" y fue popularizada por Brad Stevens hace ya ciertos años, de tal modo que el núcleo del equipo lo domina como ningún otro en toda la NBA.
Adebayo, en lugar de cambiar sus pivotes y castigar un esfuerzo más largo a Williams, decide atacar al centro, justo de donde viene su nuevo defensor. Puede que la decisión estuviera motivada por el hecho de ser diestro y así estar en disposición de lanzar con su mano dominante, pero la realidad es que la intervención de Time Lord no puede ser más acertada.
Rob modifica y aleja a su emparejamiento de la canasta, de tal modo que pasa de estar en disposición de hacer una bandeja o un gancho corto a realizar un tiro en suspensión forzado.
¿Cómo lo hace? Modulando sus pies con la rapidez y precisión de un bailarín:
Pero claro, la acción no termina ahí, pues tras el fallo la bola sigue en posesión de Miami, concretamente en manos de Jimmy Butler.
En el mismo momento que Butler se hace con la pelota, Williams organiza la defensa ordenando a Tatum que ocupe la esquina (emparejado con Lowry). Una decisión que permite a Time Lord permanecer cerca del aro con Strus y en disposición de condicionar la incursión de la estrella rival, cosa que consigue finalmente con una intervención de libro.
Y es que el gran talento de Robert Williams en defensa reside en su timing a la hora de saltar a la ayuda, tanto por el momento en donde interviene como por cómo absorbe los contactos.
Esta (larga) posesión sirve para ilustrar en cierta medida cómo Williams logra impactar a nivel defensivo ante el complicado esquema de ataque de Miami. Y quien más lo está sufriendo es Bam Adebayo, quien ha lanzado al 33,3% en esta eliminatoria cuando ha sido defendido por Rob en las 82 posesiones en las que se han cruzado sus caminos.
Un Adebayo al que la serie se le está haciendo especialmente larga:
Y también al poste bajo:
El problema con Robert Williams III siempre será la disponibilidad debido a sus problemas crónicos de lesiones. Una limitación que se aprecia en su bajo volumen de minutos, pero que también ha permitido a Joe Mazzulla concentrar su presencia en dosis que eleven la defensa de Boston en momentos cruciales.
El jugador de los Celtics suele sufrir cuando tiene que dar un paso adelante en emparejamientos individuales, por eso mismo Mazzulla ha encontrado el modo de usarle como punta de lanza con defensas agresivas y donde ejerza como líder de la primera ayuda.
Al igual que en el bloqueo directo:
Puede que Mazzulla no use del mismo modo a Robert Williams que Ime Udoka; también las condiciones físicas del interior han empeorado, pero hay que romper una lanza a favor del técnico debutante por su creatividad y valentía a la hora de buscar formas diferentes de plantear su defensa. Más si se tiene en cuenta que Bam Adebayo anotó el 77% de los intentos en los que fue defendido por Time Lord en los pasados Playoffs.
Con 3-3 en la eliminatoria, el séptimo partido dictará sentencia en la que es ya una serie para el recuerdo y donde los pequeños detalles, como la defensa de Robert Williams, han servido para devolver la igualdad a lo que parecía un barrido irremediable.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.
